Capítulo 6 Cinco

- Odio tener que decirte esto, pero te necesitamos aquí en la empresa, hay muchos documentos importantes, los cuales no te los puedo enviar por correo, a parte de que tienes que firmarlos personalmente y yo no puedo con todas las reuniones... - suspira Giselle en frente de la pantalla.

- No puedo ir, en esta semana es el cumpleaños de mis hijos... Y tu puedes firmar los documentos, no por nada te nombré subdirectora -

- Sabes que yo puedo firmar los papeles comerciales, pero los legales los tienes que firmar tú como dueña y directora ejecutiva, ya sea virtual o presencial, pero ahora es muy importante y urgente Kylie... sabes que sino fuera así no te lo estuviera pidiendo - insiste.

- Estaré en Francia en tres días, pero solo me quedaré dos días, ¿Te parece bien? - pregunto agarrándome la cabeza, Matt tendrá que atender a nuestros hijos hasta que arregle todo allá.

- Yo te pediría dos - dice y tocan la puerta de su oficina, ella solo asiente y toma agua de azahar directo de la botella.

- Estaré allí en dos días, espero y sea tan urgente como dices - ella asiente de inmediato y vuelve a tomar de su agua, nunca la había visto tan nerviosa y ansiosa como ahora.

- Solo necesito que pongas en orden todo, porque siento que voy a explotar en cualquier moment... ¡¡Ya voy, un minuto, estoy hablando con la jefa!! - grita en francés la ultima oración a quien parece ser su asistente.

- Tengo que colgar, hay una reunión, pero ya sabes te envío todo al correo, gracias te espero - suspira otra vez, terminándose todo el contenido de su botellita y tirándola al basurero.

- Esta bien, tranquilízate iré comprando mi pasaje - cuelgo la videollamada y Martina me termina de servir el desayuno.

- ¿Dia difícil? - pregunta y asiento torciendo un poco la boca.

- Algo así, ya habrás escuchado, me necesitan allá - sonríe dándome ánimos.

- Es la mejor en su trabajo, me parecía muy raro que no la hubieran llamado antes -

- Gracias... - digo y Baloo se levanta de su pequeña cama improvisada para ponerse debajo de mis pies.

Le hago cariño y como aún esta pequeño mordisquea un poco mi pie.

En la madrugada no pude dormir mucho y ahora son las 7 de la mañana y ya se imaginarán las ojeras que tengo en este momento.

Entiendo a Giselle, todos los días tiene el peso de cumplir su rol en la empresa, ponerme al día de todo lo que se habla en una de esas reuniones, en las que está ahora.

Además de que solo ha tenido 3 vacaciones de un mes a lo largo de estos cuatro años y no es porque yo no haya aceptado, sino porque ella insistía en que podía con todo, bueno... creo que ahora si debe y merece descansar así sea por unos días.

Agradezco cuando Martina coloca un vaso de café en frente mio, doy un sorbo y este hace efecto en mi, haciéndome sentir mejor.

- Buenos días mami, buenos días Martina - dice mi pequeño Jacob sorprendiéndome.

- Buenos días pequeñín - dice Martina devolviendo el saludo.

- Buenos días, cielo, ¿Qué haces despierto tan temprano? - pregunto y él se soba un poco los ojos bostezando.

Ve a Baloo y lo carga sobándole su pequeña cabeza.

- Se me quitó el sueño y te fui a buscar a tu habitación, pero no estabas, entonces te escuche hablando así que decidí bajar - deja al cachorro en el suelo y viene hacia mi.

Alza los bracitos, lo cargo y lo pongo de costado encima de mis piernas, le doy un beso en la frente y sigo tomando mi café.

- ¿Despertaste a papá? -

- No, quise despertar a Brooke pero dijo que tenia sueño, ¿debería despertarlos? - pregunta sonriente, pero niego.

- Déjalos dormir unos minutos más y luego los despertamos juntos, ¿si? - le toco la punta de la nariz y él asiente con esa sonrisa que hace que se me hinche el corazón de felicidad.

Creo que seria bueno decirle acerca de mi viaje repentino a Francia.

- ¿Te acuerdas de Giselle? - le pregunto iniciando conversación.

