Capítulo 5 Sumido en la oscuridad

Dark.

Los ojos de Mary me observan cargados de una mezcla de miedo y rencor que solo me divierte, esta estúpida cree que por ser la esposa de Seth me voy a contener. Me da justamente lo que quiero y si no lo hace le pasara lo mismo que al resto.

- ¿Y bien Mary? - ella respira profundo y cierra sus ojos removiéndose incomoda en el sillón.

- ¿Qué coño quieres? - me espeta.

Recordándome que estoy delante de la hija de un cabecilla de la mafia Italiana y que todos absolutamente todos los miembros de estas putas familias creen que son más que los demás, solo porque tienen asesinos entre ellos.

- Mary, no lo provoques mas ¿quieres? - murmura Claus con fastidio desde el rincón donde permanece intentando colocarse la franela.

- Vete a la mierda Claus...- suelta tajante.

- ¿Dónde está Griffin? - insisto en la puta pregunta.

- Ya te dije que...- no la dejo continuar, ya que estampo el dorso de mi mano en una de sus mejillas.

El golpe la hace girar el rostro nuevamente hacia un costado, un sollozo se escapa de sus labios y la frustración comienza a hacerse camino en mi pecho.

- No me mientas...- le espeto acercando a su rostro, tomándola de la mandíbula y obligándola a verme.

- No tengo idea de donde coño esta...- suelta mirándome con fuego en la mirada.

Tomo el arma una vez más y hago presión en su mandíbula obligándola a abrir su boca, ella forcejea un instante pero en cuanto me ve a los ojos se tranquiliza, cuando lo hace coloco el cañón de mi arma dentro de su boca.

- Te dije que podíamos hacer esto rápido o malditamente doloroso...- sus ojos se abren como platos cuando meto un poco más el arma en su boca y esta choca con sus dientes - ultima vez Mary, no pienso repetirme - le quito el seguro al arma.

- Dark...- la advertencia en la voz de Dark me hace mirarlo un instante antes de sonreír en su dirección y volver a fijar mis ojos en la pelirroja.

- ¿Dónde está el hijo de puta de Griffin? - por un instante su mirada me desafía y me veo tentado a volarle la cabeza incluso antes que responda.

Pero sus ojos se anegan en lágrimas y logro ver finalmente el terror que siente, intenta hablar pero al tener su mandíbula sostenida con mis manos y el arma en su boca se le hace imposible.

- ¿Qué? - pregunto solo por humillarla un poco más, intenta responder una vez más sin lograr hacerlo.

Cuando saco el arma de su boca, respira agitada y suspira mirando el suelo.

- No sé nada de Griffin desde hace meses...- suelta de sus ojos comienzan a caer lágrimas y de pronto busca mi mirada - desapareció de la noche a la mañana, estaba reuniéndose con unos hombres que venían a buscarlo, cada vez esas reuniones se hicieron más frecuentes y finalmente una noche no regreso - mi ceño se frunce.

- ¿Qué hombres? - pregunto, consciente que estamos hablando de los rusos o a los que Claus le dio caza.

- No lo sé...- suelta sin mirarme.

Respiro profundo y me pongo en pie sin dejar de mirarla, después de unos segundos su rostro se eleva y me observa.

- ¿Por qué estás buscándolo? - pregunta en un murmuro - Griffin nunca represento un peligro para ti, nunca si quiera lo llegaste a ver como un rival, ¿Por qué este repentino interés? - su pregunta no hace más que cabrearme, porque ciertamente Griffin nunca significo la gran cosa.

Pero le di tantas largas a este asunto que sencillamente lo deje pasar por el simple hecho de mantener a Nisha conmigo. El pensar en ella acelera mi corazón y la sensación de desasosiego me invade una vez más.

- Mary ¿sabes cuál es la especialidad de Claus verdad? - pregunto rascando un costado de mi barba, mientras sonrió con burla a mi "mejor amigo".

