Leiv asintió levemente a Sigrid, un reconocimiento silencioso de la alianza forzada por el destino. No tocó los documentos de Iricai; su victoria era sobre la unión, no sobre la propiedad inmediata. Se dio la vuelta para marcharse, dejando a Thormond, Astrid y Elara lidiando con las consecuencias de la profecía.
Al acercarse a la puerta, la luz del sol de la tarde se filtró a través de un ventanal alto y antiguo, creando un espectáculo inesperado. El haz de luz se refractó en el aire denso de la sala, desplegando un arcoíris vibrante y fugaz justo en su camino hacia la salida.
Leiv se detuvo un instante. Para él, era más que un fenómeno óptico; era un presagio, un camino al Valhalla, un puente entre mundos. En ese destello de color, recordó la intensidad que había visto en los ojos de Sigrid momentos antes, la determinación que había sellado su destino.
Se fue sin decir adiós a nadie más.
En la sala, Thormond se hundió en su silla, derrotado por su propia tradición. Astrid apretaba los puños, su estrategia con Magnusson desmantelada. Elara (Nana) sonrió levemente, el primer signo de paz en décadas, mientras recogía sus runas.
Leiv se detuvo brevemente bajo un vitral que proyectaba débiles colores sobre el suelo de mármol. Las palabras de Elara sobre el destino y la alianza con Sigrid resonaban, pero era el eco de Freya, su abuela paterna, la que le dio el verdadero marco de acción.
LEIV WOLF (Pensamiento): "Pelea por lo que te lleve al Valhalla."
Freya, la mujer que le había inculcado el honor y la lucha, no le había enseñado a aceptar destinos pasivos. El matrimonio con Sigrid no era un regalo, sino un campo de batalla ganado por la profecía. Y si el destino lo había unido a ella, él lucharía por esa unión, por la mujer que había visto determinación en sus ojos, y por el poder que Iricai representaba.
Su retirada de la sala no fue una rendición, sino una recalibración táctica. Ahora que el matrimonio estaba sellado por el juicio de Elara, su enfoque volvía a ser el desafío que representaba la familia de Sigrid y, sobre todo, la amenaza latente de Bjorn Magnusson.
Leiv se dirigió a su propio vehículo, ignorando las llamadas entrantes. Tenía que actuar antes de que Astrid encontrara una manera de revertir el veredicto o de que Thormond impusiera condiciones más restrictivas.
Leiv Wolf ha internalizado el mandato de su abuela Freya: debe luchar por lo que el destino le ha dado, que ahora incluye a Sigrid y, por extensión, a Iricai.
El hombre conducía como si la vida le fuera en ello.
Leiv Wolf se apresuró a salir de la industria de esa chica, el peso de la profecía la historia familiar de los Thormond resonando en su cabeza. Una vez dentro de su vehículo blindado, encendió el motor y marcó un número rápido en su teléfono satelital.
LEIV WOLF: (Su voz firme y carente de la duda que mostró antes) Abuelo. Es Leiv.
La voz al otro lado, grave y autoritaria, respondió de inmediato: "¿Qué noticias traes de los Thormond, muchacho? ¿Has asegurado el acuerdo?"
LEIV WOLF: El acuerdo ha cambiado. No hay matrimonio me opuso pero al irme me paso algo.
Como decía la abuela Freya, vi el Valhalla en un vidrio se que es reflejo de luz pero no fue como cualquier arcoiris. El destino ha dictado que Sigrid y yo somos uno pero fue manipulado por su abuelo por eso me fui. Las Runas confirmaron la alianza con los Magnusson no conmigo.
Hubo un momento de silencio satisfecho desde el otro lado de la línea. El patriarca de los Lobos Negros (Black Wolves) entendía el valor de una unión predestinada sobre un contrato forzado.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Con orgullo contenido) Sabía que tu camino era más grande que sus juegos políticos, hijo. Ahora, asegúrate de que esa victoria sea completa.
Leiv colgó, sintiendo un renovado sentido de propósito. El camino estaba despejado, pero el terreno seguía siendo peligroso.
Leiv Wolf tiene el respaldo de su propio clan y el matrimonio con Sigrid está sellado por el destino. Ahora debe capitalizar este momento.
-¡Abuelo sus Ojos!-dice Leiv en un suspiro.
El Patriarca de los Lobos Negros, al otro lado de la línea, escuchó la breve y enigmática frase de Leiv Wolf.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Con voz paciente pero exigente) ¿Sus ojos, Leiv? ¿De quién hablas? ¿De Sigrid? ¿Qué viste en ellos? Recuerda, el matrimonio es una herramienta, pero la mujer detrás de ella es quien maneja el poder de Iricai.