- ¿La señorita que vino el año pasado aqui a la casa? - ladea un poco la cabeza y yo me aclaro la garganta.

- Ajá, pues... ella necesita que yo vaya a hacerle compañía en el trabajo, porque se siente un poco cansada, por eso es que tengo que viajar lo más antes posible, para ayudarla - le explico peinando su cabello.

- Pero pronto es nuestro cumpleaños, ¿Iremos contigo? - pregunta y Martina le da un sándwich, a lo cual él sonríe y agradece.

- No, cielo, estaré aqui para tu cumpleaños te lo aseguro, a parte tú y tu hermana tienen que quedarse para hacerle compañía a papá, no quieres que se quede solo ¿o si... ? -

- ¿Quién se va a quedar solo? - pregunta Matt bajando las escaleras con Brooke en brazos.

- Giselle me acaba de llamar muy nerviosa diciendo que necesita que vaya a la central, a Francia, así que tengo que estar allá en dos días - explico y Brooke apenas escucha Francia abre los ojos de par en par.

- ¿Puedo ir contigo, mami? - mi hija se baja de los brazos de Matt y viene corriendo hacia mi - Di que si, di que si, como regalo de cumpleaños - junta sus manitos haciendo puchero y yo miro a Matt para que me ayude.

- ¿Ahora todos me quieren dejar? - pregunta con los brazos en jarra.

- Pero tu también puedes venir con nosotros, descuida... ahh y también Baloo - dice Brooke.

- Ustedes tienen que ir al colegio y papá tiene que seguir trabajando aqui, yo no me voy de vacaciones, voy porque también necesito trabajar y para sus cumpleaños les tengo un regalo espectacular no se preocupen - explico y ella me mira cruzando los brazos.

- ¿Nos vas a dejar con él? - susurra señalando a Matt, el cual la mira ofendido.

- ¿Disculpa? - dice tocándose el pecho dramatizando.

- Te apuesto que no sabe ni donde están nuestras cosas - Jacob asiente apoyando a su hermana.

- Para eso está Martina, para ayudarme, ¿O no? - contraataca Matt, Brooke se dirige otra vez en dirección a su papá y él la mira con los ojos entrecerrados.

- Si nos llevas al super para comprarle cosas a Baloo y también a nosotros, no les hago problemas y dejo ir a mamá tranquila - susurra, pero logro escucharla.

- ¿Y repartimos los dulces? - susurra él de vuelta.

- Ok... 80 y 20 - dice Brooke y enarco una ceja, ¿Quién le enseñó a hacer negocios?.

- 60 y 40 - dice. Brooke abre la boca para reclamar y Matt la corta - 60 y 40 o nada - ella alza la mano en acción de trato y Matt la recibe .

- ¿Sabes, mami?, para que papá no se sienta solo aqui en la casa, mejor me quedo con él, ¿te quedas Jacob? - le pregunta a su hermano.

- Igual te sigo a todas partes - se encoje de hombros y se baja de mis piernas.

- Aún el viaje es en dos días, así que les agradecería mucho que me ayuden en alistarse porque tienen colegio, pequeños listillos - alzo a Baloo y se lo entrego a Jacob ya que él es aun muy pequeño y por obvias razones todavía no sabe subir las escaleras.

Brooke sigue a su hermano arriba y me dirijo a Matt que me recibe con los brazos abiertos.

- Buenos días, dormilón - digo y acto seguido le doy un beso en el pecho ya que no alcanzo sus labios cuando estamos abrazados como ahora.

- Buenos días... - dice alargando la "a".

- Entonces... te alistas tu solo para ir a trabajar ¿O... necesitas que te ayude? - digo ladeando un poco la cabeza.

- Me vendría bien un poco de ayuda - dice y se agacha alcanzando mis labios.

- ¿Si? -

- Ajá - responde mordiéndome el labio.

...

- No es un pony, cielo - digo rodando los ojos.

Desde que les dije a ambos que tenía preparado un regalo espectacular, no han dejado de preguntar e intentar adivinar cual es su sorpresa...

- ¿Cuándo nos lo dirás? - insiste Jacob poniéndose en el medio del asiento.