Claus se tensa de inmediato mirándome con los ojos como platos, rio suavemente porque sé muy bien que está preocupado por Seth.

- Si, lo se...- comenta Mary tragando duro.

- ¿Alguna vez has escuchado hablar de sus métodos? - Se tensa de inmediato y asiente ligeramente - Claus es un ángel delante de mi Mary...- respondo inclinándome para tomar el cuchillo que llevo guardado en el cerca del talón.

Cuando lo saco tanto Claus como Mary se sorprenden, no soy de cuchillos la mayor parte del tiempo, pero cuando se trata de lastimar estos suelen ser efectivos. Vuelvo a tomar asiento sobre la mesa de centro y suspiro mientras jugueteo con la punta afilada del cuchillo.

- ¿Entonces no sabes quienes eran esos hombres con los que Griffin se veía? - pregunto una vez más.

Ella niega y respiro pesadamente, nunca me ha gustado hacerles daño a las mujeres, Mary dentro de todo, tiene cierta cantidad de mi afecto y siempre me pareció una mujer interesante, arriesgada y valiente. Pero hoy no es más que una simple cucaracha en mi zapato. Me inclino hacia el frente sin dejar de mirarla.

Coloco la punta del cuchillo sobre la herida de su muslo, solo apoyo la hoja del cuchillo para que entienda mi intención, de inmediato sus ojos se abren como platos y trata de apartarla. Por el movimiento que hace, su mano rosa el filo del cuchillo y se corta, soltando un jadeo. Sin poder evitarlo rio y hago presión sobre la herida, ella suelta un grito que lo llena todo y es como una maravillosa música.

- No voy a dudar ni un solo instante en hacerte daño Mary...- sus ojos me buscan anegados de lagrimar y cargados de odio.

- En cuanto Seth se...- inclino el cuchillo y lo hundo en la herida haciendo que se incline hacia el frente y grite con desesperación.

- Seth sabe cómo y dónde conseguirme cuando acabe contigo... tu esposo no me preocupa en lo más mínimo...- entierro un poco más el cuchillo en la herida de bala haciendo que se retuerza de dolor y sostenga mis manos.

- P-pa-ara...- jadea tratando de aparta mis manos, lo que consigue con ello que la hunda un poco más.

- Dark...- la voz de Claus me recuerda que sigue aquí y bufo fastidiado por sus constantes interrupciones.

Saco el cuchillo de la herida de Mary y me pongo en pie asesinándolo con la mirada.

- ¿Qué mierda quieres ahora? - Sonrió de lado al ver su expresión cautelosa - ¿quieres hacerlo tú? - pregunto en tono burlón.

- Ya te dijo que no sabía donde esta...- comienzo a reír a carcajadas y niego con la cabeza.

- Hazte un favor y lárgate si no quieres unirte a ella y si vas a quedarte no me jodas...- lo señalo con el cuchillo y regreso mi atención a la pelirroja que sigue jadeando sosteniendo la pierna herida - quítate la blusa...- le espeto mientras empiezo a deshacerme del chaleco antibalas.

- Dark todo tranquilo, ¿Cómo van? - pregunta Max por el canal abierto.

- de puta madre, avísame si tenemos compañía.

Mary continúa sosteniendo su pierna sin obedecer la puta orden que le he dado, suspiro y me acerco a ella tomándola del cabello para que me vea, sus ojos destilan odio y coraje.

- ¿Lo haces tú o lo hago yo? - le pregunto en un susurro.

- ¿Qué vas hacer, follarme? - pregunta, retándome.

- ¿En serio crees que no te hare pedazos antes de obtener lo que quiero para luego matarte? - le espeto inclinándome sobre ella.

Coloco el cuchillo en mi boca y tomo los bordes de su blusa en puños, tiro de ellos con fuerza desgarrando la tela, dejando a la vista un bonito y caro sujetador de color verde, de inmediato lleva sus manos sobre su pecho y rio.

- Claus...- llamo al idiota de mi mano derecha que se tensa al escucharme sujétala de espaldas a mí - Claus frunce el ceño pero hace exactamente lo que pido.