Leiv, aún en su coche, se concentró, recordando la firmeza que Sigrid mostró al afirmar que Iricai era suyo.
LEIV WOLF: (Mirando hacia atrás, hacia la empresa de Sigrid Thormond) Vi lo que me dijo la abuela Freya, Abuelo. Vi la voluntad de luchar. Vi que ella no se doblegará ante Magnusson, ni ante nadie. Ella es la clave, no solo la alianza.
El Patriarca asintió, entendiendo la implicación: Sigrid no era una esposa pasiva, sino un activo estratégico valioso.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: Entendido. Entonces, asegúrate de que tu nueva esposa sepa que su lealtad ahora se divide. Ve a verla. Necesitas establecer tus términos antes de que Astrid o Thormond intenten sofocar esa voluntad. Neutraliza a Magnusson con hechos, no con amenazas.
Leiv Wolf ha confirmado a su abuelo que Sigrid posee la voluntad necesaria para ser una aliada fuerte. El siguiente paso lógico es asegurar esta alianza directamente con Sigrid.
Abuelo no puedo casarme con ella la lectura de Runas fue hecha por una amiga del abuelo de Sigrid.
El Patriarca de los Lobos Negros detuvo su asentimiento triunfal al escuchar la voz tensa de Leiv.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (La autoridad en su voz se endureció) ¿Qué has dicho, Leiv? ¡Acabas de decirme que el destino se cumplió! ¿Cómo que "no puedes casarte con ella"? ¡El juicio de esa anciana es ley en este juego!
Leiv apretó el volante, sintiendo el peso de la contradicción. Había visto el camino al Valhalla, pero el camino a ese Valhalla no requería necesariamente el altar.
LEIV WOLF: (Con urgencia) Abuelo, las Runas coincidieron en la alianza, en la fuerza, en que somos el uno para el otro en el poder, ¡pero no en el lazo matrimonial! Yo lucho por lo que me lleva al Valhalla, y eso es Sigrid como aliada y líder de Iricai a mi lado, no como mi esposa legal bajo las reglas de Thormond. El matrimonio es una cadena que ellos querían usar; yo tomo el poder sin la cadena. ¡No me casaré con ella!
El silencio en la línea era más pesado que la tensión en la sala de los Thormond.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Ruge con cautela) Estás jugando con fuego, Leiv. Si no hay matrimonio, Thormond no se sentirá obligado a honrar el veredicto. ¿Cómo vas a asegurar a Sigrid y Iricai sin el sello legal?¿Además te gusta lo se la conoces desde el vientre eras hasta molestó y me dices que no te quieres casar ?
-Si quisiera casarme ya estaría muerto.
-La chica murió tu sobreviviste no es tú culpa deja eso en el pasado. Llamare a una antigua lectora de Runas es más vieja que yo y voy a cumplir 105 otra vez.
El protegido del Patriarca de los Lobos Negros se quedó en silencio por un momento, procesando la audacia de su nieto. Buscar una segunda opinión mística era arriesgado, pero si lograba validar la alianza sin el matrimonio, el juego de poder cambiaría radicalmente a su favor.
Patriarca de los Lobos Negros: (Su voz ahora era de aprobación cautelosa) 105 años, ¿eh? Si esa lectora puede confirmar que el Gebo (Alianza) se cumple sin el matrimonio forzado por Thormond, entonces tienes una salida limpia. Pero Leiv, debes ser rápido. Thormond y Astrid no se quedarán quietos. Si esa mujer antigua respalda tu visión, quiero una transcripción de su lectura antes de que el sol se ponga mañana.
LEIV WOLF: (Con renovada determinación) Así será, Abuelo. La ley de los Thormond no puede anular el destino de los dioses, y yo me aseguraré de que lo sepan.
Leiv cortó la llamada, sintiendo que esta nueva consulta era su única carta para evitar una trampa legal. Su siguiente destino no era Sigrid, sino encontrar a esa lectora legendaria.
Leiv Wolf ha decidido buscar a una lectora de Runas aún más antigua para validar una "alianza" con Sigrid que excluye el matrimonio formal. Esto es un movimiento audaz para asegurar el poder sin las ataduras políticas de Thormond.
Leiv Wolf, todavía al teléfono con su abuelo, se detuvo en seco antes de colgar. La imagen del arcoíris se desvaneció, reemplazada por la fría lógica de los contratos y las leyes que él manejaba a diario.