- El día de su cumpleaños, Jacob por favor siéntate y colócate el cinturón - lo miro por el espejo, él obedece y les paso a ambos un cuaderno pequeño.

- Ambos escriban lo que quieren para su cumpleaños y para navidad, según eso con su papá elegiremos dos regalos de esa lista para cada uno - ellos asienten y cada uno empieza a escribir.

- ¿Solo dos? - pregunta Brooke ladeando la cabeza.

- Ok tres, pero Jacob no puedes tener una pistola Nerf y Brooke no puedes tener un dron - advierto.

- Ok... - dicen ambos y siguen escribiendo.

Al cabo de unos minutos llegamos a la entrada de su colegio y ellos me entregan cada uno su "pequeña" lista, bajan del auto no sin antes despedirse de mi.

Estoy llegando a la casa cuando suena mi celular con la llamada del señor Ford mi abogado.

Seguro que querrá hablar sobre la solicitud. Contesto la llamada desde el volante y él comienza a hablar.

Llamada telefónica:

- Señorita Collins, necesito que venga a la prisión donde está su prima, al escuchar que negué por enésima vez su solicitud, atacó a un oficial y ahora está amenazando con matarlo - freno el auto de inmediato provocando que varios autos atrás mio toquen la bocina, algunos hasta me insultan, pero no les hago caso y me concentro en lo que me dice el señor Ford.

- Insiste en hablar con usted - dice al ver que no respondo.

- Que ingresen más guardias y lo ayuden -

- No pueden, tiene al guardia agarrado del cuello y amenaza con causarle un traumatismo de cuello si alguien que no sea usted se acerca o abre la celda otra vez - suspiro y respondo:

- Voy a hablar con ella, ojala que tengan una cámara Gesell, sino no me va a quedar más que rechazar - ahora si que perdió la poca cordura que le quedaba.

- Su celda tiene ese tipo de cámara, así que la esperamos... -

Fin llamada telefónica.

Cambio la dirección del GPS en el auto e inicio la reunión con Nataly desde mi celular.

- Iré a la central de Francia, según eso te mandaré algunos documentos con algunas modificaciones que haré, respecto a los contratos y demás - aviso luego de unos minutos.

- Esta bien, quería avisarte que estamos teniendo perdida de ingresos en un 10% por la denuncia de un ex-empleado, tuvimos que despedirlo porque pedía que le aumentáramos su pensión en un 50%, cosa que negamos, sabes como es aceptamos a uno y todos van a reclamar y no estamos en condiciones de aceptar aumentos de todos - asiento y ella prosigue a pasarme toda la información a mi correo.

- Te acaba de llegar la información del caso - avisa y me estaciono en un parque cerca de la prisión.

- ¿Le negaron un aumento después de trabajar más de diez años en la empresa? - pregunto leyendo su expediente - Tiene tres hijos y solo tuvo un aumento hace 4 años, ¿Quién autorizó su despido? - pregunto.

- Yo lo autoricé - dice después de unos segundos.

- Comunícale que si acepta volver a trabajar con nosotros tendrá un aumento del 20% - ella asiente y yo sigo manejando.

- Ok, disculpa no quise... -

- Esta bien, encárgate de eso, te llamo luego... - llego a la entrada de la prisión privada y suspiro antes de bajar del auto con mi celular en mano.

Camino hasta llegar a donde están los guardias y ellos me toman la huella digital como identificación, mi nombre y fotografía salen en la pequeña pantalla junto al nombre y fotografía de Becca.

- Buenos días señorita Collins - dice el director caminando a mi lado.

- Buenas tardes - se le ve bastante despreocupado para tener la vida de un hombre en riesgo - ¿No se supone que ellos están totalmente entrenados para que esto no suceda...? - y no es que ella sepa pelear tan bien, aunque después de varios años las personas cambian...

- Por aquí, por favor - evade mi pregunta y abre la puerta de una pequeña sala donde aparece Becca ahorcando a un policía con su antebrazo.

- Ya les dije que no voy a parar hasta que ella venga en persona...!! - grita y hablo por el altavoz.

- Rebecca soy yo, ya suéltalo - le digo y ella se ríe.

- ¡¡No recibo ordenes tuyas, maldita cobarde!! - grita volteando a todas partes.

