Capítulo 10 Cinco

El Edificio Roca es una construcción parecida a un coliseo. Es alta y circular, de un color marrón que parece dorado en las noches debido a la iluminación; el edificio fue construido entre "Las trillizas rojas" un grupo de montañas altas de color rojo que se ven iguales a simple vista, pero pueden distinguirse por las cortinas de vegetación que cada una tiene. Esas cortinas forman gran parte del sistema de ocultamiento que tiene el edificio. Se puede creer que estamos ubicados en un espacio alejado de la civilización, pero geográficamente estamos bastante cerca de la ciudad.

El Edificio Roca es la primera formación que tiene el clan Harall. Dentro hay cinco divisiones: la división de perla, está conformada por los hombres que pertenecen al edificio Perla; la división red, es para los hombres que pertenecen al edificio Escarlata; la división park, es para quienes pertenecen al edificio Plata; la división Gael es para los que pertenecen al edificio Roca y la última división, es para los novatos. Los otros edificios mencionados, son el resto de propiedades que tiene Harall y todas están ubicadas en diferentes lugares; la diferencia del edificio roca con el resto de los edificios, es que roca fue construido por Harall, el resto de lugares fueron montados sobre edificios abandonados que posteriormente se renovaron. La forma en la que se decide la división que toman los novatos, es a partir de un periodo de prueba; los novatos ingresan a Harall e inmediatamente llegan a la división de novatos, en ese lugar se hacen pruebas físicas y mentales que se estudian detenidamente y basándose en eso, son redirigidos a una de las cuatro divisiones restantes. Dentro de cada división, los novatos serán distribuidos entre los equipos y entrenaran con ellos, serán parte del equipo por un periodo indefinido, pero los novatos tendrán un seguimiento físico y psicológico cada cuatro meses; una vez que se tengan registros suficientes para definir sus habilidades, entonces el jefe de Harall, estudiará sus informes y los asignara a sus divisiones. Una vez lleguen a ser parte de una división, tendrán uniformes que indicaran la división a la que perteneces.

Los uniformes de las divisiones se distinguen por el color de las hombreras. La división Gael, tiene hombreras plateadas; la división park, tiene hombreras celestes; la división red, tiene hombreras cobre y la división perla, tiene hombreras doradas. En cada división existirá un grupo que sea diferente a los demás, porque serán quienes trabajen de cerca con el líder; el ejemplo es, la división Gael. En la división Gael, están "Los cinco de Gael" o también conocidos simplemente como "Cinco", un grupo que recibe un entrenamiento especial por ser quienes trabajan con el líder, además de ser los más cercanos al jefe de Harall. Dentro del clan Harall, nadie tiene apellido, todos pertenecen a Harall; sin embargo, Harall, es un clan que respeta la individualidad de cada persona, así que todos tienen el derecho de elegir un nombre, identificarse con él frente a Harall e identificarse con él, frente a todos los miembros de Harall. Además de pertenecer a una división y portar el uniforme, los integrantes de Harall deberán ser portadores de un código, el cual será utilizado para mantener su seguridad.

Sean bienvenidos entonces, al clan Harall.

-Aniel tomó el control y apagó el video-

-Bien –Alejandro unió sus manos y observó a los niños- ¿hay dudas?

-¿Qué hacen si hay más de una persona con el mismo nombre? –cuestionó Iván-

-El código que se mencionó al final del video, ayuda a diferenciar a las personas con nombres iguales –explicó Alejandro-

-Si ustedes tienen hombreras plateadas, entonces son ¿del grupo Gael? –cuestionó Julen-

-Así es –respondió Biel- permítanme presentarnos. Nosotros somos "los cinco de Gael", yo soy Biel y él es mi hermano Aniel, nosotros tenemos facilidad para las trampas y sistemas de seguridad, sabemos activarlos y desactivarlos; quienes está sentados a su izquierda son Alejandro y Daniel, ellos son muy buenos para infiltrarse a los lugares y cambiar de identidad con rapidez.

-¿Se disfrazan? –cuestionó Julen con emoción-

-Biel sonrió y asintió- así es, les gusta disfrazarse; después, la persona que está a mi derecha es Nil, a él le gustan las explosiones. Finalmente, el hombre de la cicatriz que ustedes mencionaron en el entrenamiento es Gael, y es nuestro líder.

-Si su líder es el señor Gael ¿quién es el líder de los demás equipos? –cuestionó Iván-

-Todas las divisiones son controladas por Gael –explicó Daniel- pero quienes no lo tienen como líder directo, eligen un líder dentro de sus grupos y esos líderes se vuelven los cinco de Gael.

