Capítulo 7 El Plan de Dylan

El zorro junto con los lobos habían caminado y tomado varios autobuses por varios días. Liam y Cody no habían dicho nada pero se estaban preocupados por la falta de palabras del castaño, sabían que tenía un plan y quería hacer algo pero les frustraba que no se los contara.

Los tres caminaban por la carretera, según el mapa que tenían estaban cerca de un pueblo, a diez minutos exactamente.

- No puedo soportarlo más. - exclamó mientras se acercaba al castaño - ¿Qué estamos haciendo? ¿Qué quieres hacer? ¿Por qué parecemos nómadas? - le preguntó Liam al mayor algo desesperado aunque su tono se mantenía tranquilo.

Dylan rio levemente, sabía que su cachorro se desesperaría pronto al no saber que sucedía ni lo que quería hacer.

- Desde antes de que mi manada fuera asesinada, me di cuenta de que los omegas siempre somos lo más bajo de la cadena. No me ha gustado como nos tratan fuera de mi hogar, en la civilización, hemos visto varías veces eso. - apretó su puño con fuerza - No quiero seguir viendo eso, nosotros no somos solo personas para tener sexo y llevar crías, somos fuertes, podemos hacer cualquier cosa como los alfas y nuestra inteligencia es mayor. - miró a sus acompañantes - He tenido esta idea desde antes de que Tyler no me reconociera y dejara débil nuestro lazo, mi plan es crear un grupo de omegas, no solo sobrenaturales sino también de humanos. Quiero que nos encarguemos de ayudar a quien lo necesite, esas personas que son ignorados por los altos mundo. Entrenaré a los omegas que reclute y terminaremos siendo un grupo que has los mismos alfas nos temerán y pedirán ayuda. - les dijo Dylan con orgullo.

- Debo decir que estoy realmente impresionado, sabía que pensaban en un futuro más grande que nosotros pero jamás se me ocurrió esto. Tienes completamente mi apoyo y estoy orgulloso de ser un alfa que recibe órdenes de un omega. - le dijo Cody mientras colocaba su mano sobre el hombre del castaño.

- Por supuesto, yo estoy dentro. Nosotros somos omegas y aunque nunca haya vivido lo que tú u otros, sé que debemos de demostrar de lo que somos capaces. - dijo Liam mientras daba saltitos emocionado.

Dylan no podía dejar de pensar que el lobo era un niño atrapado en el cuerpo de un chico de dieciocho años.

Cody sonrió con ternura al ver a su pequeño omega, cada día que pasaba se enamoraba más de él. El zorro podía notar la mirada de amor puro del otro así que sentía tranquilo sabiendo que su cachorro tendría un buen alfa a su lado que lo cuidaría y daría todo él.

- ¿Por eso hemos estado dando vueltas por todo el continente y hemos estado de pueblo en pueblo desde que nos fuimos del hogar de Duke? - preguntó Cody entendiendo al fin la acciones del omega mayor. Aunque no lo dijera en voz alta Dylan y Tyler se parecía, de manera diferente pero sabía que el alfa haría lo mismo que el omega y también se lo guardaría hasta que uno de sus betas exigiera respuestas. Había convivido bastante con Tyler para saber que haría, una ventaja de haber sido salvado por la manada.

- Exactamente, quiero un lugar neutro donde pueda armar este grupo y tener un poco de estabilidad. Mi objetivo es tener omegas que necesiten ayuda, claro que aceptaré a otros que lo quieras o sean adecuados, pero lo importante son aquellos necesitados y no solo de cosas materiales sino de una familia.

El alfa y el omega sonrieron ante la idea del castaño, era obvio que ayudaría a las personas que lo necesitaban estaba en su naturaleza. Liam sabía que era compasivo y amable pero también podía ser la peor pesadilla de cualquiera si lo hacían enojar o lastimaban a uno de los suyos.

- Entonces, sigamos. - dijo Liam con un humor diferente mientras comenzaba a caminar y los otros dos lo seguían.

- ¿Quieres con este grupo darle una lección a Tyler? - le preguntó Cody sabiendo que el otro omega estaba lo suficiente lejos y distraído para escucharlos.

- Tal vez. - sonrió levemente - Lo amo, pero es un idiota ciego que no es capaz de usar sus sentidos, se esta aferrando a un recuerdo de alguien que ya no existe. El Dylan que conoció murió con su manada, yo estoy aquí y a pesar de eso mi corazón es el mismo solo que tiene un poco de remordimiento y venganza. - suspiró - Él también dejo de ser el dulce niño que conocí en aquel entonces y lo entiendo perfectamente, como yo perdió a su familia pero por lo menos aun tiene a su tío y formó una familia. Es un idiota. - dijo Dylan mientras bufaba.

- Eso lo sabíamos, si soy honesto me gusta que le vayas a dar una lección. Las acciones tiene consecuencias y será divertido verlo sufrir.

- ¿Cómo saber que va a sufrir? Puede que incluso con todo no me recuerde y se niegue a la realidad.

- Créeme, lo sabrá. Se dará cuenta del gran idiota que ha sido y se va a arrepentir de todo lo que te hizo, va a querer recuperarte pero se que no se lo pondrás fácil. También tienes tu orgullo, Dyl. - le dijo Cody con diversión y sinceridad al mismo tiempo.

- Ya lo veremos. - sonrió - Me gusta como piensas, es bueno que seas el alfa de Liam y estés de nuestro lado. - le dijo Dylan para después darle una palmada en el hombro, siguió al menor y caminó a su lado mientras que el alfa los veía.

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Los tres se habían instalado en el pueblo, era justo lo que el castaño buscaba así que se quedarían ahí hasta que reunieran al grupo que quería el zorro y ya después se convertiría en su hogar, al lugar que volverían después de todo lo que pasarán, un buen sitio para descansar y dejar el mundo fuera.

- ¿Por dónde empezaremos a buscar a los omegas? - pregunto Liam mientras caminaba con su alfa a su lado.

- Ellos nos encontrarán a nosotros o eso es lo que Dylan dijo. - le respondió Cody con seguridad.

Lo que ninguno se esperó es que esa misma tarde el castaño regresó a casa con dos omegas, un humano y otro lobo que se aferraban a él.

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Dylan se encontraba fuera de su casa con una taza de café en sus manos, desde ahí podía escuchar las suaves respiraciones de todos los omegas y claro del alfa que yacía junto a Liam. El día anterior había sido luna lena y fue una noche agotadora para todos incluso los humanos tuvieron que soportar el descontrol de los sobrenaturales pero aún así estaban bien.

Un beta se acercó corriendo a él, su rostro lucía tranquilo.

- El alfa Tyler pidió ayuda.

El castaño sonrió.

Era momento de volver.

                         

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