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Capítulo II
He aquí esta señorita que ha ignorado a cada hombre que se le cruza en el camino, basta un par de palabras y todo me parece una perdida de tiempo, nadie ha logrado que caiga en esos enredos, he sido una mujer fría, mis pensamientos han cambiado en muchos aspectos, he estado tan segura de lo que quiero en mi vida, trabajar y estudiar Medicina –mi mayor sueño- ayudar a los demás, mantener mi estabilidad económica y velar por mis padres, no hay lugar alguno para las cosas del amor, lo quiero lejos de mí. Ahora no sé por qué carajos estoy pensando estupideces y preguntándome qué diablos estoy haciendo al hablar con Bruce, él está revolucionando mi mundo hasta ahora ordenado. Lo que definitivamente no haré esta vez es ir en contra de mis sentimientos. Si me resisto, luego será peor, así que lo mejor que puedo hacer es dejar que este capricho fluya y terminará cuando Bruce saque a flote sus defectos. Si bien, me atrae, no me convence todavía, cabe mencionar que es un hombre muy precavido, pero tan seguro de sí mismo y eso me encanta. - ¿Qué significa Bruce Sawyer para ti? –su pregunta me saca de orbita- Me quedo pensando y no sé qué responder a eso, ¿qué podría significar si solo han pasado unos meses y ni siquiera lo he visto? no voy a mentirle, no me siento cómoda al respecto. Quizás, muchos años atrás ya estuviera aventando miles de halagos, ahora es distinto, de igual manera no quiero decir algo que vaya a parecer una osadía dado el tiempo que llevamos intercambiando mensajes -piensa, piensa Alize- Con total sinceridad le contesto: - Bruce Sawyer es primero que nada un encanto, alguien que además de fascinarme su voz, su manera de expresarse y lo que hay en su mente, me inspira confianza, disfruto hablando contigo y siempre me sacas una sonrisa con leerte, creo que eres muy diferente de lo que he conocido y eso me gusta :-)
- Gracias por ser tan bella y tan expresiva, déjame decirte que al quedar solo, me propuse no darle mi número a nadie a fin de evitar problemas, es más debo decir que eres la única que tiene mis mensajes –y tú piensas que voy a creerte- había renunciado a trabajar en radios nuevamente, pero cuando tuve mi accidente, no tenía otra opción. Tú me escribes, te observo nada más, me gustas, pero lo ignoro, hasta que un día decidí responderte y ahora te has convertido en alguien muy especial para mí.
¡Vaya! ¿Con que me estuviste ignorando? Tal vez debí hacer lo mismo desde que empezaste a gustarme Bruce. ¿Accidente? ¿Qué clase de accidente tendría? Una vez más la curiosidad me ataca. ¡Ah! Mi baby seguro lo ha de conocer, estoy segura de ello. Sin más que esperar, le escribo.
- Hola babe ¿Cómo estás?... tengo una pregunta, ¿conoces a un hombre que se llama Bruce Sawyer, él es locutor? Para mi grata sorpresa, responde enseguida.
- Hey baby, me suena su nombre, ¿es un hombre bajo con voz grave?
- Creo que sí, tiene una voz muy elegante.
- La verdad si, trabajó conmigo hace mucho, pero no lo conocí muy bien, ¿Por qué me preguntas, que pasa con él?
Saber que Albert conoce a Bruce, me emociona, así podría describirlo tal cual, porque prácticamente no sé nada de él. Por ahora voy a ocultar la parte donde debo decir que estoy muy interesada en conocer a Bruce, me limito a contarle que hemos intercambiado un par de mensajes y que quiere conocerme. Albert, se ha convertido en alguien sumamente especial y digno de mi confianza, mi compañero de tragos, mi consejero y amigo fiel, me apoya en mis locuras y en mis metas, ademas de creer en mi, amo a ese hombre, yo si tengo un tío favorito.
Bruce es diferente, es la manera tan cómoda como me hace sentir, no es asfixiante, es sutil y respetuoso, cosas que acaban conmigo. Él quiere que nos conozcamos, pero no estoy lista todavía. Cada mañana que despierto, anhelo escucharlo tanto como ver la notificación en mi celular de sus buenos días, basta eso y una sonrisa enorme se dibuja en mi cara –es grave- no puedo evitarlo, simplemente empiezo a tenerle cariño. El mediodía llega y tiene que marcharse.
- La siguiente canción es para ti... bendiciones cariño.
La escucho y sigo la letra, es una vieja canción que ni siquiera conozco quien la canta, pero la sigo y me quedo pensando.
Déjame intentar conquistar tu amor y hacerlo muy mío, hacer que te olvides de amores pasados y sientas conmigo que nunca has amado, déjame quererte como nadie te ha querido... déjame intentar.