Cuando esta por acercarse a Mary esta comienza a negar con su cabeza, Claus la toma de uno de sus brazos y tira de ella con fuerza, poniéndola en pie, después de algunos segundos forcejeando logra sujetarla de los brazos con su pecho pegado al suyo, Claus busca mi mirada y sonrió de lado al ver como Mary se estremece entre sus brazos.

- 87...- murmuro, mientras comienzo a quitarme el cinturón.

- ¿Qué? - pregunta en un murmullo amortiguado Mary.

- 87 cicatrices tiene Nisha en su espalda por culpa del hijo de puta de Griffin, unas sobre otras...- Claus abre los ojos como platos, porque hay datos de la historia que no le permití saber, recordarlas solo aumenta el nivel de odio y cabreo que tengo.

Esta hija de puta convivio con ellos un tiempo y ambos sabemos que su hermanito no es ningún santo, ambos sabemos lo enfermo que esta y ella sin embargo nunca hizo absolutamente nada por ayudarla. Entonces recuerdo el día que nos vimos en el Iceberg y todo mi cuerpo se contrae.

- 87 malditas cicatrices alcance a contar en su espalda y estoy malditamente seguro Mary, que el enfermo de Griffin lo hizo más de 87 veces...- enrollo el costado de cuero en una de mis manos dejando el extremo que tiene la hebilla de metal libre.

Mis labios dibujan una sonrisa cruel cuando Claus ve lo que hago.

- Pero digamos que no me pone hacer esto y al enfermo de tu hermano si...- hago una pausa y suspiro antes de elevar mi brazo y dejarlo caer con fuerza sobre su espalda.

El contacto con el cuero la hace estremecer pero en cuanto la hebilla pellizca su piel clavándose en ella grita y se retuerce de dolor. La marca roja que se marca en su piel termina en un feo rasguño que de inmediato empieza a sangrar.

- No me pone para nada...- rio por lo bajo - pero lo disfruto bastante.

Elevo mi brazo una vez más y dejo caer el cinturón sobre su espalda, haciendo pequeños cortes en su piel mientras ella se retuerce y grita con desesperación apoyada contra Claus, quien me ve entre sorprendido y acojonado. Repito la acción algunas veces hasta que su espalda está completamente cubierta de sangre.

- ¿Quiénes son los hombres que estaba viendo Griffin? - le pregunto acercándome a ella.

Apoyo mi mano en su espalda y me afinco solo para torturarla, ella gimotea mientras Claus la sostiene, ella apenas y puede mantenerse en pie. Es suficiente por ahora, no quiero que muera sin estar completamente seguro que me dice la verdad.

- Mary...- la llama Claus en un murmullo - ¿sabes quiénes son? - ella eleva un poco su rostro y ve a mi mejor amigo que suspira.

- No...- jadea haciendo que me tense.

- Mary necesito que me des algo que valga la pena, sino habrás sufrido por nada...- me burlo en su oído antes de retirarme y echarme andar hacia el mini bar.

Tomo el vaso y me sirvo un trago, el cual bebo de un solo trago antes de dejarlo nuevamente. Cuando me giro Claus está acomodando a Mary sobre el sillón de costado, rio al ver que tiene cuidado de no lastimar aún más su espalda y niego con la cabeza.

- Si estas consciente que esa hija de puta esta tan enferma como el hermano ¿no? - le pregunto mirándolo con curiosidad.

- Mary no me importa en lo mas mínimo Dark...- comenta acercándose a mí - me preocupa Seth...- en cuanto suelta eso comienzo a reír.

Entiendo su preocupación si hay alguien con los cojones lo suficientemente grandes para enfrentarme es Seth y sé muy bien que acabo de poner un obstáculo más en mi camino hasta cierto punto, pero sigue siendo alguien con mucho menos poder del que tengo. Me encojo de hombros y me fijo una vez más en Mary que esta medio inconsciente en el sofá.