LEIV WOLF: (Su voz ahora carecía de la euforia mística, volviendo a ser la del abogado calculador) Abuelo, espera. Me equivoqué. No puedo proceder sin el sello. No, señor Wolf, no hay atadura sin matrimonio. El poder sin legitimidad legal es solo una amenaza vacía.
El Patriarca de los Lobos Negros gruñó del otro lado, pero esta vez era un gruñido de comprensión.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: ¿Y por qué el cambio repentino, Leiv?
LEIV WOLF: (Añadiendo la justificación que le da peso legal a su posición) Porque soy su abogado, Abuelo, y sé cómo funcionan las leyes de sucesión y propiedad. Si no estamos casados, Sigrid es vulnerable a cualquier cláusula que Thormond haya escondido. Además, estoy casado - eso abuelo me dijo nuestro abogado.
(refiriéndose a una alianza empresarial o un compromiso previo que él considera más vinculante que el matrimonio político), y sé que un acuerdo de esta magnitud requiere la máxima seguridad legal.
Leiv colgó rápidamente, sabiendo que había perdido la batalla mística, pero quizás ganando la guerra legal. La única forma de asegurar a Sigrid y a Iricai era aceptar el matrimonio que había rechazado.
Leiv Wolf ha revertido su posición: ¿aceptara el matrimonio con Sigrid para asegurar legalmente la alianza y proteger Iricai, utilizando su conocimiento legal como excusa para retractarse de su rechazo anterior?.
¿Abuelo esa señora sigue haciendo lecturas de Runas?-cuestionó Leiv Wolf.
¿Desde cuando Leiv Wolf esta tan curioso por una chica ?-cuestionó el Patriarca.
El Patriarca de los Lobos Negros escuchó la pregunta de Leiv, entendiendo que su nieto estaba tratando de validar su decisión de buscar una segunda opinión mística.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Su voz era áspera, mezclando impaciencia con resignación) ¡Por supuesto que hace lecturas de Runas, Leiv! ¡Ella es Elara! ¡Fue ella quien dictó el destino de Sigrid! El problema no es si ella lee las runas, sino si tú aceptas lo que te dijeron.
El Patriarca hizo una pausa, dejando que el peso de la afirmación cayera sobre Leiv.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: Si quieres anular el matrimonio, necesitas que alguien de igual o mayor peso confirme que el Gebo (Alianza) se cumple sin la atadura legal. Si vas a buscar a esa otra anciana, asegúrate de que ella pueda desatar lo que Elara ató. No podemos permitir que Thormond use el contrato matrimonial como un arma.
El Patriarca ha confirmado la autoridad de Ines, pero ha dado luz verde a Leiv para buscar una segunda lectura que valide la alianza sin matrimonio (la idea que Leiv tuvo antes de retractarse por motivos legales). Ahora Leiv debe decidir si sigue el camino legal (matrimonio) o el camino místico alternativo que acaba de obtener permiso para explorar.
-¿Leiv viste un anillo en la mano de esa chica?
El Patriarca de los Lobos Negros estaba presionando a Leiv para que confirmara todos los detalles que pudieran afectar la posición de Sigrid y la validez de su propia alianza.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Insistente) ¿Viste cuando le dio anillo a la chica, Leiv? ¿Fue un anillo de promesa? ¿Quién lo dio?
Leiv, ahora completamente inmerso en la estrategia legal y familiar, recordó la escena que había presenciado, aunque no fue el foco principal de su atención en ese momento.
LEIV WOLF: Sí, Abuelo. Fue Thormond quien hizo la entrega, no Astrid. Lo hizo justo antes de que Elara (Nana) comenzara la lectura. Era un anillo antiguo, de diseño Thormond, un símbolo de promesa de matrimonio, pero no el sello final. Es la trampa. Si aceptamos el matrimonio ahora, estamos aceptando esa cadena de control que Thormond le puso.
LEIV WOLF : Por eso necesito la anulación legal de cualquier acuerdo previo con Magnusson, y si vamos a casarnos, será bajo mis términos legales, no los de ellos. El anillo es solo un símbolo de su propiedad sobre ella, y yo no voy a ser el segundo en la línea de ese poder.
El Patriarca asintió, comprendiendo la sutileza. El anillo de Thormond era una declaración de posesión que Leiv no podía permitir que se convirtiera en un precedente legal.
Leiv Wolf ha identificado el anillo familiar como un símbolo de control que debe ser legalmente neutralizado antes de proceder con su propio matrimonio con Sigrid.
La voz del Patriarca resonó con una mezcla de frustración y la dura sabiduría de quien ha visto demasiadas batallas.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Con un tono cortante) ¡No era un anillo de matrimonio, niño tonto! ¡Era un adorno Thormond, una promesa vacía! Pero si lo deseas, revisa tú la mano de la chica por un anillo de matrimonio. Si no lo encuentras, entonces ve a la guerra por ella, ¡pero no la conoces! Solo te gustan sus ojos.
