¡Maldición, lo hice! Dejé mi carta en su mochila. Nunca había sentido tanta adrenalina en mi vida, dime exagerado, pero vi mi vida pasar por un segundo. Por un momento creí que Demian me descubriría o entraría a los vestuarios, (mañana tiene partido, así que debe entrenar).
Nadie me vio entrar o salir de ahí. Lo cual es una suerte, no sabría qué di