Capítulo 3 II

- Yo soy Oliver- Dice el joven a su lado, y Elyan sonríe porque todo en él se le hace demasiado adorable- Tengo diecinueve años- Su cabello es castaño y sus mejillas tienen un sonrojo dulce, su piel es muy blanca y no se le ve bronceado o con manchas por el sol, sus ojos verdes y un piercing al lado derecho de su labio inferior- Yo voy a graduarme en unos días- El tono de orgullo es notable en su voz.

- Hey, felicidades por eso.

- Gracias, señor- El tono rosado de sus mejillas se intensifica- Yo vengo aquí en las tardes, siembro muchas plantas, flores y árboles frutales, recojo las frutas cuando están maduras y aplico abono y plaguicidas.

- ¿Y qué piensas hacer luego de graduarte?

- Me gustaría ir a la universidad, mi sueldo lo ahorro para eso, y el señor, su padre, me regaló hace poco un computador y un montón de libros para poder estudiar.

Elyan sonríe por ello, definitivamente su padre tenía un vinculo afectivo muy fuerte con esa finca y con las personas que allí habitaban.

- ¿Y qué piensas estudiar?

- Biología.

- Lo imaginé, realmente serás un biólogo increíble. Si necesitas algo solo debes decirme ¿De acuerdo?

Oliver asiente con la emoción marcada en cada uno de sus gestos.

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Su conversación es interrumpida por la misma señora que se había encontrado en el pasillo, Julia, esta vez llevaba en sus manos una bandeja con varios platos con comida. Es Lucian quien se pone de pie para ayudarla con aquella bandeja. Por un momento su vista recorre descaradamente el cuerpo del ojiverde, su torso está cubierto por una camisa blanca sin mangas y sus brazos lucen provocativamente fuertes. Regresa su vista a la mesa obligándose a no ser tan evidente observando al trabajador. Un plato es puesto frente a cada persona en la mesa, arroz blanco, un pedazo de carne y papas en puré es lo que hay en el plato. Todos comienzan a comer y Elyan sonríe por el ambiente familiar del lugar.

- Me llamo Azariel- Continúa el hombre junto a Oliver, el cual es el mayor de todos ellos- He trabajado aquí toda mi vida, y en el poco tiempo que conocí a su padre lo admiré profundamente, evitó que este lugar terminara perdiéndose. Invirtió mucho dinero y yo lo sé, por ello todos trabajamos para que esta sea una finca productiva. Yo me encargo del cuidado de las vacas, las ovejas y las cabras.

- ¿Tenemos muchos animales actualmente?

- No, luego de la pérdida total, el señor compró tres de cada especie para comenzar, así que eran doce en total con los caballos, una vaca tuvo hace poco sus crías y fueron dos. También hay catorce entre gallinas y gallos, cuatro conejos y los peces del lago

- Sé que últimamente ha habido una grave escasez de alimentos, y no ha habido atención médica debido a la muerte de mi padre y de que yo no estaba enterado de la existencia de esta propiedad. Pero apenas me ponga al corriente con ese tipo de cosas, lo solucionaré inmediatamente.

- Lo sé, gracias.

- Mi nombre es Khaled, el encargado de podar jardines, limpiar la fuente y talar árboles para leña y otras cosas. Trato de mantener sus jardines perfectos, señor Campbell- Esa fue... ¿Coquetería en su voz?- Tengo veintiséis años y estoy soltero.

Khaled recibe lo que parece ser una patada de Lucian bajo la mesa, lo que no genera mayor reacción en su actitud coqueta y espontánea. El chico es atractivo, su cabello es castaño, sus ojos color miel y una corta barba delinea su mandíbula, algunas pecas decoran su nariz y mejillas. Su cuerpo también está lleno de tatuajes, está claramente tonificado y un lunar adorna su cuello.

- Es un gusto conocerte, Khaled, gracias por esa información.

- Cuando quiera, jefe.

Y guiñó uno de sus ojos, ¡Él le dio un guiño! Esa acción lo toma por sorpresa y hace que el sonrojo se apodere de su rostro.

- ¡Khaled!- Reprocha Azariel hacia el hombre frente a él.