-Entonces, todos ustedes son el Gael de sus propios equipos y además tienen su propio Gael –trató de traducir Iván las palabras complicadas que salían de los hombres frente a él-

-Sí, y su Gael, es el Gael número uno –completó Julen-

-Así es –asintió Daniel-

-Que inteligentes son los dos –dijo Alejandro mientras desordenaba el cabello de los niños-

-¿Cuándo nos darán ese código? –cuestionó Iván- el de cambiar mi nombre.

-Seguramente en unos cuantos días –contestó Alejandro- ¿están pensando en un nuevo nombre?

-Mmm –Julen jugó con sus manitas- no estoy seguro, creo que me gusta mi nombre. ¿Usted cambió el suyo, señor? –cuestionó tratando de que sus ojitos alcanzaran el rostro de Alejandro, que parecía estar muy alto, muy alto-

-Sí –asintió Alejandro- mi nombre anterior solo se escuchaba bien si le sumaba el apellido, pero aquí no tengo apellidos, así que lo cambié por uno que sonara bien sin necesidad de algo más.

-Julen asintió mientras procesaba la información- creo que me quedaré con mi nombre, me gusta mi nombre –dijo con una sonrisita tímida-

-A mí también me gusta mi nombre –asintió Iván- ¿cómo se ponen los códigos? –cuestionó- ¿es en un papel? Porque no sé guardar cosas.

-Es como un tatuaje invisible, así que está en tu cuerpo, pero no lo ves –explicó Aniel-

-¿Y cómo sé que lo tengo si no lo puedo ver? –cuestionó Iván-

-Porque siempre te queda una marca en ese lugar, mira la mía –Aniel se puso de perfil y señalo una marca que estaba debajo de su oreja, mientras se inclinaba hacia adelante-

-Parece un lunar –dijo Julen- ¿te dolió? A mí me dan miedo las cosas afiladas.

-No duele –negó Aniel-

-¿Tienen otra pregunta? –cuestionó Biel-

-Sí –asintió Iván- cuando estuvimos en la habitación anterior, ustedes se movían diferente cuando cambiaba el color de la luz del techo –pensó un momento apretando sus labios- aunque intenté ver lo que hacían, no lo logré, pero era como si hubiera muchas cosas volando en el aire.

-Eso es por esto –contestó Alejandro mostrando su comando-

-Es como un caracol –dijo Julen-

-Es como un auricular –dijo Iván-

-Así es, eso va en su oreja y sirve para ampliar el sonido a su alrededor o para hablar con sus compañeros –explicó Alejandro- ahora, lo que pasa con el entrenamiento es que esto nos ayuda a escuchar cuando los objetos vienen a nosotros, de esa manera aprendemos a reaccionar rápidamente cuando estamos fuera.

-¿Para qué sirven las luces? –cuestionó Julen- si de cualquier forma escuchan los ataques.

-Las luces nos indican cómo reaccionar –indicó Daniel-

-Cómo reaccionar –repitió Julen tratando de entender-

-Si la luz se pone azul, entonces tenemos que defender a nuestros compañeros de los ataques –explicó Biel- si se pone amarilla, hay que esquivar los ataques y el anaranjado es atacar. De esa manera, aprendemos cómo reaccionar en diferentes situaciones.

-Y la verde ¿esa para qué es? –cuestionó Julen-

-Esa representa un cambio –dijo Daniel- con los colores anteriores, son las máquinas del lugar de entrenamiento las que nos atacan, pero con el color verde, las maquinas se detienen y en su lugar nos atacan otros compañeros. Son peleas cuerpo a cuerpo en donde cada uno de nosotros se enfrenta a un grupo de personas.

-Pero es jugar sucio, porque ustedes son solo uno y estarían en desventaja si pelean con varias personas al mismo tiempo –reclamó Iván-

-Daniel sonrió- de eso se trata, de dejarnos en desventaja. Somos entrenados para que cada uno de nosotros, pueda ganar en un combate cuerpo a cuerpo contra diez hombres –explicó-

-Julen unió sus manitas tratando de formar un puño grande y mientras se concentraba en ello, habló sin pensar- de esa forma, si pelean con cincuenta hombres...entonces solo tendrían que ir ustedes cinco para terminar con ellos –dejó salir aire con frustración por no lograr hacer su puño gigante y levantó la mirada a los hombres que lo observaban- ¿verdad?

-Alejandro sonrió con orgullo al escuchar las palabras inteligentes del niño- así es, exactamente.

-Ya entendí –asintió Julen volviendo la mirada a sus manitas-

-¿Ya está todo claro? –cuestionó Alejandro-

-Iván asintió-

-Julen asintió con la mirada fija en sus manitas que ahora trataban de hacer formas con los dedos-

-Entonces, se irán a sus habitaciones donde los van a estar esperando para darles una última explicación y nosotros los veremos pronto –dijo Alejandro con una sonrisa, acto seguido, le hizo un gesto a Nil para que oprimiera un botón en la pared- cuando salgan, verán unas flechas en las paredes, solo síganlas y llegaran a sus habitaciones ¿bueno?

