Capítulo 10 El restaurante

Marvin estaba concentrado en los documentos y continuó hojeándolos a pesar de que escuchó que se abrió la puerta.

Su ceño se frunció, pero a Whitney no le importó. Ella se acercó a él y sonrió. "Llévame a cenar. Tengo hambre".

Marvin no se molestó en mirarla. Cogió un bolígrafo y empezó a firmar los escritos. "¿No comiste nada cuando te levantaste?".

"No", se quejó la chica. "Sería nuestra última comida juntos. Me parece ideal una cena de despedida. Podemos ser amigos, ¿no?".

Marvin dejó de escribir y la miró. Su rostro se iluminó con una sonrisa torcida mientras escudriñaba todo el cuerpo de la joven. "Ya entiendo por qué estás vestida así. ¿Tengo que cambiarme de ropa?".

"No". Whitney sonrió seductoramente. Le puso la mano en el hombro y acarició su piel con suavidad. "Tienes un cuerpo increíble, Marvin. Te verás bien sin importar lo que traigas puesto".

Se acercó aún más a él y le rozó la cara con sus cálidos pechos. El hombre tragó en seco debido a que el dulzor de su perfume le hacía la boca agua. La atrajo hacia él en un fuerte abrazo y comenzó a morder su suculenta piel.

Whitney se giró para seguirle el juego y gimió: "¡Ay! ¿Qué estás haciendo? ¿No dijiste que ibas a cenar?".

El hombre sumergió la cabeza en sus pechos y murmuró: "Tú eres mi cena, ¿no?". Whitney gimió mientras la mano de él recorría cada centímetro de su cuerpo. Una hora más tarde, ambos se desplomaron en el sofá, resoplando y jadeando.

Amy estaba parada fuera de la sala con los documentos. Llamó a la puerta dos o tres veces, pero no tuvo respuesta. Ella entendió lo que ocurría ahí adentro y, abatida, se fue a su asiento. '¡Vaya! ¡Qué rápido eres, señor Marvin! Fui a buscar los papeles y ya estás ocupado con tu mujer'.

Después de una hora de pasión, el hombre encendió un cigarrillo y le daba bocanadas con satisfacción.

Whitney le rascó suavemente el pecho con un dedo y sonrió. "Duró poco, ¿eh?".

Marvin la miró con recelo mientras una leve sonrisa adornaba sus labios. "¿Dices que duró poco? Creo que es suficiente por hoy. De todos modos, no tendrías la energía para continuar, porque no has comido nada". Este luego amenazó con poseerla de nuevo y la mujer lo empujó con agilidad.

El hombre abrió el armario, sacó un vestido sencillo de mujer y se lo tiró. "Ponte este".

Su guardarropa atesoraba los atavíos de Whitney. Marvin era un loco en la cama, por lo general le destrozaba la pieza de vestir que llevara mientras hacían el amor. Por eso, siempre tenía ropa guardada en el armario por si acaso.

Los dos se cambiaron de ropa y se observaron. El rostro enrojecido de Whitney la hacía verse como una hermosa rosa y se apreciaba un destello de felicidad en los ojos fríos del hombre. Estaban hechos el uno para el otro. Marvin le indicó a Amy que terminara el trabajo y se marchó a cenar con la mujer.

El coche llegó a un barrio antiguo y entró en un antiguo callejón. Había un patio cuadrangular situado al final de este. Aunque el edificio parecía en ruinas, era uno de los restaurantes más famosos de Ciudad H. La casa pertenecía a una familia que trabajaba en palacios sirviendo a las familias reales antes de abrir el restaurante, y su técnica se había heredado de generación en generación.

Whitney había estado en el restaurante varias veces y le encantaba la papilla, ya que esta la transportaba en el tiempo. Ella solía decir que la papilla le daba un bocado del pasado.

Marvin siempre se reía ante ese comentario.

Algunos trabajadores del restaurante salieron cuando escucharon el bocinazo del auto, miraron a Marvin y sonrieron. "Es el señor Marvin y la señorita Whitney. Por favor, siéntense en el reservado". La camarera les dio la bienvenida.

"Carlee, ¿está lista la cena?".

"Ahora solo tenemos papilla. Llega temprano, señor Marvin. Aún no es la hora del servicio de la comida".

"Está bien. Trae entonces un cuenco de papilla. Aún no ha almorzado. Ah, y agrega un poco de..."

"Zanahorias, ¿verdad?". Carlee sonrió con complicidad. "Lo mismo de siempre. Traeré un tazón de papilla para la dama de inmediato".

Luego, entró a la cocina para preparar el pedido.