Capítulo 9 Pecas

-Yo pienso que eres pelirroja -argumenta Hades.

-No es semi rubia -corrige Luke. Eso ni siquiera tiene sentido.

En erio estos dos si que son idiotas, llevan media hora discutiendo de que color es mi cabello. En el departamento no hay nada que hacer, evidentemente, así que ellos se tomaron la libertad de saber cual es mi color de pelo, y ese es el problema no se cual es el color de mi cabello, es muy loco siempre ha sido asi. En mis dieciocho años de vida nunca e sabido cual es mi color realmente. Tal vez se deba a que ella era pelirroja y él rubio, mis genes se negaron a sólo tener algo de uno.

-No importa que color sea ya déjenlo así.

Eso no pareció hacerme efecto a Hades puesto que aún seguía revolviendo mi cabello y ya me comienza a molestar su toque.

-Yo insisto en que eres semi rubia.

¿En que momento comenzaron a discutir sobre mí cabello?

-No Luke ya te dije que es pelirroja.

-Bien, dejen de molestar soy mixta.

Los dos que estaban muy concentrados en su discusión voltearon para mirarme con expresiones faciales muy diferentes.

Luke estaban con cara pensativa de si creerme o no y Hades bueno su cara era como: "¿en serio? me estas jodiendo ¿verdad, Brooke?"

-Podría ser -opina Luke.

En definitiva esta ha sido una de las conversaciones más locas que he tenido y Vaya que tengo conversaciones rara.

-Claro que podría ser imbécil, mi madre era pelirroja y mi padre rubio, esto salió-. Señale mi cabeza.

Fue en ese pequeño instante cuando un pequeño recuerdo de ellos vino a mi cabeza, uno que creo que lo había enterrado en el tiempo, sin embargo ahí estaba lo que antes fue felicidad torturándome con tristeza.

-Eso no lo justifica tenias que salir con los genes del uno, no con los...

Las palabras del chico provocará que volviera a la realidad dejando una vez de lado a mis triste recuerdos.

-Ya cállate, Hades, dije que soy mixta y además hablar de mi cabello ya me aburrió, mejor hablemos de la ¡FIESTA!.

Siempre lo hacía, por alguna razón el insultar a alguien o simplemente cambiar de tema por algo más feliz y que no tenga que ver nada conmigo u el pasado, me hacia sentir bien, en este caso esta haciendo las dos.

-¿Qué fiesta pecas? No me digas que vas hacer una en el departamento.

Otra vez con el estúpido apodo, lo odiaba con toda mi alma aunque con pesadez debo admitir que ya me he acostumbrado.

-No estúpido, no haré ninguna fiesta ni que estuviera loca.

-Bueno... -comenzó a decir Luke.

-Si lo estas -concluyo Hades.

Es cierto la combinación de yo y normal ni siquiera un anormal lo creería, no puedo reclamarle a eso, simplemente hice un gesto con mi mano dándole la razón.

-Iremos a una fiesta. Pasado mañana comienzas las clases así que hoy es la fiesta de bienvenida en una fraternidad.

-¿Bienvenida par que? -cuestiono Hades aún muy confundido

-¿Y como sabes que harán una fiesta? -le siguió el rubio.

¿Qué como lo se? Fácil, la pagina de la universidad, en esta dan información sobre todos lo eventos importantes, el funcionamiento de esta o como lo es en este caso, las fiestas locas que realizan los universitarios hormonales.

-Para el nuevo año escolar o simplemente otra excusa para embriagarse y tener sexo salvaje, y la pagina de la universidad.

-Bueno no se si vaya, tú misma lo dijiste en dos días comienzan la universidad.

-¡Por eso mismo mi querido primo! -. Fui hasta donde este se encontraba y lo abrace por sus hombros aunque él es mucho mas alto que yo. -Tenemos que disfrutar lo que nos queda de vacaciones y se que a ti te hace falta disfrutar mucho. - lo señale con mis manos y él de inmediato comenzó a verse todo el cuerpo. No tenía nada fuera de lo normal, sólo trataba de persuadirlo para ir.

-Veo que tienes razón -. Eso es el poder de la persuasión. -Iremos.

Pensaba alejarme bailando tipo musical de teatro cuando el molesto rubio volvió a hablar.

