Capítulo 3 No acelerar el corazón

número veintidós", dice el locutor al micrófono. siento mi "No Acelerar el corazón.

La chica a mi lado sale a la fla y yo soy la siguiente.

temblor nervioso. Esto es peor que todas mis presentaciones de bailar juntos, como si estuviera desnudo. Sólo pensando en los chicos que son mirarme como si fuera un pedazo de carne me pone la piel escalofríos enteros.

"Número veintitrés", llama la voz.

Me quedo de pie, congelado, mirando la entrada al escenario.

La chica a mi lado se aclara la garganta. "Y tu".

La miro y ella me da una sonrisa tranquilizadora. "Desde el miedo, sí, pero no hay vuelta atrás".

Asiento con la cabeza y camino hacia el escenario, escuchando a mi corazón.

golpea mis oídos. El silencio en el club es ahora absoluto, a excepción de

música sutil sonando de fondo. Las luces deslumbrantes evitan

que veo a los hombres que conozco espiándonos en ese oscuridad sin

Nunca me había sentido tan avergonzado en mi vida. Muy cuidadosamente,

Camino por el escenario y giro, con cuidado de no tropezar. no soy una persona

torpe, pero en este momento, cualquier cosa puede pasar. Parece Estoy fuera de mi cuerpo.

Tan pronto como me detengo, bajo al lugar donde se supone que debemos esperar. Las luces.

son muy fuertes, pero desde esta perspectiva puedo ver a los hombres que son

mirando. Me siento y miro a la audiencia. La mayoría de los hombres son mayores

lo sufciente como para ser mis abuelos, lo que lo hace bastante enfermo.

Mi mirada se detiene en un par de ojos verde esmeralda que son mirandome. Siento que mi corazón se detiene mientras me lo permito

admirar la belleza de este hombre. Tiene el pelo castaño corto y barba.

limpio y cuidado. Tiene tatuajes por todo el cuello y los brazos, que están desnudos.

Cuando vuelvo a mirar su rostro, veo que me está sonriendo.

yo con una mirada maníaca. Siento un escalofrío por mi columna. por supuesto esto

El hombre es atractivo, pero puedo ver en sus ojos que no es del tipo que hombre que quieras conocer en tu vida.

Aparto la mirada y siento una ola de calor atravesar mi cuerpo a través de la puerta.

forma en que me mira. Tal vez sea mejor que uno de los mayores.

Los viejos me compran. Así que todo esto terminará pronto.

Es solo una noche.

Repito la misma oración una y otra vez en mi cabeza, tratando de justificar.

esta locura que estoy haciendo. Mi madre me mataría por ser tan tonto.

Ella nunca sabrá la verdad de dónde viene el dinero que voy a obtener.

por su tratamiento.

La chica que estaba a mi lado se inclina hacia mí.

nos sentamos en la sala de espera. "¿Soy yo, o parecemos ser pedazos de

carne en una carnicería?

Vuelvo a mirarla y niego con la cabeza. "No eres solo tú.

No puedo negar que todo es enfermizo, para ser honesto".

Se ríe, pero de forma ansiosa. "Sí. Estoy refexionando si no

Cometí un error. Es todo muy extraño, pero necesito el dinero".

Dejé escapar un profundo suspiro. "Yo también".

Llaman al resto de chicas al escenario, y a la sala de espera

de repente se llena. La chica, cuyo nombre no sé, intenta entablar una conversación. Yo no

Tengo muchas ganas de hablar. Me siento mareado y me concentro en no vomitar.

Mi atención se dirige a la audiencia. Cuando me entrego.

los ojos van al hombre que había mirado antes. siento mi corazón

me detengo, cuando veo que todavía me mira fjamente.

Siento mi cara en llamas. Sostengo su mirada por unos segundos, y

no lo desvía. Está claro que está interesado.

Me aclaro la garganta y miro hacia otro lado. ¿Qué hay en los ojos de este tipo?

El hombre me hace creer que lo último que quiero es que me dé un tirarme. Es oscuro y pervertido. Incluso puede ser atractivo, pero yo

Creo que preferiría a cualquiera de los hombres mayores en este Club nocturno.

"¿Sabías que los precios de las subastas a menudo alcanzan más de un millones de dólares?" dice la chica que me habló antes.

Arrugo la frente. "¿De dónde has oído eso?".

"Mi amigo participó antes que yo. ella tiene un poco menos de un millón después de descontar las tasas". Ella se encoge de hombros.