-Sí –contestó Iván y se levantó- vamos Julen –dijo caminando a la puerta-

-Julen se puso de pie y caminó a la puerta, pero antes de llegar a ella dio una mirada atrás y movió su manita a modo de despedida. Volvió su mirada a la puerta y caminó con Iván hasta salir de la habitación-

-Julen podría ser parte del edificio plata, en un futuro –comentó Daniel-

-No. –dijo Nil- será del Escarlata –afirmó-

-Tú ni siquiera les hablaste –dijo Aniel- ¿cómo puedes saber eso?

-Nil observó el lugar en el que estuvo Julen- yo no era diferente a él cuando tenía su edad, y sé reconocer a uno de los míos.

-Pues si él se va al escarlata, seguramente Iván sí será de plata –dijo Biel-

-Lo único seguro –dijo Alejandro cruzando los brazos sobre el pecho- es que tendremos que esperar para verlo. Ahora, muévanse...tenemos que ir con las trillizas –anunció caminando a la puerta-

-Me gusta el trabajo al aire libre –comentó Biel-

-Seguro fuiste campesino en tu otra vida –bromeó Daniel-

-Si se trata de ser lo opuesto, entonces, seguro fuiste atractivo en tu vida pasada –contestó Biel-

-¿Qué es lo que tratas de decir? Tú quisieras tener un rostro como este –reclamó Daniel-

Los cinco se dirigieron a sus respectivas habitaciones y se despojaron de todo tipo de accesorios; en la habitación del equipo especial, se posicionaron frente a sus casilleros y tomaron los overoles azules con la botas y guantes blancos, dejaron su ropa en el armario y sacaron sus ganchos y cuerdas para dirigirse a las trillizas.

Los cinco de Gael eran los encargados de revisar los sistemas de seguridad que estaban instalados en las trillizas; trampas, explosivos, cámaras, detectores de movimiento y posibles cuevas o pasadizos que se pudieran usar para llegar al edificio roca, todo era revisado para asegurar que estuviera en buen estado. Este tipo de trabajo tardaba varias horas, pero con el tiempo, los cinco habían guardado información de cada montaña en su mente, así que podían moverse con facilidad porque conocía el terreno.

-¿Alguna vez han pensado sobre tener un lugar secreto? –cuestionó Daniel-

-Oye, si tienes el tiempo para pensar en tonterías –Aniel soltó un gruñido- entonces deberías ayudarme.

-Tengo tanto trabajo como ustedes –dijo Daniel mientras se arrastraba por una cueva-

-¿A qué te refieres con lugar secreto? –cuestionó Biel mientras revisaba una cámara- ¿un cuarto rojo?

Varias risas se escucharon al otro lado del auricular.

-Joven hormonal –comentó Daniel con disgusto- me refiero a, si tuvieran un tipo de cuartel secreto ¿dónde lo construirían?

-Si es un cuartel secreto, está claro que debe ser en un lugar oculto a simple vista –dijo Alejandro mientras revisaba con una linterna la cueva a su alrededor-

-Pensaría...en un lugar desierto –dijo Aniel entre gruñidos mientras se esforzaba por escalar más alto- un lugar abandonado, que a simple vista provoque temor, eso ayudaría a alejar a las personas.

-Eso suena bien, pero no puedes construir algo en el corazón de Nil –bromeó Biel-

-Ten cuidado o la roca que está a tu derecha puede explotar –dijo Nil con frialdad-

-Biel se tensó- amigo, no era enserio –dijo una voz nerviosa e inmediatamente las risas de todos se escucharon al otro lado del auricular- que bueno que les divierta mi posible muerte.

-¿De verdad hay una roca a tu derecha? –cuestionó Daniel-

-Así es –contestó Beil- no sé cómo lo supo Nil.

-Será porque estás en una montaña y hay rocas por todas partes, idiota –dijo Aniel y las risas se volvieron a escuchar-

-Nil, abuelo dolido –espetó Beil con enojo-

Las risas llegaron nuevamente al oído de Beil.

-Dejando las bromas de lado ¿por qué preguntas eso, Daniel? –cuestionó Alejandro mientras meditaba si tomaba el camino a la derecha o el de la izquierda, dentro de la cueva-

-Escuché el rumor, otra vez –contestó Daniel-

-¿El rumor? Creí que eso ya había desaparecido –dijo Alejandro moviéndose lentamente en dirección al túnel izquierdo de la cueva-

-Puede que sea real –dijo Nil brevemente mientras cortaba un par de cables-

-Pero, ¿cómo puede ser real? ¿eh? Se supone que somos la primera línea, quienes están más cerca del jefe –dijo Biel- deberíamos saberlo ¿o no?