Khaled solo ríe un poco y levanta sus manos en un gesto de paz. Elyan bebe un poco de su vaso de agua antes de mirar a Lucian esperando que él comience a hablar, y trata con todas sus fuerzas que no sea muy notable su interés desbordado.

- Lucian Smith, como ya lo sabe. Trabajo en esta finca desde hace 8 años- Su voz es grave y profunda, del tipo de voz masculina que cautiva- Soy el encargado de supervisar que todas las tareas diarias se lleven a cabo, del buen comportamiento y cumplimiento de las reglas del trabajo. Soy también el encargado de la venta y compra de los productos que entran y salen de la finca, y de pasarle todos los reportes financieros al dueño, es decir, a usted. Pago de nómina, pago de servicios, pago de impuestos, etcétera.

- ¿Eso no lo hacía mi padre?

- Todo estaba a su nombre, pero los pagos los realizo siempre yo con el dinero que él disponía para cada cosa.

- Entiendo.

Cuanta confianza depositaba su padre en todas estas personas sin siquiera dudar.

- Y yo soy Emma- Habló en último la joven rubia- Limpio y organizo la cabaña, estando al pendiente de que todo esté en perfecto estado siempre. También realizo labores como cocinar, lavar.

- ¿Eres la única encargada de ello? Esta es una cabaña bastante grande.

- También está Julia, quien nos trajo el almuerzo. Ella cocina siempre y yo le ayudo cuando no tengo algo más por hacer.

- Tengo entendido que luego del fallecimiento de mi padre se presentaron varias renuncias. ¿De cuántas personas estamos hablando exactamente?

- Cuatro- Responde Dareck- Sus responsabilidades nos las hemos distribuido entre todos.

- Este tipo de cosas las hablaré con el señor Smith, que al parecer es el encargado del funcionamiento de todo. No quisiera pensar que hay demasiada carga laboral. Necesito conocer todos esos aspectos, y algo muy importante y que necesita pronta solución es ponerse al día con los salarios de todos. No deben preocuparse por eso, les pagaré cada segundo trabajado.

- Además de guapo un hombre muy justo.

- ¡Khaled!- Reprochan al unísono los demás en la mesa.

Elyan solo suelta una risa y niega por el descarado atrevimiento de su empleado.

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Luego de terminado el almuerzo, cada uno pasa al baño y luego cogen sus sombreros y guantes de la mesa.

- ¿Y no necesitas un guía que te muestre toda tu finca?

Elyan observa a Khaled que se encuentra acomodando un sombrero de color gris sobre su cabeza.

- ¿Y tú no tienes un jardín que podar, Jones?- Dice Lucian acercándose a la mesa para coger sus guantes- Si no tienes trabajo por hacer puedo ponerte una labor.

- Aguafiestas.

Khaled sale del comedor y Elyan muerde el interior de su mejilla observando a Lucian poniéndose su sombrero.

- ¿Siempre tiene ese nivel de atrevimiento?

- Se sorprendería si lo conociera. Ha llegado a coquetear con personas bastante influyentes.

- ¿Y eso sale siempre bien?

- Se ha llevado bofetadas, golpes, pero también noviazgos y otras relaciones casuales.

- Es divertido.

- Lo guiaré y luego nos reuniremos en el estudio para concretar lo que haga falta ¿Le parece?

El cambio tan abrupto de tema por parte de Lucian lo confunde un poco pero decide no comentar nada más.

- Me parece, iré a cepillarme los dientes, ponerme una gorra y nos vemos en la puerta.

- De acuerdo.

Elyan camina de manera apresurada a su habitación, le toma algunos minutos cepillar sus dientes, lavar sus manos, ponerse una gorra y unos lentes de sol para luego salir al encuentro con Lucian.

- ¿Quiere dar el recorrido en caballo o prefiere hacerlo a pie?

- A pie- Responde de manera apresurada.

- Nos llevara más tiempo.

- Eso no importa.

El recorrido comienza desde aquella reja de color negro, en el camino hasta la cabaña hay flores sembradas a ambos lados del camino, justo frente a la cabaña hay una fuente de agua con la escultura de unas alas en la parte superior. La parte productiva de la finca se extiende en cientos de hectáreas. Cultivos, siembras, zona forestal, zona ganadera, establos, galpón y un inmenso lago rodeado de plantas.

