Capítulo 5 Peligro del pasado

- Zariel, ¿qué haces aquí?, no tenías que venir. - De repente llegó una voz suave.

Zariel De'Ath guardo rápidamente el informe en su bolsillo de su traje, su boca enganchó una leve sonrisa.

-Alexia. Estoy preocupado por ti, así que estoy aquí ¿Cómo estás?.

Al igual que su voz, la mujer tenía un aspecto amable, las cejas eran bonitas que estaban ligeramente fruncidas, su cara blanca tenía un par de ojos grandes y brillantes, los suaves labios de cereza sonreían, pero están un poco tristes.

-Zariel, no encontramos una solución, el médico dijo que debía operarme, quizá no tenga más hijos en mi vida, de esta manera tu padre no me dejara casarme contigo.

-Alexia, no te preocupes, iremos a los Estados Unidos con los mejores doctores. -Zariel reconfortó a Alexia.

- ¡Vamos!, vamos a casa.

Saliendo de la puerta del hospital, Liv se apresuró a llamar un taxi, no fue hasta que se subió al coche se dio cuenta de que le faltaba el informe del examen, debió perderse accidentalmente cuando se tropezó con aquel caballero. El taxi, transmitió las noticias.

-Queridos televidentes acabamos de recibir noticias, hay un rumor de que había fecha para la boda del CEO del Grupo De'Ath y Alexia Williams, pero por alguna razón el presidente Damián De'Ath declaró que el contrato de matrimonio se cancela, Zariel De'Ath no se casará.

Liv se congeló, la figura que acababa de surgir en su mente. Uf, esa persona que acaba de reconocer era el presidente ejecutivo del Grupo De'Ath lo había leído en las revistas. El mundo de los ricos tiene los problemas de los ricos, el mundo de los pobres también tiene los problemas de los pobres, el destino de la vida es difícil de entender, su mano volvió a tocar su vientre aquí, nacerá un bebé.

7 meses después.

Departamento de ginecología del hospital.

-Fanny, tengo miedo. - Liv estaba agarrando la mano de su mejor amiga tenía un gran dolor y toda su cara estaba sudada.

- Ah me duele.

-Liv, puedes hacerlo, la doctora ha dicho que el bebé nacerá pronto, no tengas miedo, te esperaré afuera, piensa en el lindo bebé que tendrás, tienes que ser valiente, el bebé sigue esperando de que des a luz.

Fanny estaba preocupada, la empujó a la sala de partos con la enfermera, una hora más tarde por fin se oyó un fuerte llanto bebé en la sala de partos, Fanny Brown se cruzó las manos y rezo. La puerta de la sala de partos se abrió la doctora se quitó, la mascarilla.

-La madre y el niño están a salvo, es un niño con unos 4 kg.

-Gracias doctora.

Fanny, estaba tan emocionada que se inclinó, dio las gracias a la doctora.

-Ve a ver a tu amiga, ella es muy fuerte. -La doctora sonrió y se fue. La cara de Liv estaba pálida cuando la empujaron a la sala, tenía lágrimas en los ojos.

-Fanny ¿es un niño verdad?, tengo una familia de nuevo.

-Sí Liv, tienes un hijo, que pequeño más bonito, cuando puedas levantarte de la cama vamos a ir a verlo.

- Quiero ir ahora, solo pude míralo por un momento. - La cara de Liv era de felicidad.

-¿Has pensado ya en un nombre? ¿Cuál es el nombre? -Preguntó Fanny con una sonrisa.

-Dime, lo primero ¿es mi ahijado?.

-Si es tu ahijado. -Las 2 bromearon y rieron y la escena fue reconfortante.

-Mmm, se llama Iker, Iker Jones, ¿de acuerdo?

-Iker buen nombre su significado es un nuevo comienzo.

-¿Oh? Qué bien.

-Mi ahijado se llama Iker. -Fanny Asintió con una sonrisa.

Pero justo en ese momento la enfermera llegó de repente corriendo asustada y les gritó.

-Señorita Liv, su hijo, ha desaparecido cuatro hombres de trajes negros acaban de llegar, sólo dejaron esto, dijeron que la señorita Liv sabe por qué. -Dijo la enfermera y le entregó un sobre.

Liv cogió el sobre con las manos temblorosas, lo abrió y descubrió que era un cheque la cantidad que contenía era de medio millón de dólares, también había una carta imprenta, echó un vistazo a la carta, toda su cara estaba aún más pálida, dejó escapar un grito desgarrador.

-¡Nooo!.

Fanny cogió la carta, se tambaleó, ¿Cómo ha podido pasar esto?.

-Me encontró Fanny, mi bebé, quiero mi bebé. -La cara de Liv estaba llena de lágrimas, no pudo aguantar más y se quedó sin fuerzas.

-Te ayudaré a encontrarlo, vamos a buscarlo. -Fanny la abrazó con fuerza, queriendo darle consuelo, pero encontró sus manos y pies fríos.

-Liv, tienes que ser fuerte, no me asustes. ¿Vale?.

-Quiero mi bebé, no quiero el dinero, solo quiero a mi Iker, a mi hijo.

Un grito desgarrador se convirtió finalmente en un lamento, un lamento lastimero, era como un gatito herido, Liv estaba en la cama del hospital la pena y la impotencia la rodearon como si no fuera a mejorar nunca.