Capítulo 9 Por favor llámame héroe

"Tengo algo más que hacer, así que tengo que irme ahora". Rachel recogió su bolso y estaba a punto de huir cuando una mano la detuvo.

Layton entrecerró los ojos y forzó una sonrisa, "Pequeña belleza, oh, lo siento. ¿Cherry se va tan pronto? Puedo llevarte a casa. "

¿Estaba borracho o tenía fiebre?

"No hay necesidad." Después de decir eso, Rachel intentó deshacerse de su mano, pero Layton simplemente la estaba molestando sin cesar.

No fue culpa de Layton Li. Había estado en un club nocturno desde que tenía quince años. Con su apariencia hermosa y antecedentes familiares superiores, siempre eran las niñas las que tomaban la iniciativa de acercarse a él y aferrarse a él. No era la primera vez que conocía a alguien tan difícil como Rachel, y al final la había conquistado fácilmente. Por lo tanto, cuanto más frío estaba el oponente, más desafiante era Layton.

Después de decir eso, Layton intentó acercarse a ella nuevamente. ¿Quién era Rachel? ¿Seguiría siendo amable contigo si estuviera impaciente? Se arrodilló frente a Layton.

"¡Ay! ¡Estoy muriendo! Layton no esperaba que ese pequeño pimiento pudiera ahogarse tanto. Se cubrió la entrepierna y se inclinó para aullar de dolor.

Te lo mereces. Rachel lo maldijo y luego dejó la barra.

Por eso practicaba a menudo con estos jóvenes. Los hombres y mujeres que solo sabían derrochar su dinero todo el día no sabían cuántas personas aún no podían cenar y cuántas personas renunciaron a sus sueños por la realidad.

En opinión de Rachel, robar la billetera de esas personas para ayudar a los necesitados era robar a los ricos y ayudar a los pobres.

Cuando no había que hacer ningún pedido importante, buscar "gordos" en el bar o en lugares abarrotados era su "práctica básica requerida" todos los días. No solo podía practicar, sino también robar dinero para ayudar a los pobres. Cuanto más difícil era, más emocionada estaba.

Layton estaba tan dolorido que le gritó a Brian: "Oye, hombre muerto, ven aquí y envíame al hospital. No voy a tener descendencia gracias a esa chica ".

El ruido del DJ resonó por todo el bar y nadie escuchó la voz de Layton en absoluto.

El hombre al lado de Brian notó a Layton. Le dio una palmada en el hombro y dijo: "Sr. Bian, parece que el Sr. Layton te está llamando ".

"Oh, solo ignóralo." Como Brian había bebido demasiado, no estaba de humor para hablar con Layton.

Aunque el 'óvulo' fue doloroso, no fue hasta el punto de perder un hijo o de ir al hospital. Layton fue un poco exagerado. Había planeado ganarse la simpatía de sus colegas, pero no esperaba que nadie se preocupara por él en absoluto.

Con una cara triste, se acercó a Brian y le dijo: "¡Maldita sea! No me dejes ver a esa chica de nuevo. Casi me mata a patadas ". Luego tomó la bebida Blue Eye de Brian y se la bebió solo.

"¿No conseguiste ese ventilador sin cerebro? Has perdido tu habilidad. Esa mujer debe tener grandes pechos y no tener cerebro. "Mientras Brian hablaba, volvió la cabeza y pellizcó la delgada cintura de la mujer a su lado. La mujer se inclinó en sus brazos y le entregó una taza de Ramos.

La mujer sonrió alegremente con la cara roja. Al ver que Brian se bebió el líquido azul del vaso de un trago, le pellizcó la barbilla y la besó suavemente en la cara con una sonrisa.

Layton miró el encantador paisaje a su lado, bebió una botella de vino y lo regañó: "Bastardo, ya es suficiente. ¿Por qué irrita a una persona que sufre de "dolor de huevos"? ¡Ve a California mañana por la mañana, rompecorazones! "

En los últimos dos años, el Orfanato Mars había recibido casi diez donaciones anónimas, cuyo monto total superaba los quinientos mil dólares. Cada vez que alguien metía en secreto el dinero en la rendija de la puerta de la habitación del antiguo presidente, con solo dos palabras "La Donación" escritas en él.

Rachel trepó por el muro y entró en el orfanato. Sacó de su bolso un grueso montón de dinero envuelto en una bolsa de papel, sacó un bolígrafo y escribió la palabra "La Donación" como de costumbre. Luego le hizo un gesto con el dedo y lo metió en la rendija de la puerta de la habitación del decano.

Hoy fue un poco temprano. El director del hospital parecía haberse quedado dormido. Tan pronto como Rachel metió el dinero, el sonido de pasos atravesó la puerta. Entonces, el director del hospital gritó en el interior: "¿Puede dejar un nombre para una persona de buen corazón? Es realmente anónimo cada vez ... "

Antes de que el viejo director pudiera terminar sus palabras, Rachel ya se había subido al muro y se había ido.

El viejo director abrió la puerta y vio a la figura negra trepar por la pared. Encendió la luz y vio una bolsa de dinero, una bolsa de papel y la misma letra en el suelo. Cogió el dinero y suspiró: "No le he dicho al donante que el orfanato está a punto de ser destruido".

Después de poner los pies en el suelo, Rachel murmuró: "Es tan peligroso. Casi me encuentran ". Palmeó los cien dólares restantes en su bolso y estaba a punto de comprar un bocadillo nocturno para Noah Qin.

Rachel era huérfana. Cuando tenía once años, sus padres murieron en un accidente automovilístico. La llevaron a este orfanato y vivió medio año. Poco tiempo después, fue adoptada por su amo actual. Después de cambiar su nombre, se enteró de los robos de su maestro.

Al principio, trabajó muy duro. Su maestra fue muy estricta. Después de la escuela primaria, también supo que no era bueno robar. También fue muy resistente y no estudió mucho.

Más tarde, el maestro la llevó a ver muchas películas, que eran básicamente el tipo de espadachines, ladrones divinos, hombres extraños y flores de ciruelo. También le dijo que si aprendía a robar, podría ayudar a muchas personas.

Más tarde, Rachel no lo rechazó. ¿Se podría decir que tenía mucho talento? Aprendió tan rápido que incluso Noah se sorprendió. Fue esta mañana cuando la primera tarea oficial de su vida se completó sin problemas. Fue el caso de robo de joyas del grupo Bian.