- ¿Vas a matarla? - pregunta de repente con la misma curiosidad con la que solía hablarme.

- Si...- mi respuesta lo hace mirarme sorprendido.

- Dark no creo que sea conveniente...- suspiro y asiento.

- Lo sé, pero no me importa, se lo merece...- el suspira y me ve un instante.

- Ambos conocemos a Griffin, si la matas solo incrementaras su odio hacia ti, si la usas para hacerlo salir...- lo veo un instante y sonrió.

Esa idea la considere en cuanto supe que Mary estaba en la mansión, ella es una de las personas más importantes para él, pero sé muy bien que en este punto su nivel de obsesión con Nisha mucho mayor.

- Si tiene a Nisha la pagara con ella...- comenta haciendo que mi cuerpo se tense.

- Si lo hace deseara con cada fibra de su ser que lo asesine en cuanto lo vea...- murmuro caminando hacia Mary una vez más.

Me siento en la mesa de centro y suspiro, antes de tomarla por sus hombros y moverla con brusquedad.

- Mírame...- le pido, sus parpados se abren lentamente y al verme comienza a llorar.

- Basta Dark...- me pide - si supiera algo ya te lo habría dicho, no estoy con Seth porque esperaba que Griff regresara...- comenta y sonrió finalmente sabiendo que esta es la verdad - solo me dijo que eran rusos...- murmura cerrando sus ojos una vez más - y que lo ayudarían con los negocios - asiento y aparto un mechón de cabello rojo de su rostro, con delicadeza.

- Eres una mujer hermosa y muy inteligente, habría gozado un imperio torturándote pero vas hacerme un favor...- murmuro inclinándome sobre su oído - cuando Griffin vuelva le mostraras tu espalda y le dirás que recuerde muy bien todas y cada una de las mierdas que le hizo a Nisha porque no descansare hasta capturarlo y hacerle exactamente lo mismo - Mary se estremece con mis palabras y sonrió, dejo un beso sobre su cien y me pongo en pie.

- Malcom, trae la gasolina y procede con el resto del plan...- en cuanto ambos escuchan la orden se sorprende.

- Sí señor.

- ¿Dark? - Murmura Mary intentando ponerse en pie - ¿Qué haces? - me giro para verla y sonrió una vez más.

- Acabare con todo lo que le importa Mary...- observo a Claus que continua serio - tráela...- le espeto antes de tomar mi chaleco antibalas y salir de la habitación.

Mientras desciendo las escaleras hacia el exterior solo puedo pensar en lo que acabo de hacer y el placer que sentir, no puedo evitar sentir gusto de hacerle pagar un poco a ese bastardo. Cuando estoy en el exterior mis hombres se acercan a mí con bidones vacíos de gasolina.

- Todo el exterior de la casa está cubierto...- asiento mientras espero que Claus salga con Mary.

- ¿Qué vas hacer con ella? - pregunta una vez me alcanza.

- Tiene trabajo que hacer...- respondo con simpleza sin mirarlo - dejala aquí, vuelen el lugar...- comento echando andar hacia la camioneta, donde un par de mis hombres esperan - andando Claus tenemos un asunto pendiente...- me subo en la camioneta y espero a que el resto de mis hombres suban.

El último en hacerlo es Claus, que me observa con curiosidad.

- ¿Por qué dejarla? - sonrió mirando por la ventana en dirección a donde Claus ha dejado tirada a Mary.

Esta como puede está intentando ponerse en pie, cuando lo hace le doy la señal a Malcom para que arranque, en cuanto nuestras miradas se encuentran sonrió.

- Max...

- ¿Si Dark? - responde por el canal abierto.

- Su pierna derecha luce muy bien... has algo para resolverlo...- Claus se gira sobre sí mismo y mira hacia el exterior.

Mary se ha puesto en pie y ha comenzado a caminar para alejarse de la casona, sus ojos se posan una vez más sobre mi sorprendido.

- ¿Estás seguro? - pregunta Max dudando.