Mientras observan todo con atención, Lucian pone al tanto a Elyan acerca de todo lo que realizan en aquel amplio lugar.

- No imaginaba que fuera tan grande.

- Creo que se ve incluso más grande debido a la falta de animales y de personal.

- El abogado mencionó algo acerca de un centro de equitación ¿Sabes algo acerca de ello?

- Por supuesto, el señor planeaba hacer uno, adecuar alguna zona y comprar más caballos que serían para eso, además de contratar personal idóneo para una actividad así.

- ¿Qué más planes tenía?

- Permitir que algunos estudiantes pudieran venir a realizar sus prácticas escolares o universitarias y recreación, a conocer los animales y a sembrar plantas.

Elyan asiente y camina en silencio. Él siempre había mantenido buena comunicación con su padre, hablaban acerca de cualquier cosa, relacionadas con el trabajo o no.

¿Por qué nunca había mencionado esa finca?

¿Por qué siendo un proyecto tan importante para él jamás se lo comentó?

- ¿En qué piensa?

- ¿Eras muy cercano a mi padre?

- Un poco... sí.

- Está finca al parecer era muy importante para él, pero... nunca me lo dijo- Dice en un tono lleno de pesar y confusión.

- Él tenía muchos negocios, seguramente lo olvidó.

- ¿Y tu jefe anterior?- Cambia de tema- Es decir, el anterior dueño ¿Vive cerca?

- Algo así.

- Has trabajado mucho tiempo aquí, puedo saber ¿Por qué llegaron a tener una crisis tan fuerte?

- No sé mucho acerca de ello.

Elyan quiso replicarle, si había trabajado tanto años en ese lugar claramente debía tener una idea de lo que allí había pasado. Pero decidió no comentar ni preguntar nada más al respecto, quería tratar todo con cautela y de manera sutil, era su primer día allí y necesitaba causar una buena impresión.

- ¿Y todos los trabajadores viven cerca?

- Así es, algunos se van caminando, otros se van en caballo algunas veces. Emma y yo vivimos en la cabaña.

- ¿Viven juntos en la cabaña? ¿Solo los dos?

En el momento en el que la pregunta sale de su boca, se arrepiente de haberla hecho. No quiere sonar entrometido, o en el peor de los casos... celoso.

- Lo siento, no quise ser entrometido.

- No, no importa. Sí, vivimos los dos.

- ¿Y Julia?

- Vive en una cabaña muy cerca, tiene su esposo y dos hijos.

- Comprendo. Todos los demás tienen familia, seguramente.

- Dareck vive con su esposa. Oliver y Azariel son padre e hijo, así que viven juntos, y Khaled vive con su hijo.

- ¿Solo con su hijo? ¿No tiene mujer? ¿Pareja?

- La madre del niño se fue luego de dar a luz.

- Ow, entiendo, ¿Es muy pequeño aún?

- Un mes de nacido.

- ¡¿Un mes?! Es muy pequeño.

- Tiene una niñera.

- Y no les hemos pagado su sueldo, Dios.

- No te preocupes, entre todos le hemos ayudado.

- Comprendo. ¿Emma no tiene familia cerca?

- No, sus padres viven fuera del país y su hermano está en la universidad.

Decide no preguntar más, para evitar que Lucian piense mal de él y de sus preguntas. Pero le falta, le falta conocer al hombre que más le interesa de todo ese lugar. Y sobre todo quiere saber cuál es la relación entre Lucian y Emma.

- ¿Cuánto tiempo piensa quedarse?

- No lo sé con exactitud, quizás tenga que viajar ocasionalmente si algún negocio lo requiere. Pero quizás sean solo unas semanas.

- ¿Está entre sus opciones vender la finca?

- Probablemente, no sé qué tan bueno sea en este área tan... distinta a la que estoy acostumbrado a desenvolverme.

- No está solo, y no es tan difícil, se lo aseguro, cualquier cosa que no entienda puede preguntarme.

- Te lo agradezco.

Lucian le da una sonrisa que no dura más de dos segundos, es una sonrisa amable y cordial, enmarcada con dos hermosos hoyuelos en ambas mejillas. Y Elyan siente sus piernas temblar.