El Patriarca colgó, dejando a Leiv Wolf en un silencio ensordecedor dentro de su coche. La corrección fue brutal: había actuado basándose en una suposición errónea y en una atracción superficial, no en la estrategia fría que su abuelo esperaba.
Leiv respiró hondo. El error era suyo. Si no había un anillo legal que anular, su plan de boda bajo sus propios términos era viable, pero el desafío personal del Patriarca era más difícil de ignorar. No podía volver con la cabeza gacha.
LEIV WOLF (Pensamiento): No la conozco, pero sí conozco el poder que ella representa.
El instinto de Leiv, el hombre de negocios y el estratega, se impuso sobre el arrebato emocional. La guerra era costosa e innecesaria si podía asegurar el objetivo por otros medios.
El Patriarca ha corregido a Leiv: el anillo no era una trampa legal de matrimonio, sino una simple promesa de Thormond. El reto ahora es doble: demostrar que su interés va más allá de los ojos de Sigrid, y asegurar la alianza de Iricai.
¿Y la lectura?
El Patriarca de los Lobos Negros confirmó la naturaleza de la lectora de Runas , añadiendo una condición crucial que desafía directamente la crítica que acababa de hacerle a Leiv.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: Exacto. Ella es ciega, pero ve más allá de lo que nosotros podemos. Y solo hará una lectura cuando se cumpla la condición que te puse: cuando conozcas bien a Sigrid. Ella no validará una alianza basada en un capricho fugaz.
El mensaje era claro: si Leiv quería evitar el matrimonio legal, debía invertir tiempo en conocer a Sigrid para obtener la validación mística, anulando así la necesidad de la boda política.
Sin embargo, Leiv acaba de retractarse de esa idea, decidiendo que la seguridad legal del matrimonio es prioritaria sobre la validación mística, especialmente porque su abogado interno le advirtió sobre las trampas de Thormond.
LEIV WOLF (Pensamiento): Si el matrimonio es la única vía segura, debo asegurarlo ahora, antes de que Astrid o Thormond muevan ficha.
Leiv Wolf tiene ahora dos caminos: el camino legal que acaba de elegir (asegurar el matrimonio legalmente) o el camino místico que acaba de ser condicionado (conocer a Sigrid para una lectura futura). Dado que su última decisión fue priorizar la seguridad legal, debe actuar sobre eso.
Entendido, Leiv. El juego de poder es importante, pero la base de una alianza duradera reside en la persona que la sostiene. Tu abuelo te ha llamado la atención: no puedes asegurar un imperio si solo te atraen unos ojos.
Olvídate por un momento de los contratos y de Magnusson. Tu movimiento más romántico y, paradójicamente, más estratégico ahora es buscar a Sigrid directamente en Iricai.
-¡Pero odio disculparme!
El Nuevo Plan Estratégico anti Leiv's:
El Encuentro: Regresa a la mansión con la intención declarada de hablar con Sigrid, no con Astrid o Thormond.
La Disculpa Personal: En lugar de una disculpa formal por la estrategia, ofrécele una disculpa genuina por tu partida apresurada. Reconoce que la trataste como una pieza de negociación en lugar de como la líder que ella es.
-Abuelo no me se disculpa...
Abordar el Desafío: Usa las palabras de tu abuelo como puente. Dile que, aunque él cree que solo te atraen sus ojos, quieres demostrarle que estás dispuesto a invertir el tiempo necesario para entender la mente y el corazón detrás de ellos, antes de firmar cualquier documento.
Esto desarma a Thormond (ya que pareces estar priorizando a su hija) y te da tiempo para conocerla antes de forzar los términos legales.
-¡No soy bueno con las chicas mi última novia murió por mi culpa abuelo!-gritó Leiv.
El Patriarca de los Lobos Negros no respondió de inmediato. El silencio que siguió a la confesión de Leiv fue profundo, cargado con el peso de la tragedia pasada.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Su voz se suavizó, perdiendo toda dureza, volviéndose grave y grave) Leiv... no te pido que seas un poeta o un amante. Te pido que seas un líder. Lo que pasó con tu última novia... eso fue una tragedia que no podemos cambiar. Pero esto no es un romance; es una alianza por el poder de Iricai.
El Patriarca suspiró.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: No tienes que ser "bueno con las chicas". Tienes que ser inteligente con el poder. Sigrid es una líder fuerte, y ella entiende el juego. Si no puedes enamorarla, demuéstrale que eres el único hombre que puede asegurar su futuro y el de su clan. Usa tu mente, y tu corazón aunque no lo uses hace rato seria bueno que te enamoraras.