"Creo que no es tanto, si piensas en esa cantidad de dinero.

No todas las chicas logran tanto, solo las más calientes". Siento náuseas y me pregunto por qué un hombre pagaría más.

un millón de dólares por una noche con una virgen. solo espero que

No he entendido mal los términos de vender mi virginidad.

"Esto es bastante loco. ¿Por qué un hombre pagaría tanto dinero por un ¿pelusa?".

La niña abre la boca para decir algo, pero se calla.

Aleks se para frente a nosotros. "Nada de charlas triviales, señoras. la subasta

está empezando, así que cállate y luce bonita".

Me irrito la actitud humillante de Aleks y miro hacia el escenario.

donde esta el presentador Hay cinco mujeres delante de mí en este

subasta. Parece que la chica sentada a mi lado tenía razón. ha habido.

unas siete ofertas de más de un millón de dólares.

Me pregunto cuántas mujeres aquí están vendiendo su virginidad.

para hacerse rico rapido. No me sorprendería. Todo lo que me importa es obtener sufciente dinero para curar a mi madre. Ella sacrifcó mucho para asegurarme de ir a la mejor escuela de baile posible, haciendo

doble horario de trabajo. Necesito pagar todo eso. no puedo perder.

única persona que signifca todo para mí en este mundo.

Si obtuviera más de un millón de dólares en esta subasta, podría

pagarle por todo su arduo trabajo. podría comprar uno apartamento para nosotros, en lugar de vivir en el muquifo, cuyo alquiler

Matamos para que nos paguen.

La probabilidad de que obtenga esa cantidad de dinero es escasa, pero

ninguna de las chicas de hoy recibió menos de quinientos mil dólares.

nos cambiará la vida por completo, incluso después de los descuentos.

"Ahora vayamos a la chica veintidós. Comencemos a ofertar con Doscientos mil".

Siento que se me revuelve el estómago cuando me doy cuenta de que es casi mío.

giro. He estado evitando mirar en la dirección del chico extremadamente caliente de

propósito. El chico que parece sentirse atraído por mí. echa un vistazo a la.hacia él, y todavía me está mirando.

Me sonríe, pero puedo decir que no es realmente una sonrisa lo que tiene.

tener en la cara.

Me paso la lengua por el labio inferior y me pregunto cómo sería ir

a la cama con él. Siento que mi estómago está siendo.

arrancado de mi cuerpo solo de pensar en él tocándome. no hay duda.

que es atractivo. Desde el principio, es uno de los tipos más atractivos del club. Aunque estoy aquí vendiendo mi virginidad, no me he detenido

Piénsalo mucho. Sabía que si lo pensaba demasiado tema, le daría la espalda antes de venir aquí. mis problemas con intimidad viene de la infancia y de mi padre, a quien no veo desde que era tenía ocho años.

Solía ​abusar de mí cada vez que mi madre estaba en trabajo, obligándome a tocarlo de manera inapropiada. Una noche, ella

se sintió mal y llegó temprano a casa tal como estaba sucediendo. Me sentí tan aliviado de que ella hubiera llamado a la policía, y que él

han sido arrestados.

Nunca pasó del tacto, pero algo me dice que hubiera sido peor si no lo hubiera hecho.

lo había tomado cuando lo hizo. Nunca supe como decirle con de esa edad. Mi padre me dijo que nunca me volvería a creer.

de todos modos.

A partir de ese momento, fuimos mi madre y yo. tenemos uno vínculo extremadamente fuerte, y ella trabajó muy duro para pagar mi

terapia desde que era muy joven. La terapia ayudó mucho a reparar.

daño, pero todavía me cuesta creerle a la gente,

principalmente en hombres. A pesar de que mi madre se deshizo del abuso.

Sentí que se llevó mi infancia, mi inocencia.

En la secundaria, los chicos querían estar conmigo, pero el miedo a la intimidad siempre me impidió estar con ellos. En cierto modo, creo

que vender mi virginidad quita el peaje emocional. no se si soy cometiendo un gran error. Solo sé que haré cualquier cosa por

salvar la vida de mi madre.

Puede que no sea una estrategia brillante subastar mi virginidad.

teniendo en cuenta mi historia. No tengo otra salida. Nosotros podríamos.

terminar en la calle si no conseguimos suficiente dinero para Pagar el alquiler y saldar la deuda.

La subasta por el número veintidós termina, y siento mis nervios