- Suéltalo, ¿querías hablar conmigo?, listo hablemos -

- Tuve que amenazar de muerte a alguien para que aceptes y te tragues tu orgullo y vengas de una maldita vez a esta prisión de mierda, ¡¡Ojala que les este costando, a ti y al maldito de Matthew, mantenerme aquí!! - y si que nos estaba costando, pero no le iba a dar el gusto de contárselo.

- Ya estoy aquí, ¿Qué quieres decirme? - pregunto hastiada.

- Quiero hablar contigo personalmente o lo mato, te juro que lo hago - amenaza sin saber a donde mirar, suelto el botón del altavoz y me dirijo al director

- Ella no tiene ningún tipo de arma ¿Verdad? -

- Claro que no, usted sabe que esta es una prisión donde no tienen ningún tipo de contacto con otro prisionero, es imposible que tenga un arma, tenemos a los mejores aqui - se justifica nervioso, sabe que si aviso a los medios de esta situación, podría arruinar su reputación, llevando su establecimiento automáticamente a banca rota.

- Si tuvieran a los mejores aquí, no estuviera a punto de entrar a su celda en primer lugar - le da la señal al guardia para abrir la puerta de metal desde un dispositivo.

Suspiro antes de entrar y apenas cruzo el umbral ella se ríe y suelta al hombre, el cual cae al suelo de rodillas y acto seguido se toca el cuello tosiendo repetidas veces.

- Ahora si - dice cruzando los brazos.

- ¿Qué quieres? - pregunto cortante.

- Solo quiero que sepas la verdad... toda la verdad - él oficial sale despavorido de la celda cuando se recupera y al instante otro hombre se queda en la puerta vigilando.

- Tienes 5 minutos - miro mi reloj y ella se ríe sarcástica.

- Dicen que peor es nada, así que aquí vamos - se aclara la garganta y ruedo los ojos - Quisiera empezar por mi accidente, lo recuerdas ¿no?, cuando te dije todas esas cosa... -

- Si, Rebecca lo recuerdo - cambio el peso de una pierna a otra y ella continua.

- Aunque creo que accidente no es una buena palabra para describirlo..., esa tarde cuando te grité y me fui sin más, bueno esa tarde Barbara se enteró de todo lo que hice y ella de chismosa le contó a su prima Rose, tu hermanita o hermanastra como quieras llamarla mandó a que me asustaran, pero se le fue de las manos y pues pasó lo que pas... - no quiero que me cuente sus cosas, yo superé esto hace mucho tiempo y no me gustaría volver a recordar con detalles y todo.

- No me importa los tratos que tuviste o no con alguna de ellas - me arreglo el cabello y si las miradas mataran ya estuviera varios metros bajo tierra.

- No me interrumpas - se queja - Te decía pasó lo que pasó, el chico ese Ian o Liam no lo sé no me interesa, me "salvó" y como él se dio cuenta de que había algo que no concordaba con todo eso, Rose tuvo que ir hasta al hospital, coquetearle y ponerle veneno en su agua - ¿por que me cuenta todo eso?, no entiendo.

- Se están pasando tus minutos - le recuerdo y rueda los ojos.

- Cuando él murió tuvo que ir a borrar las grabaciones, por eso es que no encontraste nada o bueno... solo lo que nos convenía, llegaste a la casa y debo admitir que me sorprendiste al descubrir tu sola los micrófonos y las cámaras, así fue como Barbara se enteró de que casi hecho todo el plan a la borda... - mantengo mi cara seria a todo lo que dice y ella sigue hablando.

- Y mientras tu estabas perdiendo el tiempo avisándole a la familia de ese tipo, varias personas fueron a destruir todo el departamento menos mi habitación lo cual fue muy tonto de su parte, por cierto. En fin te pusieron la advertencia, no tuviste cuidado y te secuestraron, pero la policía como siempre dejando a medias todo, pero eso al fin y al cabo nos convenía - da vueltas por su celda poniéndome nerviosa y parece que lo nota por lo que sonríe y prosigue con su monologo.