-¿Gael lo sabrá?-cuestionó Daniel-

-Tal vez, no –contestó Aniel- analizando los rumores, no parece algo de lo que sea aceptable escuchar rumores y si Gael lo supiera, no permitiría esas habladurías. Él seguramente no es ajeno a ninguna de las conversaciones, dentro del edificio.

-También puede ser, que lo sepa, pero deje pasar los rumores porque es parte del plan –contestó Biel-

-¿Cómo que parte de un plan? –cuestionó Alejandro- ¿el jefe quiere que las personas se enteren?

-Existen trampas que deben ser obvias, para que las personas caigan en ellas –dijo Biel-

-Mientras más obvia es la trampa, menos creen en ella...así que la duda los hace caer. La duda puede cegarte de tal forma, que puedes ignorar incluso lo que está justo frente a ti –explicó Aniel-

-A todo esto ¿cuál es el nombre de ese lugar? –cuestionó Biel-

-Creo que es algo como...Ove...Ove...-Alejandro se detuvo en seco para tratar de recordar-

-Overami –contestó Daniel-

-Eso es, Overami –confirmó Alejandro con un movimiento de cabeza, a pesar de estar solo en la cueva-

-¿Overami? –repitió Aniel pensando un momento- en realidad no suena a un lugar que tendría el clan Harall.

-Así es, no se escucha peligroso...ni intenso –comentó Biel-

-Para no sonar como algo peligroso, los rumores dicen que es un lugar que entrena un equipo de elite –explicó Daniel- me gustaría pelear con uno de ellos –sonrió-

-¿Así que de esos se trata? –cuestionó Alejandro burlón-

-¿Qué? –cuestionó Daniel-

-Quiere comprobar que es hombre –dijo Nil provocando varias risas-

-¿Eso es cierto? ¿te sientes amenazado por los chicos malos de un rumor? –cuestionó Biel-

-No, no, claro que no. ¡Hey! ¡Dejen de reír! –contestó Daniel- solo piénsenlo, se supone que nosotros somos la elite del clan y entrenamos a los demás, hemos sido los profesores de cada hombre que está en este momento en una división...pero nunca hemos enviado a nadie a una división llamada "Overami" –acomodó su cabello- si ese lugar existe ¿de dónde salen sus integrantes? ¿quién los entrenó? ¿fue alguno de ustedes y está fingiendo no saber?

Un momento de silencio se creó en los auriculares de cada uno, todos estaban pensando en las palabras de Daniel; no habían tomado un momento para pensar en los rumos y si eran reales o no, pero suponiendo que lo eran, parecía un grupo del que debían cuidarse.

-Lo que dices...-inicio Biel-

-Tiene sentido –agregó Nil- si es una trampa y caemos, es mejor que tengamos cuidado.

-Bien, ya basta de historias de terror –dijo Alejandro- trabajen o no terminaremos esto hoy –ordenó-

[Betty]

-¿Te gusta más este? –cuestionó Betty a Lilith-

-Lilith observó el vestido rosado de lentejuelas- No lo sé, Bett ¿no te parece demasiado para una fiesta?

-No es cualquier fiesta, es la fiesta de una deidad –dijo Betty mientras observaba el vestido color verde- ¿te gusta más el verde?

-Pero no creo que Lenay vaya –contestó Lilith- solo ella me agrada de las personas que van a esas cosas, y pensé que a ti también te agradaba solo ella. ¿De verdad quieres ser parte de la bola de payasos que buscan atención?

-No –negó Betty- al igual que tú, solo me agrada Lenay...y alguien más –dijo con una sonrisita-

-¿Quién? –cuestionó Lilith-

-¿Mmm? –preguntó Betty de forma distraída mientras acomodaba su cabella en el espejo- ¿quién qué?

-Quién más te agrada –aclaró Lilith-

-Nadie –negó Betty- dije, que Lenay me agradaba –se giró a la chica de la tienda- quiero los dos vestidos, gracias.

-Traeré una bolsa –dijo la chica de la tienda-

-No, dijiste "me agrada Lenay y alguien más" ¿quién es la otra persona? –demandó Lilith-

-¿Dije eso? Bueno, seguro se me salió –Betty se dirigió al probador- me quitaré el vestido, ya vuelvo.

-Lilit observó a Betty entrar al probador con una sonrisita en su rostro- ¿qué le pasa? ¿le gusta alguien? –pensó un momento- sea lo que sea, está muy rara.