- ¡Movió su mano!, ¡mi niña! –mi cuerpo era pesado y perezoso, me era complicado incluso respirar
- ¡Llama al doctor! - intente abrir mis ojos, pero hasta mis parpados pesaban, tomaron mi mano, era como si el tacto volviera todo real.
-Asgsm- eso sonó como un quejido o algo así como un balbuce, mis labios estaban dormidos
- ¿¡Estás hablando!?- su voz era suave y algo aguda- Cariño tenía miedo de que no te recuperaras- apretaba con mucha fuerza mi mano, estaba con cierto lio en mi cabeza no entendía que estaba pasando, ¿qué me pasaba? ¿cómo termine así?
-Querida el doctor- la puerta sonó aturdiendo mi cabeza
-Necesito que salgan un momento mientras la reviso- mi mano fue soltada, la habitación quedo momentáneamente en silencio
-Carolina, revisa sus signos- empecé a sentir el toque de las manos heladas y suaves en mis brazos.
-Son estables Doctor
-Lina Gales, seguro y estas aturdida, con una sensación de pesadez y sueño, esto es normal- hecho un gran suspiro- te haremos algunos estudios y tal vez mañana vayas despertando y puedas incluso sentarte- la voz de ese hombre era gruesa y algo rasposa
-Nada de alimentos apenas está despertando, ella debe mantener su postura y mañana daré nuevas instrucciones, eso es todo Carolina- se escuchó la puerta- nos vemos mañana señorita Gales; asi lo olvido su presión arterial es normal así que... retire la máscara de oxígeno.
2 Semanas en el hospital, día del alta
-Ella podrá recuperar la menoría o no, puede darle fuertes dolores de cabeza e incluso cambiar su ánimo de la nada, cabe la posibilidad que sus recuerdos vuelvan despacio o en un solo impacto, por lo que ella debe ser consciente de su pasado para no causarle problemas.
-¿Mi hija tal vez nunca nos recuerde?
-Así es- ambos tomaron sus manos y mi madre se dejó abrazar por mi padre, yo estaba a su lado
-No olviden los cuidados y su medicina, es todo- me llevaron hasta la puerta del hospital en una silla de ruedas donde aborde el carro de la familia.
Hace 3 meses tuve un accidente, estaba de paseo con mi familia y pedí subir a uno de los atractivos de la zona, el arnés que me sostenía se rompió y caí desde una altura de 10 m y tuve contusiones graves en todo el cuerpo, pero mi cabeza fue la más afectada, corría peligro de muerte y me indujeron al coma, desperté casi 3 meses después y no recordaba nada de vida, ni siquiera mi nombre.
Soy hija de la familia Gales, mi padre y madre tienen una empresa de cosméticos famosa en el país, soy la hija mayor y única ya que mi hermana menor falleció cuando tenía 8 años por un infarto ya que tenía problemas cardiacos, asisto a la universidad de CERS fundada por Cole Cerds un personaje muy conocido en la cuidad, voy en 1 año y me llamo Lina Gales, no asistí a clases ya que mi accidente fue 2 semanas antes del inicio de clases y tengo 18 años, esta fue la información que mi madre me dio.
-Hija deberías de estudiar en casa- ella era algo bronceada y tenía unos lindos risos en el cabello negro
-Madre, ya hablamos de esto, suficiente tengo con no conocer mi vida, será peor si me encierro aquí- en cambio mi padre era tan blanco y de un hermoso cabello color chocolate
-Nunca me hablaste así, me decías mamá y no madre- en su rostro se reflejó el dolor que sentía a mis palabras
-Madre no te conozco, siento si soy cruel, aunque la verdad es que te tengo miedo- hizo un gesto de dolor y tenía los ojos cristalinos.
-Es por eso que debes dejar que vuelva a familiarizarme con el mundo, tal vez así pueda recordar- tomo mi mano despacio
-Hemos llegado hermosas- mi padre que escucho todo anuncio la llegada a la que se supone es mi casa
-Está bien hija mía, está bien- soltó mi mano
Bajamos y el sol abrigo mi helado cuerpo, era una casa muy bonita y elegante, mi madre tomo mi brazo guiándome a la sala, la que estaba adornada con globos azules, globos dorados y un gran cartel de bienvenida.
-Bienvenida- varias personas saltaron a mi vista entre ellas una que llamo peculiarmente mi atención
-¿León?