-Pero volveremos temprano sin quejas y sólo si Hades también quiere venir. - Luke miro a Hades el cual estaba ausente de toda la conversación -. Que dices amigo, ¿vamos? -pregunto finalmente dirigiendo si vista al pelinegro. Yo Por mi parte me encontraba atrás del rubio juntándose mis manos y rogándole a Hades que aceptara venir con nosotros, él se lo pensó un momento, después una media sonrisa se planto en su rostro al mirarme.

-Si ¿Por qué no?

Ese si fue el momento donde me fui saltando y cantando. Seria una noche loca, yo me encargare de eso.



Después de lo que parecía una eternidad todavía estaba esperando que Luke y Hades se dignaran aparecer.

Si los malditos no salen en dos minutos yo misma los iré a buscar ¿Quién se tarda tanto en arreglar? Es sólo una fiesta no una cita con la reina Isabel. ¿Es tan difícil para ellos tomar unas camisetas, pantalones y listo? Y dicen que las mujeres nos tardamos demasiados en arreglarnos, pues al parecer en este caso los muy malditos de mi primo y su amigo, son los complicados.

Yo apenas tome lo primero que quedo a la vista, unos jeans, camiseta mangas largas rojas con el numero ( 26 ) y mis desgastadas zapatillas. Listo no me demore ni cinco minutos pero no, ellos llevan media hora encerrados y todavía no salen.

Me había cansado, la paciencia no es parte de mis atributos así que salí rumbo a sus habitaciones.

-¡Están listos! o ¿aún no se deciden entre rosa pastel y primavera? -grite frente a las dos puertas pareciendo una completa estúpida. La puerta de la izquierda se abrió rebelando a un Hades por lo visto ya listo. Quizás demasiado

-Veo que te decidiste por el rosa primavera-bromeo. En realidad iba vestido con una camisa azul y unos pantalones negros, que no le quedan nada mal. En lo absoluto, la camisa de color del océano le hacia resaltar mucho más su piel, y su blanquecina mirada.

-No, ese color no le asienta bien a mi tono de piel -espeto sin poder quitar su sonrisa. -A Luke en cambio le quedaría ideal.

-Tienes razón en mi todo es perfecto -mascullo el rubio detrás de mi, de inmediato me di vuelta para encararlo y burlarme un poco. Ese ego debía ser detenido.

-¡Ey disminúyele a tu ego flash! -Espete con sarcasmo provocando que Hades soltara una carcajada.

-Bien hecho pecas, dame cinco. -Hades extendió su mano en mi dirección a lo que yo le correspondí, claro parecía una estúpida tratando de alcanzar la mano de él.

Odio mi estatura.

-Con amigos y familiares como ustedes no necesito buscar enemigos -indicó el rubio lanzando una mirada asesina. -Mejor vámonos -dejo escapar un suspiro y señalo la puerta. Me acerque hasta ellos y rodé mis brazos en cada uno.

-Hoy imbéciles míos se comportaran como verdaderos universitarios alcohólicos y hormonales.

-Contigo al lado, por supuesto que si -afirmo el pelinegro señalándome de pies a cabeza. Entorne los ojos ante la ridícula acusación sin embargo no pude evitar que una sonrisa se apoderará de mi rostro.

-Hades tiene razón Brooke, nos estas llevando al camino de la locura -reflexiono el rubio.

-La locura es el mejor camino que hay dentro de tantos monótonos caminos de la vida. -musite con tal seguridad.

-Dejemos los momentos filosóficos para después, ahora vámonos a la dichosa fiesta -expuso Hades soltandose de mi agarre para adelantarse hasta la puerta.

-Nos embriagaremos hasta no recordar ni nuestros nombres -declare.

-No, sin embriagarse -sentenció Luke.

-¡Oh pero por supuesto que nos embriagaremos y a lo grande, sobre todo ustedes les hace mucha falta. -Los volví a señalar antes de emprender mi camino hacia la puerta donde ya Hades se encontraba.

-Y a ti te hace falta un psiquiatra pero no siempre tenemos lo que necesitamos -intervino el estúpido "sesudo" con una sonrisa triunfante, sin saber que llevaba gran parte de la verdad en sus palabras.