Capítulo 2 La mujer más hermosa

Esperé toda la mañana y no volví a ver aquella hermosa joven, por la tarde llego nuevamente aquel hombre que estaba justamente cuando desperté acompañado de otro.

– Arturo el es tu médico tratante yo soy un enfermero me encargaré de ser su interlocutor el Doctor no habla francés.

Extrañamente aquel hombre me seguía confundiendo con mi amigo en algo si tenía razón no podía entender nada de lo que decía el Doctor.

– Dice que es tu médico tratante además que te ha visto progresar desde que llegaste, cuando te recogieron del mar llegaste en muy mal estado, él dice que eres un milagro – me explicó el enfermero.

Luego el doctor habló en privado con él y se marchó dejándome con el enfermero.

Arturo debes tomar está pastilla antes de comer tu primera comida de lo contrario te dolerá mucho el estómago.

Entregando en mis manos una cápsula y un vaso con agua yo reí a carcajada aquel hombre no tenía ni idea que mis secuestradores me daban de beber agua contaminada con petróleo, de comer heces de camello mezcladas con heno y leche de cabra descompuesta, me miró con mucha tristeza y exclamó:

– Tranquilo Arturo mañana te examinará un psiquiatra.

Sin duda alguna creyó que yo estaba loco, luego se marchó y regresó con un recipiente que contenía algo que olía muy bien y me dijo:

– Esta taza de sopa de garbanzos con vegetales y pollo te ayudaran a sentirte mejor, pruebala esta

Intente tomar la sopa acostado y el enfermero me dijo:

– ¡Arturo por favor! Trata de sentarte en tu cama yo te puedo ayudar.

Colocó en mis piernas una mesita de plástico que se abría e introdujo la cuchara en la sopa y luego en mi boca, aquella sensación caliente me recordó nuevamente a mi madre.

– ¡Dominic! ¡Dominic! Es la hora de comer.

En mi aldea realizabamos tazas de comer sopa con los frutos de una planta que crece en la sábana.

Sin darme cuenta me termine la sopa, el enfermero sonrío de alegría y exclamó: – ¡Ya vengo espera aquí! – regresó de inmediato.

En sus manos trajo un vaso de cristal hasta arriba de líquido nuevo para mi así que recordé lo que me decía mi amigo de viaje.

– "Del otro lado del Mediterráneo hay cosas que nunca has visto y probado"

Sujetándonos para no caer al mar en medio de una tormenta que amenazaba con hundir nuestra balsa de mentira.

De pronto una lágrima salió de mi ojo derecho de forma involuntaria y mi enfermero me trajo de vuelta a mi tiempo y espacio.

– ¡Arturo! ¡Arturo tranquilo que ahora estás a salvo! – me dijo aquel hombre como si leer mis pensamientos pudiese.

Llegó la tarde y la joven de cabello dorado no regresaba pero volvió nuevamente aquel hombre con comida entonces pensé ¿cuantas veces come esta gente?

Ahora lo intente yo mismo tome con mis manos aquel gran trozo de carne luego lo introduje en mi boca mas una cuchara de granos y un trozo de pan sin aún haber masticado la carne pero solo conseguí atorar me y mi enfermero intervino.

– ¡Pero Arturo! Que haces, ¿a caso te quieres ahogar? Escupe todo eso ¡vamos!

– Y acercó a mi el cesto de la basura.

Yo hice algo que pensé que no haría jamás escupir mi comida en ese momento comprendí la verdadera fuerza de los estímulos ambientales, hace unos meses comería hasta el vómito de alguien ahora había tanta comida que yo la escupía aquel hombre terminó dándome la comida con mucha tranquilidad y yo que solo pensaban en comer, realizaba un gran esfuerzo a mi cerebro que fuese poco a poco. para decirle

Cuando me capturaron nos lanzaban la comida junto con los animales y teníamos que luchar con los cerdos por comer algo entre sus heces y sus grandes bocas, como nuestras manos se hallaban atadas en nuestras espaldas debíamos comer como si fuésemos uno más de ellos.

Uno de nuestros captores decía:

– "Deben competir por la comida no podemos alimentarlos a todos"

Llegó la noche y para ser una isla sentía mucho frío por lo que me arrope con una manta roja que estaba en mi cama una hora después llegó la hermosa chica de cabellos dorados en compañía de otra enfermera y me dijo:

Arturo nos vemos mañana me encanta verte mejor ella te dará de comer

– Sus ojos me miraban con tanta dulzura que sin darme cuenta ya no estaba pensando en comida. Creo que ese fue el mejor día de mi vida o de mi nueva vida luego de comer me recosté de lado y cerré mis ojos para dormir.

Durante la noche desperté muchas veces con una pesadilla recurrente en la cual me encontraba en un bosque solo y desprotegido sin saber que hacer caminé hacia adelante por lo que pude divisar a lo lejos una silueta entre la maleza cuando me acerqué a esta reconocí a Arturo corrí a él como un niño, el se hallaba muy serio yo me sentí muy extrañado le pregunté porque me miraba de esa manera el muy molesto me advirtió que por nada del mundo contase a nadie la verdad sobre mi nombre o algo muy malo me ocurriría yo me quedé en silencio por unos segundos de pronto una anaconda apareció de la nada y se trago a Arturo.

Luego de intentar ayudarlo sin éxito caminé y caminé sin darme cuenta estába de nuevo en España dónde sin importar la advertencia de Arturo le conté la verdad a la policía estos me arrestaron inmediatamente me lanzaron de nuevo al océano dónde fui recapturado por mis captores desperté muy asustado y apenas me quedaba dormido soñaba lo mismo.

En mi tribu es muy común hablar con los muertos por lo que algo me decía que Arturo había muerto y hablaba a través de los sueños ¡espero que Arturo este vivo! es el gran hermano que me ha dado la vida no lo quiero perder también.

Llegó la mañana y con ella una hermosa visita, la hermosa joven de cabellos dorados me trajo el desayuno junto con una enfermera sin embargo no se quedó mucho tiempo.

– Arturo como amaneces Mariza te dará la comida por favor te comes todo – dijo marchándose mientras sonreía.

En ese momento yo la llame

– ¡Oye! ¿Cómo te llamas?

– Me estás preguntando mi nombre que bueno ya tu voz se escucha mucho mejor. respondió un poco extrañada. –

– ¡Si! – contesté rápidamente.

– Me llamo Aisha luego vuelvo voy a atender a otros paciente – y se marchó. Ese era el nombre más bello que había escuchado en mi vida.

            
            

COPYRIGHT(©) 2022