- Hazlo...- murmura Claus antes que yo pueda responderle y sin más a los pocos segundos escuchamos un grito de dolor, sonrió complacido.

- Jasón vuela la casa...- sin más apoyo mi cabeza en el asiento y cierro los ojos aguardando el ruido de la explosión, que ocurre segundos después.

- Este hecho señor...- confirma Jasón lo obvio.

- A casa señoritas...- comento con fastidio mientras me sumerjo en mis pensamientos.

Recogemos a Max y nos disponemos a regresar a La Mansión, el camino lo hacemos en completo silencio, el trabajo se hizo pero no me siento si quiera un poco más tranquilo, sigo en el mismo jodido punto, no sé dónde está Griffin, no sé dónde está Nisha. Solo espero que este bien y ese maldito no la esté torturando.

Cuando llegamos a La Mansión mis hombres se dispersan mientras Claus desciende de la camioneta sujetando su hombro. Se detiene un instante frente a mí y suspiro.

- Te ves horrible...- me burlo haciendo que medio sonría, paso por su lado y antes de entrar a la mansión comento en tono despreocupado - fallaste un tiro Claus...

- Maldita sea...- lo escucho refunfuñar y rio echando andar hacia mi habitación necesito una ducha antes de encargarme de él.

Max.

Veo a Dark perderse detrás de la puerta principal de la Mansión y de inmediato me acerco a Claus que luce realmente mal, no sé qué paso dentro de la mansión aunque me hago una idea, porque Dark nunca corto la comunicación con nosotros, dejo el canal abierto por lo que todos fuimos capaces de escuchar lo que dijo e hizo.

Este Dark, oscuro y frio nunca me ha gustado, aunque lo he visto actuar de esta manera muy pocas veces en todas y cada una de ellas, siempre había un montón de cadáveres a su espalda.

- ¿Cómo estás? Maxwell está aquí le pedí que viniera en cuanto me dejaron, tiene que revisarte...- comento preocupada mirando a Claus que parece ausente - ¿Qué pasa? - suspira y posa sus hermosos ojos en mí.

- ¿Qué sentido tiene que Maxwell me cure si va a matarme luego? - Ríe sin ganas y comienza a rascar su nuca - falle un tiro hermosa...- me explica y sonrió porque algo me decía que lo había hecho.

- Si hubiese querido hacerte algo lo habría hecho en ese momento...- Claus empieza a reír y niega con la cabeza.

Se acerca a mí y deja un cálido beso sobre mis labios antes de mirarme a los ojos.

- Max no conoces a Dark...- luego de esas palabras pasa junto a mí y se encamina hacia el interior de la mansión.

Sin más remedio lo sigo, ya que sé muy bien que no ira a ver a Maxwell a menos que lo obligue, en cuanto entro April se acerca a mí con expresión preocupada.

- El señor dijo que no cenaría...- comenta mirando hacia las escaleras y suspiro.

- No está de humor April, déjale algo en el horno por si le da hambre...- ella asiente y antes que pueda irse la llamo - ¿puedo pedirte un favor? - ella sonríe con calidez y asiente.

- Claro Max ¿que necesitas?

- ¿Puedes prepararle algo dulce a Claus? - April sonríe ampliamente y asiente.

- Por supuesto, por cierto el Dr. Maxwell está abajo - me indica señalando el pasillo que da hacia las instalaciones de Darkness.

- Gracias April...- me giro y voy en busca del doctor.

Cuando entro en el primer pasillo del primer piso de las instalaciones me topo precisamente con él, al verme sonríe con calidez y me saluda con un par de besos en la mejilla.

- ¿Cómo estás? - pregunta con amabilidad.

- Preocupada, pero bien...

- ¿otra vez Claus y Dark peleándose eh? - pregunta poniendo sus ojos en blanco y suspiro.

- Esta vez es un poco diferente...- el posa sus ojos sobre mí y sonrío con pesar - Dark está un poco fuera de si - Maxwell ríe a mi lado y suspira.

