Capítulo 6 Regreso

5 años después.

- Mamá, ¿Cuándo llegaremos a casa de la tía Fanny? Extraño tanto Fanny.

En el avión, un lindo niño de 5 años estaba sentado al lado de una joven, su pequeña cara inclinada hacia ella, sus labios rojos y sus dientes blancos.

-Ya casi llegamos, tienes que ser agradable y tranquilo. ¿de acuerdo? Fanny nos recogerá pronto, siéntate bien.

Liv sonrió con ternura, mirando la cálida e inocente sonrisa de su hijo, se sintió triste, sus ojos también estaban vacíos, como si intentara ver otra cara que sólo pudo ver una vez, quería ver esa cara a través de este rostro infantil, su otro hijo, su bebé, sus pensamientos eran: ¿Dónde está ahora?, perdona a mamá, mamá realmente no sabe dónde estás, lo siento mucho.

Una lágrima bajo por su cara cada vez que sus pensamientos se habían concentrado como una ola de tristeza, el odio hacia ese hombre de la máscara incrementó aún más ¿Cómo podía ser tan cruel? ¿Cómo podía separar a una madre de su hijo?.

-Mamá, ¿estás llorando?.

La pequeña mano se acercó y limpió las lágrimas de los ojos de la mujer.

-Mamá, no llores, Iker es bueno, Iker te protegerá.

-Buen chico, no estoy llorando, estoy feliz porque por fin hemos vuelto.

Liv se secó las lágrimas, besó la cara de su hijo, este niño que había recogido al lado de un río cuando estaba desesperada, nunca pensó que sería tan dulce. La acompañó durante 5 años y le dio una gran alegría, pero aún faltaba su otro hijo. El avión aterrizó y rápidamente se dirigieron al camino de la salida.

-Mamá, quiero hacer pipi - Dijo el pequeño con el ceño fruncido.

-Bien, entonces mamá te llevará.

-No, iré yo solo, ya soy un niño muy grande, y mamá es niña.

Iker negó con la cabeza con firmeza.

- ¿Pero puedes hacerlo tú solo?.

-Iker es un hombre.

El pequeño se deslizó a través de las personas que pasaban, corriendo hacia los baños, un hombre alto que estaba en la sillas de espera que estaban detrás de Liv se ha levantado por casualidad. La frialdad del hombre hizo que los demás en el aeropuerto no se atrevieran a mirarlo, levantó la mano y miró el reloj de diamantes que llevaba en la muñeca, sus cejas se fruncieron mientras caminaba hacia el baño, a grandes pasos llegó a la puerta del baño, empujó la puerta para entrar. Iker levantó la cabeza para mirar a este hombre.

-Señor yo llegué primero, voy a orinar primero, ponte en la cola.

Uy. Miró hacia abajo y se dio cuenta de que había un niño de unos 5 años cerca de él, Zariel levantó las cejas.

-Juntos.

Iker también levantó las cejas siguiendo su movimiento.

-Tú estás aquí y yo no puedo orinar, por favor sal primero.

Sin razón alguna al ver a este niño le pareció familiar y amigable, incluso no era más alto que su muñeca, esta carita, este par de ojos ¿Dónde los había visto?

-Señor, por favor salga primero. -Dijo Iker, muy educado.

-Pequeño tonto si no vas al baño, pronto nosotros tampoco podremos usarlo, hay mucha fila.

Dijo Zariel de manera divertida, el pequeño tonto se atrevió a discutir con él.

-Eres muy malo, quitarte los pantalones delante de los demás, la profe dijo que eso no está bien. ¿Eh, tío? Tu pito es tan grande y el pito mío es tan pequeño.

Zariel estaba atónito. ¿de qué estaba hablando este pequeño niño tonto?, mirando el suyo, frunció el ceño.

-Porque el tuyo y el mío son diferentes.

Cuando salieron del baño Iker se dirigía donde su madre lo estaba esperando con cara seria.

-Iker, ¿Qué pasa?.

-Mamá, ese señor. -Iker señaló a una alta figura delante de él, le dijo a Liv.

-El pito de ese señor es muy grande y el mío es muy pequeño.

-El pito. -Liv no entendió por un momento.

-El pito que usamos para orinar, ese señor incluso orinó conmigo en el baño.

Uf. La cara de Liv se puso en roja, no sabía si reír o llorar por las palabras de su hijo, es vergonzoso, inconscientemente miró a la espalda del hombre entre la multitud, no cabía duda de que ese hombre era excepcional, sólo su espalda, pero ya se veía guapo. La figura delgada y robusta, el traje a su medida y de la mejor tela, el hombre desapareció por la esquina del aeropuerto a toda prisa.

-Ese señor es indisciplinado y maleducado, no ha tirado de la cadena cuando ha terminado de orinar, yo tiré la cadena por él.

-Si, Iker es el mejor. -Liv se puso en cuclillas, avergonzada y besó la cara de su hijo.

-Vamos caminando, Fanny debe estar esperando.

-Vamos a ver a tía Fanny, mamá apúrate. - Gritó con urgencia, estaba tirando de Liv hacia la puerta.

-¡Ah!, Iker.

Una mujer en la entrada de espera llevaba un vestido estrecho y ajustado con un par de zapatos dorados de cuero de tacón alto, les gritó exageradamente, alzó a Iker con emoción.

-Buen chico, ¿Me has echado de menos?, dame un beso.