- Ahí fue cuando mataron a William y lo dejaron en tu casa moribundo a lo que él se desplomó en el sillón, la policía volvió a dejar todo a medias porque debo decir que el crimen fue tan limpio que no dejaron ni una huella ni nada sospechoso, éramos como fantasmas literalmente, luego llegó la maniática de Violet mandándote esos muñecos vudú - pongo mis manos atrás y me volteo un poco en dirección al guardia dejando ver mis manos, él se da cuenta y en señas le digo que grabe, todos o al menos la mayoría aquí, entiende un poco de lenguaje en señas.

Si bien ella ahora está aquí, en unos años saldrá y si está confesando pues estaría mejor para mi y para mi familia el que le den unos 10 o 15 años más.

- Luego mandaste a Alexis y al principio casi la mata, luego lo hice mi cómplice, ahh y como olvidar a Thiago, se molestaba cada vez que lo trataba como si fuera un sirviente cualquiera por eso es que él me trataba así cuando estaba contigo y bueno luego todo lo demás ya lo sabes -

- Ya que no tienes nada más que decir, es hora de que me vaya, hasta nunca - me giro para irme y ella me interrumpe.

- ¿No te vas a preguntar porque es el odio tan fuerte de Barbara hacia ti?, o ¿Por que te odio? - la miro y niego, no me interesa nada de ninguna de ellas, están muertas y eso es lo único que me importa.

- Ella te odia porque William, envió a matar a su mamá - dice evitando que cruce la puerta.

- ¿Que? -

- La madre de Rose, Alessandra tenia problemas con sus familiares porque no querían a un Collins en la familia y la madre de Barbara insistió tanto hasta llegar al nivel de casi llevarse a Rose, supuestamente para protegerla de William y como él se vio amenazado mandó a que la mataran, por eso es que ella buscaba venganza, la consiguió por parte de tu padre, pero ella quería más y por eso amenazaba a tu mamá por mensajes, hasta que cuando casi se suicida, tenian que llegar a salvarla - rueda los ojos y yo trago grueso.

- Por eso te quitó a Ashley, como un ojo por ojo - se me forma un nudo en la garganta y ella se ríe satisfecha, sabe cuanto pueden afectar unas simples palabras y es lo que siempre ha utilizado en mi contra.

- Con respecto a Rose, ella solo quiso apoyar a su prima y hacerte la vida cuadritos, influenciada por Alessandra claro y bueno con respecto a Violet... ella era hebefrenica, pero nadie la ayudó o mejor dicho ella se enteró de su enfermedad, pero nunca le contó a nadie excepto a mi -

- Y bueno con respecto a mi, siempre envidié todo lo que tenias, si bien tu padre era lo peor que se podia esperar de una persona, Ashley era buena contigo y tus hermanos te protegían a más no poder, nunca me sentí amada por nadie y al enterarme de que casi perdí a mi bebé por tu culpa, la primera vez... - la interrumpo, no puede ser que me esté difamando de tal manera.

- ¿Por mi culpa? - yo no tengo la culpa de las desgracias que ella misma se causó.

- Si Rose no se hubiera enterado no hubiera mandado a darme un susto y bueno, en fin, decidí ir por Brooke y formar una familia con ella, pero Matthew me la arrebató... eso es todo ya puedes irte - se sienta en su pequeña cama de lo más normal, como si lo que me acabara de decir no tuviera nada de importancia.

El guardia me mira con compasión, le pido permiso para salir y veo a todos mirándome igual que el primer guardia.

- Le mandas saludos a mi preciosa hija, Brooke... - corro apartando a los guardias que intentan agarrarme y la agarro de la camiseta.

- ¡¡Ella no es tu hija, entiéndelo maldita loca!! - le grito y ella solo observa.

- Viviré feliz con ella, saldré de aquí a buscarla, es algo que no puedes evitar... -

- Pues mira como si - la suelto y me voy de ese asqueroso lugar, salgo de la celda y me dirijo a la salida pisando fuerte.

- Lo siento mucho, señorita Kylie, es algo que no volverá a pasar... - dice el director, me giro abruptamente sorprendiéndolo.

- Claro que no volverá a pasar, agradezca que no aviso nada a los medios, porque desde un principio avisé que no tendría ningún tipo de contacto con ella - me doy media vuelta y sigo caminando.

- No se preocupe y gracias -