Capítulo 2 Se asoma la verdad

Nadia entra al restaurant, y ve a Marcos sentado en una mesa justo al lado de un ventanal. Se acerca a la mesa y se sienta.

-Hola amor, ¿Cómo estuvo tu guardia?

- Uf, fatal, tuvimos un accidentado de moto, 2 ingresos más de psiquiatría, un par de alcoholizados, y un hombre con fibrilación ventricular. Nada fuera de lo normal para un viernes por la noche- Nadia se reía - Y tú, ¿cómo estuvo tu noche?

- Tranquila, no hice mucho la verdad. Nos juntamos todos los residentes de primer año, para organizar nuestro primer día en el hospital. La verdad estamos muy emocionados por comenzar.

- ¡Qué bien! ¿Ya saben a qué hospital les toca?

- Sí, nos toca en el hospital de clínicas, así que vamos a tener la suerte de ver bastantes pacientes y de todas las variedades.

- Sí, es genial cuando puedes ver tanta cantidad de casos, siempre aprendes muchísimo. ¡Qué lástima que no estas en el mismo hospital que yo, por lo menos podríamos coincidir un poco más!

- La verdad es que a mí no me molesta tanto - Dijo Marcos. Nadia lo miró sorprendida por su comentario, pero no dijo nada. Continuaron conversando mientras pedían el plato principal. Ella pidió fetuccini con una salsa de hongos, y él una lasaña con salsa boloñesa.

- Hey, tengo una excelente noticia. Ya que se acerca nuestro aniversario, y te queda poco tiempo antes de - comenzar tu residencia, pensé en que hagamos un viaje, ¿Qué te parece? - Le dijo Nadia sin mencionar que ya había comprado los pasajes y reservado el hotel en Grecia.

- Amor, la verdad preferiría no ir a ningún viaje. Es un momento difícil para mí y preferiría no hacer ningún tipo de viaje. - Nadia se quedó en shock. No esperaba que él se negara a un viaje con ella, siempre habían hablado en realizar un viaje antes de que él comenzara su residencia, y eso se le hacía aún más extraño.

- Pero, siempre hablamos de hacer un viaje antes de que comenzaras tu residencia. ¿Paso algo?

- Uf, no quería decírtelo ahora, quería esperar al menos que termináramos de comer. Pero, la verdad es que necesito que nos distanciemos. Quiero enfocarme en esta nueva etapa, y siento que estando juntos no voy a poder vivirla. Además ahora voy a ser médico, no voy a tener el mismo tiempo como para que sigamos teniendo una buena relación. - Nadia se quedó tiesa. Ella siempre se había tomado el tiempo de hacer cosas por la relación, pese a trabajar en el hospital, y estar cansada, nunca dejó de lado a Marcos, es más se esforzaba para poder disfrutar de cada momento juntos.

- Creo que no es una buena excusa. Sabes muy bien que el trabajar en el hospital no es un impedimento para que estemos juntos. ¡Es muy egoísta de tu parte! Siempre di todo por nosotros, me tome el tiempo, te apoye en todo momento, hasta en los momentos más difíciles estuve ahí. Y ahora de repente me dices que es por tu nueva etapa. No te creo.

- Tienes razón. Ya no me atraes, la verdad es que me cansé de estar contigo. Además, con esto de empezar la residencia no voy a tener tiempo de estar para ti, y prefiero ese tiempo para disfrutar, y para conocer nuevas personas. Te agradezco todo lo que hiciste por mí, me hiciste crecer como persona, pero ya no te amo.

Las palabras golpearon tan fuerte a Nadia, ella había perdido mucho tiempo de su vida dedicándole a la persona que creyó con la que iba a estar por el resto de su vida, atravesando cada dura situación, rodeada de amor, y con una gran familia. En ese momento decidió apartarse, decidió florecer y no depender. Desde ese momento decidió tomar un nuevo camino...

- Está bien Marcos, me apartaré. Te deseo tu felicidad, y que logres encontrar tu camino. Sólo quiero que sepas que, si me buscas, no vas a encontrarme. Hasta aquí llegué. Nos vemos Marcos. - Marcos no creyó que Nadia lo aceptara tan pronto, creyó que iba a rogarle, y se quedó anonadado por su rápida decisión. Él no sabía que Nadia estuvo mucho tiempo soportando sus actitudes, que ella tenía la esperanza que su relación iba a mejorar y no sucedió. Se canso de esperarlo, y así fue como una bella flor decidió florecer aún más, liberándose de la persona que solamente detenía su crecimiento.

Nadia tomo su bolso, le dio su último beso, su último adiós, y se marchó a su departamento.

Nadia marcó el número de María - Amiga, ¿Cómo estás? -

- ¡Bien! ¿Cómo te ha ido a ti? ¡Cuéntame todo el chisme, por completo! No quiero que te olvides ningún detalle, igual, ahora que lo noto, ¿no terminaron demasiado pronto de conversar? -

- ¿Puedes frenar un segundo?, necesito verte y contarte todo. ¿Puedes venir ya a mi departamento? es urgente. - Nadia estaba conteniendo sus lágrimas. No quería que nadie notara lo destrozada que estaba, no iba a permitir darle el gusto a Marcos de saborear su sufrimiento. Era demasiado fuerte y orgullosa como para doblarse.

María se preocupó, tomó las llaves de su auto, y comenzó a salir de su casa - Ya voy para allá. -

            
            

COPYRIGHT(©) 2022