Capítulo 5 No hay peros

Cuando terminaron de los tramites en la estación, llevaron a su casa a Mildred, Ambos bajaron para acompañarla, al entrar por la puerta, Sara corrió a ayudarla a sentar.

"¿Mili que te paso?"

"Nada no te preocupes estoy bien, mira te presento el es el hijo del señor Russo, Alessandro, y a Alex ya lo conoces.

"Buenas tardes" ambos contestaron

"¿Mili y que estoy aquí puedo verlas?" le dijo Alex mirándola, a él le gustaba mucho. Las hijas de Mildred el era como su tío.

Ante la mirada de Alessandro quien no entendía nada, la niñera bajo con dos pequeñas niñas.

"¡aquí están mis princesas!" Alex las tomo en brazos y les dio un beso las niñas también lo querían mucho, Alex cada que podía venia a verlas y ayudaba a Mildred.

Alessandro al ver a las niñas pensó que era hijas de Alex, y que por él trabajo el estaba separado de ellas, miro a las niñas atentamente eran unas niñas preciosas, a el no le gustaban los niños, pero pensó que esas niñas eran lindas, mas por que ambas tenías el mismo color de ojos, que su madre.

Después de un hora ambos se despidieron y se fueron, mas tarde él señor Russo llamo a Mildred diciendo le que se tomara toda la semana para que descansara, Mildred no estuvo de acuerdo, después de una larga negociación acepto descansar solo en fin de semana como era viernes entonces descansaría bien dos días.

Cuando Alessandro y Alex iban de regreso al hotel...

"Son hermosas tus hijas Alex, es una pena que no puedas verlas tan seguido"

Alex sonrió," Isabella y Sophia no son mis hijas señor, las amo si pero digamos que por ahora solo soy un amigo."

"Ya veo, bueno, espero y su marido no nos haga un escándalo."

Alex volvió a reír, "señor Mildred, es divorciada, son sólo ellas tres"

"Oh, bueno si te gusta la madre, serian tus hijas no? Dime ¿ella no quiere aceptarte? Si es así puedes pedirle a mi papá que te deje en esta sucursal así podrás cortejarla mejor"

Alex se quedo pensando... "eso sería excelente señor no lo había pensado, le diré a su padre en cuanto lleguemos."

Alessandro, ya no hablo no le gusto lo que dijo el guardaespaldas, él se imagino que Alex diría que no, pero se habla equivocado, no sabía por que no estaba agusto con lo que acababa de decir.

El fin de semana paso rápido el señor Russo le había dicho a Mildred que la comida la dejaran para el siguiente fin de semana que ella se encontrara mejor, en la ausencia de Mildred el señor Russo hizo un junta en el hotel donde les anuncio a los empleados que el nuevo dueño era su hijo, ya que el tomaría un descanso, la mas emocionada era patricia ya que según ella por fin había encontrado al hombre de sus sueños, Alessandro, Alex habló con el señor Russo sobre el tema de quedarse, él seria uno de los guardaespaldas de su hijo, el lunes que regreso Mildred, ya no se le notaba tanto el golpe que le habían hecho, así como le dijo el señor Russo, Alessandro, se encargo de refundir en la cárcel a Alvaro Smith, y no saldría en muchos años.

En cuanto llego el señor Russo la mando llamar.

"Mili pequeña que bueno que ya regresaste, ¿como te sientes, mejor?"

"Buen día señor, si ya mejor no se preocupe, ¿dígame para que me mando llamar?"

Estaba diciendo cuando se abrió la puerta y entro Alessandro seguido de loa cuatro hombres que siempre estaban al lado del señor Russo, estos en cuanto vieron a Mildred, olvidándose del lugar se acercaron para abrazarla uno por uno, les daba mucho gusto que ella estuviera bien.

"Oh hermosa que bueno que has regresado"

"¡Mildred no sabes que aburrido es aquí sin ti, te he extrañado mucho!"

"Mili que bueno que ya estas de regreso"

"Ya dejen a mi princesa en paz lea dije que estaba bien" dijo Alex mientras alejaba. cada uno para el abrazarla.

Alessandro sólo miraba la escena.

"Hijo eh decidido que los cuatro hombres aquí presentes se queden contigo, ahora Mildred el motivo por el que te llame es que tengo dos cosas que pedirte, la primera que aceptes el puesto de sub gerente del hotel se que tu y mi hijo podrían hacer muchas cosas juntos,¡ tienes la capacidad para hacerlo y esta vez no aceptaré un no! Siempre te has negado a un ascenso pero hoy no lo acepto la segunda es que Sandra quiere que el sábado vayas a la casa a comer claro junto con las niñas".

Todos voltearon a verlo sabían que Mildred era muy buena para el puesto así que todos aplaudieron para felicitarla.

"Señor le agradezco infinitamente, pero... Si gusta puedo solo ayudarlo sin ningún tipo de nombramiento yo..."

"¡No hay peros ya lo dije a partir de mañana tomaras el puesto.!"