- No está fuera de sí Max, eso que está dejando ver es parte de su personalidad, es parte de su esencia es más podría jurar que es parte de su genética - lo veo un poco sorprendida y luego recuerdo que Maxwell conoce a Dark y Claus de toda la vida y gracias a ese conocimiento Dark lo hizo el médico de la organización.

- Si bueno...- murmuro no muy segura.

- ¿Qué paso esta vez, porque le disparo? - suspiro sin saber muy bien cómo explicarlo.

- Es complicado...- el medico vuelve a reír y asiente.

- Si, siempre ha sido complicado entre ellos... son la base emocional el uno del otro, pero Dark sabe muy bien que sin Claus puede seguir adelante y vivir su vida tal cual lo ha estado haciendo, aunque dudo mucho que Claus pueda vivir sin Dark tal cual lo conocemos...- su afirmación es la clara realidad de la dependencia de Claus hacia a Dark.

Pero siempre ha sido así, desde que eran niños y es algo que siempre he admirado en ambos, sobre todo en Dark. Y verlo ahora tan dispuesto a dañarlo no hace más que perturbarme.

- Si bueno es realmente complicado...- concluyo sin ánimos de continuar con la conversación.

Una vez alcanzamos la habitación de Claus doy un par de golpes en la puerta y aguardo a que este abra, pero al no hacerlo decido entrar sin permiso, no es como si no lo hubiera hecho antes, cuando entro me quedo de piedra, la estancia está bastante destrozada y hay ropa manchada de sangre en el suelo. Genial otra vez Claus saliéndose de control.

- Claus...- lo llamo encaminándome al cuarto de baño.

En cuanto me acerco al umbral me quedo estática al verlo, está en bóxer parado frente al espejo del lavabo tratando hurgando la herida de su hombro con sus dedos.

- ¿QUÉ MIERDA ESTAS HACIENDO? - le grito sobresaltándolo.

Por la sorpresa se lastima un poco más y corro en su dirección para ayudarlo, en cuanto me ve ríe sin ganas y abre el grifo para lavar sus manos ensangrentadas.

- ¿Te volviste loco? - le reclamo girándolo para ver la herida.

Todo su pecho está cubierto de sangre y la herida está un poco más grande que antes.

- No iba a llamar a Maxwell para esto cuando puedo sacarla yo mismo...- comenta con fastidio y lo veo mal.

- Maxwell está aquí idiota, te lo dije...- él pone sus ojos en blanco y se gira hacia la puerta en cuanto lo hace se detiene.

- Hola doc...- lo saluda en ese puto tono divertido que solo hace que me crispe.

- Claus...- lo saluda amablemente el doctor detallando su hombro - el bastardo te disparo en el mismo lugar - ríe negando con la cabeza y Claus suspira.

- Con lo que duele esta mierda...- vuelve a quejarse y el otro solo ríe una vez más.

- Venga ya, vayamos a curarte antes que hagas más desastre...- lo apresura, haciendo que Claus se mueve a en su dirección mientras lo hace mueve un poco el brazo y se queja de dolor - deberían encontrar una forma más sana de resolver sus asuntos - agrega Maxwell con ironía haciendo que Claus ría.

- Intente besarlo pero el muy maldito ya no le gusta el sabor de mis labios, ahora prefiere los de Nisha y como no está pues lo ha tomado conmigo...- suelta en ese tono burlón haciendo que una vez más vuelva asesinarlo con la mirada.

¿Cómo rayos puede estar tan tranquilo y hacer bromas de esto?

- ¿Vienes hermosa? - me mira sobre su hombro con esa media sonrisa pícara que lo caracteriza, convirtiéndose en el mismo Claus de siempre - necesitare de esas preciosas tetas distrayéndome mientras Maxwell me cura - comienzo a reír porque este es el Claus que me encanta ver.

Aunque sea molesto y muchas veces me exaspere, prefiero este Claus al frio tempano de hielo que era algunas semanas atrás.