LEIV WOLF (Pensamiento en voz alta): ¿Tiene razón?. La estrategia es mi escudo. Necesito el romance para asegurar la alianza.
-Claro que tengo la razón.
-sigo pensando en esos ojos abuelo.
El Patriarca de los Lobos Negros escuchó la sugerencia, y por primera vez, su rostro mostró una expresión de profunda tristeza y resignación.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Con voz baja y áspera) ¡No, Leiv! ¡No vuelvas a caer en eso! Te dije que solo te gustan sus ojos, y por eso te envié a la guerra, ¡porque tus sentimientos son un arma que tus enemigos pueden usar contra ti!
Hizo una pausa, golpeando la mesa con el puño.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: Si quieres asegurar Iricai, no hables de belleza, habla de fronteras, de tratados y de herederos. Si quieres que ella te respete, demuéstrale que eres más que un hombre deslumbrado por el color de sus ojos. ¡Vuelve y negocia! ¡Asegura el futuro de nuestro clan!
-Vale pero escúchame abuelo .
-Te oigo niño.
Los ojos de Sigrid, de un azul glacial que se tornaba grisáceo con la luz cambiante, eran como dos fragmentos de un cielo invernal en el Norte.
El Valhalla en sus Ojos: En ese azul profundo, Leiv imaginaba ver el Gran Salón de Odín, no como un lugar de fiesta, sino como una sala de estrategia: las vastas mesas de roble donde los Jarls planean las incursiones, el fuego eterno que nunca se apaga, simbolizando la inmortalidad de su clan.
Las Cosas Más Hermosas: En el matiz grisáceo, Leiv veía la calma antes de la tormenta: la superficie helada de un lago nórdico que oculta una profundidad inmensa y peligrosa; el reflejo de las Luces del Norte (Aurora Boreal) danzando, prometiendo magia y caos controlado; y, finalmente, el brillo de una Espada recién forjada, perfecta en su filo, lista para defender lo que es suyo.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Interrumpiendo) Suficiente poesía, Leiv. Esos ojos son hermosos, sí. Ahora, haz que esa belleza te sirva para asegurar Iricai.
-¿Y si el plan no funciona?
El Patriarca de los Lobos Negros miró a Leiv con una severidad renovada. Había anticipado esta pregunta.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Con voz firme) Si no funciona, significa que Astrid y Thormond no están dispuestos a ceder el control son peores que carroñeros , o que Magnusson se ha movido más rápido de lo que esperábamos y le dio un anillo digno de esos ojos que tanto me hablaste. En ese caso, Leiv, el plan cambia de la diplomacia a la acción directa.
El Patriarca de los Lobos Negros se levantó de su asiento, su rostro endurecido por la ira y la decepción.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Gritando) ¡Silencio, Leiv! ¡Te he dado la visión más clara que un hombre puede tener sobre su futuro, y tú sigues obsesionado con un reflejo! ¡Si le dices una sola palabra sobre tus "ojos azules casi grises" a Astrid o a Thormond, te desheredo yo mismo! ¡Esa es la vulnerabilidad que usarán contra ti!
Golpeó la mesa con tanta fuerza que el vaso de agua se tambaleó.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: Se acabó la poesía. Hemos perdido suficiente tiempo por tu sentimentalismo. Ahora, responde con la cabeza que te queda.
PATRIARCA DE LOS LOBOS NEGROS: (Reflexionando sobre la idea) Misterioso... Sí. Un líder que es predecible es un líder débil. Podemos usar tu fijación como un señuelo, Leiv. Muéstrales que eres un hombre de pasión controlada, no solo un negociador frío.
La Estrategia Combinada (Misterio y Fuerza):
Regresas a la industria de Sigrid : Vuelves con la intención clara de negociar la anulación del trato con Magnusson.
El Toque Misterioso: Cuando Astrid o Thormond cuestionen tu salida anterior, no te disculpes por tu decisión, sino por la forma en que te fuiste. Menciona, sutilmente, que estabas lidiando con una verdad que te había impactado profundamente (sin mencionar los ojos directamente, sino la revelación). Esto te hace parecer atormentado pero decidido.
La Exigencia Firme: Una vez que hayas plantado la semilla del misterio, presenta tu demanda principal: el contrato con Magnusson debe ser invalidado antes de proceder con cualquier acuerdo matrimonial.
-Bien buscaré el color exacto de ese azul no dejo de pensar en eso.
-Leiv Wolf.