Por un momento había sentido tranquilidad de ver que no me recordaba y es que ya habían pasado años desde que mi madre no dejaba acercarme a la Reina o al Rey.
- Por cierto, toma tu lugar en donde te corresponda y no cometas algún error.
- Si, su majestad -dijo y salió de la habitación-
Después de decirle a todos que la Reina estaba lista para inspeccionar el lugar, todos comenzaron a volverse más locos de lo que ya estaban, ayude a arreglar las mesas, poner la comida en su lugar, todo estaría listo, dejé el traje en la habitación del Príncipe y regresé a las cocinas
- El primer invitado a llegado -dijo Melissa acercándose a Glass- Es el hermano del Rey
- ¿Que esperas Gisselle? -hablo Glass- atiende a los invitados y tu madre le avisará al Rey
No iba a pelear con Glass por que es imposible ganarle, la única persona que no soportaba ver en el castillo era al hermano del Rey, si el Rey tenía momentos en el que era insoportable, su hermano parecía el triple de insoportable, agarre la charola y salí de ahí, no puede ser, venía con su familia.
- ¿Gusta algo de tomar? -dijo Gisselle-
- ¿Y tu que crees? -pregunto irónicamente la hija del príncipe-
- Un ponche para mis hijos y dos vinos, háblale al Rey y dile que su hermano a llegado, ¿Que esperas muchachita? -frunció el ceño al ver que Gisselle no se retiraba- Que maleducada eres, le diré al Rey y seguro mañana ya no estarás aquí
- Una disculpa, ahora le traigo sus bebidas -se retiró de ahí- Mandilón -llego a las escaleras y vio al Rey, así que hizo otra reverencia- Su majestad, a llegado su hermano, me ha dicho que le avisara.
- Perfecto, llama a Timothée y a mi esposa, dile que los quiero abajo ya -ella asintió y llegó a la cocina- Dos ponches y dos vinos para la familia del príncipe Henry
- ¿Toda su familia?, uno aquí dice fiesta y ya se quiere traer a todo el que pueda -dijo Glass, al igual que la mayoría, a ninguno le agradaba el hermano del Rey-
Me retiré y avisé a la Reina que los invitados habían llegado, luego fui con el Príncipe, pero el no abría la puerta.
- Su alteza, los invitados han llegado y su padre ya está esperándolos -una vez más nadie contesto- Enserio. -abrió la puerta y vio a Timothée- Tu padre está abajo
- ¿Quien te dio la orden de que entraras?
- El Rey te está esperando, ni siquiera te has puesto el traje.
- No bajaré
- ¿Que no bajarás?, Sabes cuanto me tarde picando toda la fruta y verdura para cumplir tu capricho, no fui la única.
- No tienes derecho a hablarme así, olvidas cual es tu lugar, tu misma lo dijiste.
- No olvido mi lugar Timothée, solo intento decirte que no seas igual que todos, toda esa comida que se acabara en unas horas la hicimos personas dedicadas para que vengas a decir que no quieres bajar -suspiro- tu tío a llegado, no me hagas ir a decirle que no bajarás, el es diferente a tu padre y no dudara en hacer chistes de mal gusto sobre mi o Glass por que eso pasa cada que viene
- ¿Hablas del tío Henry? -ella asiente- ¿Desde cuándo se volvió cercano a papá?
- Desde que te fuiste, los teníamos todo el tiempo aquí, ni se diga de lo maleducadas que son sus hijas y su hijo -suspiro-
- Me cambiaré -vio a Gisselle que se salia- Esperaras afuera, es una orden
- Chantaje -dijo mientras Timothée volvía a sonreír-
Después de unos minutos volví a tocar la puerta.
- Entra -ella abrió y cerró la puerta una vez adentro de la habitación- ¿Que tal?
-¿Que tal?, te ves super bien -se sonrojo al decir eso- vas a dejar impactados a muchos
-Quiero que estés conmigo, es una orden, por si se me ofrece algo y no pienso cambiar de opinión, es un capricho
- Si me botan del castillo, será tu culpa -sonrió y se acerco a el- arregla un poco tu corbata -dijo acomodando la corbata- listo, ahora ve con tu tío - aliso el traje-
- Prometes quedarte cerca -agarro la mano de Gisselle impidiendo que siguiera limpiando el traje- no recuerdo a mucha familia y me sentiré nervioso
- Lo prometo
Dios!, que cerca estaba de Timothée, me alejé de él y salí, dejé que el fuera adelante, todos dirigieron su vista a el cuando bajaba los escalones, esperé a que el bajara y luego lo hice yo, pero el se espero, una vez que estaba junto a él discretamente me hablo-
- ¿A quién saludo primero?
- A tu tío, recuerda, se llama Henry -el asintió y se acercaron-
- Tío Henry, un gusto verlo -sonrió y vio a Gisselle mientras ella asentía-
- Mira cuánto has crecido -Lo abrazo- listo para reinar este castillo y Noruega
- No lo creo tío, a mi padre aún le faltan años .
- ¿Acaso tienes miedo en que ese día llegue y no sepas cómo reinar? -Timothée frunció levemente el ceño-
- ¿Gusta que le traigan un poco más de vino? -intervino Gisselle-
-Disfrute la comida tío, que esta exquisita -se alejó y Gisselle lo siguió- ¿Toda esta es mi familia? .... ¿Y las princesas que invité?, no hay nadie...
- ¿Tampoco la princesa de la que estás interesado?
- Nadie me interesa, bueno tú si, pero de ahí... no, creo que no.
En ese momento sonreí por su comentario y observé a los demás, ahí había una princesa muy hermosa, de seguro le gustaría a Timothée.
- Discretamente -me pare enfrente de el- atrás de la señora de azul, ahí hay una princesa con más princesas pero ella se ve más hermosa, así que ve por ella galán
- ¿Tu donde estarás?
- Solo necesito que me vea Glass y me regreso para ver como vas, no lo arruines
Timothée fue hacia ella y lo perdí de vista, me fui hacia las cocinas y ahí estuve un buen rato, mientras me apuraba a ayudarle algunas de las que llevaban vasos. Todos se pararon un momento a descansar, ya que según Glass, "El Rey presentaría a su hijo ante la sociedad" y yo no podía perderme eso, salí de tras de Glass y lo seguí, me pare en una de las esquinas, no muy en el fondo y ahí estaba el Rey junto a su hijo, Timothée estaba buscando a alguien con la mirada, supuse que había perdido a la princesa con la que lo deje, hasta que su mirada chocó con la mía, le sonreí, era lo único que podía hacer, ya que sabía que el en esos momentos se sentía muy incomodo. Todos aplaudían ante la presencia del príncipe y el Rey, su gran parecido entre ambos, la Reina también se encontraba a un lado de ellos, ella estaba muy hermosa, su vestido era color vino, características pequeñas que hacían buena combinación con el Rey y con su hijo.
- Dile a todas que preparen los vinos, y repartan, todos se desocuparan de esto y van querer beber más -dijo Glass mientras le daba pequeños empujones a Gisselle-
-Ya voy, todavía no termina, que exageración -suspiro y camino hacia la cocina- Dice Glass que sirvan el vino, ya todos se cansaran de ver a la familia Real y van querer beber más
Mientras mi madre se encargaba de servir el vino con otras cuatro personas, yo me encargaba de repartir junto con Melissa y Juliet, al salir por segunda vez de la cocinaba repartí a las personas, no encontraba a Timothée, pero si estaba la princesa con la que había estado antes de que lo presentaran ante la sociedad.