- Si vamos, no vaya a ser que hagas una pataleta...- suelto negando con la cabeza y en respuesta solo me hace un puchero y no puedo evitar reír.

Una vez Maxwell ha limpiado el área con gasas, toma una inyectadora y anestesia el área haciendo que Claus lo vea con una sonrisa burlona. No sé cómo es que tiene tanta capacidad de aguante para el dolor, pero a veces en serio creo que disfruta con él. Mientras el doctor se encarga de sacar la bala me concentro en la forma en que su cabeza se apoya hacia atrás en la pared y fija sus ojos en la lámpara del techo.

Su mirada se pierde y se vuelve vacía conforme pasan los minutos, yo solo me quedo allí contemplando su perfil ligeramente embobada. Claus siempre ha estado para mí, aunque me moleste, aunque haya estado en muchas oportunidades dispuesta a meterle una bala en la cabeza, jamás lo haría él y dark son lo más preciado que tengo y lo que más amo en la vida.

Después que asesino a Rachel y desapareció me aterre, pensé que no volvería a verlo y de verdad creí que una parte de mí se había ido con él, mi vida no es la misma cuando este pedazo de idiota no está rondando.

- Vas a desgastarme y no podre follarte como un loco en la noche...- suelta repentinamente cuando Maxwell se gira quitándose los guantes.

- Bueno sabes lo que tienes que hacer ¿no? - pregunta ignorando por completo el comentario que acaba de hacerme.

- Si no te preocupes déjale todo a April ella se encargara como siempre... - comenta sin despegar sus ojos de la lámpara.

- Max...- pasa junto mi sonriendo - traten de meterse en líos ¿sí? - comenta antes de salir y Claus ríe.

- No entiendo porque simplemente no se queda en La Mansión - se queja y suspiro.

- ¿estás bien? - el posa sus ojos en mí y asiente.

Permanecemos en silencio mirándonos y luego con un rápido movimiento baja de la camilla y se acerca a mí, aparta algunos mechones de cabello de mi rostro y sonríe con picardía.

- ¿puedo pedirte algo? - murmura muy cerca de mí.

- Claro, ¿qué pasa?

- Déjame follarte como quiero...- mi ceño se frunce ante esas palabras y rio sin comprender.

- ¿Cómo quieres? - el asiente y suspira.

- Follarte como yo lo haría de verdad, no las mariconadas que solemos hacer...- acaricia mis labios con su pulgar deslizándolo hasta mi cuello, donde cierra sus manos con fuerza, me lastima ligeramente pero es todo lo que hace - Dark va a asesinarme y no quiero morir sin darte una probada de mi infierno - sonrió negando apenas con mi cabeza y tomo sus manos.

- Dark no va hacerte daño Claus...- murmuro tratando de creérmelo y que él lo haga también.

- Odio que seas tan ingenua a veces Max...- la voz de Dark me sobresalta y de inmediato Claus libera mi cuello - de verdad, creí que con el paso del tiempo, las mierdas que viviste y el estar con nosotros te haría ver la vida desde otra perspectiva pero veo que me equivoque...- suelta tajante.

Cuando me giro para verlo esta recostado al marco de la puerta, tiene sus fuertes brazos cruzados sobre su pecho, lleva un pantalón deportivo negro y una franela, además su rostro no expresa absolutamente nada.

- Que bueno que hayan resuelto lo que sea que tienen...- ironiza mirando a Claus - Rachel estaría increíblemente a gusto al saber que la superaste tan pronto.

Con la mención de esa mujer Claus se tensa de inmediato y lo asesina con la mirada mientras Dark simplemente sonríe.

- ¿Qué no te gusto el comentario? - comenta en tono burlón y es todo.

- Basta Dark estas siendo un idiota...- le suelto sin poder controlarme.

- ¿Y tú? - Responde en el mismo tono burlón - te di una orden hoy y ¿qué hiciste? - en cuanto esas palabras dejan sus labios me tenso.

