Capítulo 5 Su crueldad

"Sabes muy bien que nunca volvería a tocar a ninguna mujer que no sea Kate An", pronunció John en una voz peligrosamente baja. Sus ojos se habían endurecido, y su tono era tan frío que era como si la temperatura en la habitación hubiera bajado de repente. Mike luchó para resistir el impulso de temblar.

¿Kate An?

¡Esa mujer llevaba muerta cinco años!

¿Acaso aún seguía esperándola? ¡Maldición!

Tasha evitó mofarse en voz alta después de escuchar las palabras del hombre. En cambio, mantuvo su temperamento bajo control y sonrió de manera tensa. "Señor Gong, ¿lo escuché mal? Debe referirse a Helen An, ¿verdad? Si mi memoria no me falla, Kate An murió hace cinco años y usted se comprometió con Helen menos de dos meses después de su muerte", comentó fingiendo inocencia.

John puso toda su atención en ella al oír eso. "¿Cómo lo sabes?", la interrogó con el rostro crispado.

Tasha simplemente se encogió de hombros. "Estuve al tanto de las noticias locales incluso cuando estaba en el extranjero", declaró, y después se burló sarcásticamente de él, "Debo decir que los informes exageraron enormemente su crueldad".

El hombre apretó los puños y su rostro se oscureció ante esas palabras. Mike miró a su amigo con temor, pues sabía que estaba a punto de perder el control.

Eso pasaba cada vez que alguien mencionaba a Kate. Su círculo de amigos y conocidos había aprendido desde hacía mucho tiempo a no mencionarla en absoluto.

El hombre se paró apresuradamente frente a Tasha, temiendo que John realmente terminara matándola si estallaba. "Ignórala, John. No sabe lo que dice", advirtió lentamente.

El otro, sin embargo, siguió mirándola con la mirada perdida.

Su respiración se había vuelto irregular. ¿Su crueldad?

¡Qué descaro tenía esa mujer tan ignorante!

Estaba tan indignado que simplemente salió furioso de la habitación.

La chica miró fijamente su figura en retirada sintiendo una nueva punzada de dolor.

Ese hombre realmente no tenía nada que decir para defenderse.

¿Significaba eso que verdaderamente había estado involucrado en el intento de su hermana de asesinarla hacía cinco años?

Los recuerdos regresaron espontáneamente a su mente.

Había sobrevivido a de ser empujada al mar gracias a que Cohen Su, el CEO de S Group, la salvó. En ese momento ya estaba embarazada, y su primer acción tan pronto como se recuperó fue, por supuesto, correr hacia John, su prometido en aquel entonces. Sin embargo, para su horror pronto se enteró de que este último ya la había reemplazado con Helen como su prometida.

De hecho, se sintió más traicionada por él que por su hermana. A fin de cuentas siempre le había dicho que la amaba por encima de todo, pero si eso fuera cierto, ¿cómo era posible que se comprometiera con otra menos de dos meses después de su supuesta muerte? Eso sin mencionar que había sido su propia hermana la que había intentado asesinarla

Imposibilitada de regresar con la familia An o con la familia Gong, no tuvo otro recurso que buscar refugio en S Group. Esa compañía no solo hizo posible que se sometiera a una cirugía reconstructiva total de rostro, sino también que pudiera dar a luz a su bebé sin ningún contratiempo.

La única razón por la que regresó fue para llevar a Helen ante la justicia y para averiguar si John realmente había tenido algo que ver con el atentado. Si ese era el caso, se aseguraría de que tanto él como su hermana pasaran el resto de sus vidas tras las rejas.

Después de que John se fue, Mike soltó un suspiro de alivio y llamó a Felix para que desencadenara a la chica.

Mientras esta última masajeaba sus muñecas, el hombre, sintiéndose incómodo y arrepentido, intentó aliviar la tensión provocándola un poco.

"¿Quieres que te lleve cargando hasta tu coche?". "No, gracias", respondió ella sin siquiera levantar la mirada, pues conocía su reputación como playboy. Nunca le daría el gusto de prestarle su atención.

Él, sin embargo, no tenía intenciones de cortejarla. Reconocía que era una mujer deslumbrante, por supuesto, pero en su corazón Luna era mucho más hermosa. Además, estaba seguro de que esta última no tomaría bien que coqueteara con sus amigas.

Una vez que se recuperó, la chica volteó a ver a Felix con frialdad. "Cuando pueda, pregúntele a su CEO si no volvió a casa en toda la noche después de emborracharse hace cinco años".

Una mirada de asombro cruzó el rostro del asistente, quien se quedó sin palabras ante lo que dijo la mujer.

La muchacha permitió que Mike la llevara a casa poco después.

Durante todo el viaje sintió un escalofrío en los huesos. Al notar su malestar, él le ofreció varias veces su chaqueta para que se abrigara, pero ella se negó.

El auto finalmente llegó a un edificio de apartamentos. La joven abrió la puerta y bajó del coche.

No obstante, antes de que pudiera llegar muy lejos, Mike la llamó. "¿Tasha?". "¿Sí?", replicó ella mirándolo impasible.