La frialdad con la que está mirándome no se compara a la amenaza en su tono de voz.

- Dark yo...- empiezo pero me callo en cuanto se endereza y me asesina con la mirada.

En un par de pasos esta frente a mí su mano se cierra sobre mi cuello y siento como Claus detrás de mí se mueve para evitarlo, pero no hace nada más porque Dark lo apunta con un arma en la cabeza. Sus miradas se retan y después de unos segundos en los que creo que realmente tirara del gatillo solo desvía la mirada y posa sus oscurecidos ojos en mí.

- Vuelve a dudar y te mato...- suelta con frialdad apretando un poco más su agarre en mi cuello - ¿está claro? - asiento ligeramente y me libera - ¡Largo! - me empuja con cierta brusquedad haciéndome a un lado y quedando justo frente a Claus.

Ninguno de los dos dice nada, después de unos segundos Dark baja el arma y suspira sonoramente.

- Sal...- le espeta.

Claus lo ve un instante y luego de unos segundos pasa junto a él no sin antes chocar su hombro sano con el de Dark, lo hace solo para mostrarlo y ese simple y tonto gesto que en otro momento podría ser tomado por el como una simple broma lo hace estallar. Todo pasa tan rápido que no me da tiempo de reaccionar, para cuando logro moverme Claus esta contra la pared mientras Dark golpea su rostro una y otra vez, con tanta fuerza que en cuestión de segundos su rostro esta bañado en sangre.

- ¡PARA! - le grito, pero Dark no se detiene simplemente continua golpeando una y otra y otra vez el rostro de Claus.

Movida por la adrenalina saco mi arma y apunto a Dark con ella pero no me atrevo abrir la boca, sé muy bien que si se gira y me ve apuntándolo estoy muerta, así que simplemente hago lo más loco que he podido hacer en la vida, salto hacia el tratando de evitar el siguiente golpe. Pero es demasiada fuerza y por el impulso pierdo el equilibro y caigo al piso, tumbando la mesa de implementos médicos.

Mi empujón lo ha desequilibrado y ha llamado su atención, cuando sus ojos se posan en mí, me quedo de piedra, la mirada fiera, el odio, el rencor y la desesperación que veo en el rostro de Dark me rompe de muchas formas y es justo en este instante en que comprendo que todo esto se resume al dolor que debe estar sintiendo.

Y justo ahora lo comprendo, si algo le pasara a él o a Claus yo me moriría y el nunca había experimentado ese sentimiento, no hasta que ella llego a su vida, de inmediato mis ojos se anegan de lágrimas y sin pensarlo mucho me aferro a eso.

- Si lo matas Nisha jamás te lo perdonaría...- en cuanto las palabras abandonan mis labios su cuerpo se tensa tanto que creo que podría romperse.

Lentamente baja su mano que esta tan ensangrentada como el rostro de Claus, libera el cuello de este y lentamente se resbala cayendo al suelo, Dark me ve con reproche pero no dice nada durante unos segundos que se me hacen eternos. La tensión es demasiado grande y estoy loca por que reaccione y diga algo. Cosa que pasa un minuto después.

Sus ojos se desvían de mí y mira con desprecio a Claus en el suelo que tose ligeramente y escupe un montón de sangre a un costado de su cuerpo.

- Ultima oportunidad Claus...- suelta mordaz - si sales de esto, perdonare tu miserable vida pero comete otro maldito error y te saldrá muy caro...- se gira hacia mí y da un par de paso en mi dirección.

Aterrada por su actitud doy un par de pasos atrás y choco con la pared, él se detiene y ríe sin ganas.

- Atrévete ayudarlo y lo que le hizo Griffin a Nisha se quedara corto con lo que pienso hacerte...- mis ojos se abren como platos ante sus palabras.

Sin agregar nada más se gira hacia Claus y estampa la suela de sus botas en su rostro, haciendo que Claus caiga de lado completamente inconsciente. Luego se gira y sale de la habitación dejándome completamente en shock y sin saber que hacer.