El Lobo Amado Por Aisha
img img El Lobo Amado Por Aisha img Capítulo 3 Dos
3
Capítulo 10 Nueve img
Capítulo 11 Diez img
Capítulo 12 Once img
Capítulo 13 Doce img
Capítulo 14 Trece img
Capítulo 15 Catorce img
Capítulo 16 Quince img
Capítulo 17 Dieciséis img
img
  /  1
img

Capítulo 3 Dos

NARRACIÓN POR ALAN---------------------------

Dejé a que ambos se expresaran como ellos estaban conversando. Sashiko tomaba todo en broma, pero Aisha se alteraba. Aún mantenían diferencias.

-Y bien, dejen de discutir chicos -traté de calmar la situación-. ¿Será posible qué podamos tener un momento más en calma?

Aisha colocó su mirada en mí.

-Sashiko me altera. Mira como me provoca -respondió Aisha.

Desvié mi mirada de Aisha y la puse sobre Sashiko, este mantenía una mirada serena, como si nada estuviese ocurriendo entre él y Aisha.

-Aisha, creo que estás tomando las palabras de Sashiko muy en serio -aparté mi mirada de Sashiko y volví a mirar a Aisha-. Mira -tomé un respiro-. Quizás ahora te preguntarás porqué Sashiko se expresa de esa manera, pero después lo entenderás.

-Y me dará la razón -escuché a Sashiko decir.

-Aisha, ten calma. Por favor -le pedí yo a ella.

Aisha desvío su mirada de mí, eso quería decir que estaba en desacuerdo con nosotros. Nuestra primera cita, y mira en lo que nos encontramos. Su amigo Sashiko vino a alterar la paciencia de Aisha. Desvié mi mirada y atención de Aisha para colocarla sobre Sashiko.

-Hey, amigo. Vamos a cambiar de tema, por favor. No quiero ver a Aisha alterada por nada. Sé que no lo sabes, pero ya Aisha aceptó ser mi novia y esta era nuestra primera cita juntos -le terminé diciendo para que fuera más suave.

-Ah, ya aceptó Aisha. Eso me gusta -sonrió él-. Alan, yo espero el día en que Aisha ya no se moleste por esos temas, y créeme que lo estaré viendo muy pronto. ¿Verdad Alan?

Vacilé por breves segundos para responder.

-Eso puede depende de las decisiones de ella -di una respuesta clara que no recaía sobre mí totalmente.

-Bien, Alan. Pero de todos modos, podemos pasarla bien. Me parece que nada va a interrumpir entre nosostros. Si les molesta mi presencia sólo tienen que decírmelo -dijo Sashiko.

Quedamos los tres juntos. Ni Ausja estaba al tanto de Sashiko en la manada.

###

Días después, Bryan, Roy y yo teníamos deseos de salir los tres. Nos movilizamos hacia un bar, en donde pedimos cerveza.

-¿Por qué no invitaste a Aisha? -preguntó Bryan sabiendo la verdad.

Respiré profundo.

-Esa respuesta la conoces Bryan -respondí.

-Oye, Bryan. Ese amigo tuyo Sashiko, no me cayó muy bien -me dijo Roy.

En seguida fijé mi mirada en Roy.

-¿Por qué no te cae bien? -le pregunté a Roy.

-¿No lo puedes deducir Alan? ¿No viste como me miraba? No me agrada en lo absoluto. Me estaba diciendo cosas raras y proponiéndome sexo -contestó quejándose.

Reí de inmediato. Sashiko era un chico gay.

-A él le gusta el sexo opuesto, sólo tienen que negarse e ignorar -fue la opinión que yo les di.

-¿Negarse Alan? ¡¿Voy a estar todo el tiempo en eso?! Él llegaba a la casa con intención de querer verte, pero cuando me veía apartado se me acercaba y ya sabes -Roy continuó molesto.

Tomé un respiro.

-Roy ya te lo dije. Paciencia con el chico. Él es buena persona y quiero que lo trates bien. Es amigo de Aisha -le dejé claro.

Enarcó una ceja.

-¿Tengo que...? -hizo una breve pausa-. Lo voy a hacer por ustedes. Pero tú trata de hablar con él, y que no me esté diciendo cosas raras.

-Roy, eres un hombre y puedes decírselo -le dejé dicho a él.

-Se lo he dicho, pero no me hace caso. Por eso es que quiero que seas tú quien hables con él, Alan. Y le digas que cambie conmigo -dijo Roy, traté de entenderlo.

-Está bien, Roy. Voy a hacerte caso, estaré conversando con él -acepté ayudarlo.

Seguimos platicando mientras tomábamos. Llegó un momento en que los chicos querían una compañía para saciar el deseo carnal. Yo por lo parte no tenía mente en eso.

-No veo a ninguna chica interesante en este lugar -dijo Bryan.

-¿Y si llamamos a algunas chicas? -sugirió en forma de pregunta Roy.

-Perfecto -respondió Bryan.

-¿Qué dices Alan? -Roy me preguntó.

-Verdaderamente no lo sé -esa fue la respuesta que yo di.

-¿Qué es lo que te pasa Alan? Estás como ido del mundo -se dirigió Bryan hacia mí-. ¡Despierta amigo!

Sonreí.

-Es posible que hoy sea de esos días en lo que uno sólo quiere tranquilidad -terminé diciendo.

-¿Tranquilidad Alan? Cuando hay deseo carnal, no hay tranquilidad y eso lo sabes -se expresó Bryan.

-Hoy no tengo deseos para estar con chicas -di un comentario que aunque a ellos no les gustara, ese era mi estado del ánimo.

-¡Anímate, Alan! Es más voy a llamar a unas cuantas para que nos acompañe -pronunció Bryan.

-No, Bryan -de inmediato me negué a su propuesta.

-Sí, Alan. ¡Vamos amigo! -insistió Bryan.

-No puedo llegar con alguien más en la casa. ¿Y si Aisha me ve con alguna? -quise protestar.

-¿No quieres que Aisha te vea con alguien más? ¿Ese es el miedo? Pero si tú has sido un hombre muy liberal, Alan -se detuvo Bryan a mirarme-. Veo que has cambiado, Alan -bajó el tono de su voz.

-Es precisamente eso. No quiero que nada dañe mi relación con Aisha -dejé dicho yo.

Cuando nos íbamos del bar, me topé con alguien. Sus ojos penetrantes se enfocaron en los míos muy fijamente. Intercambiamos miraras y sonrisas. Después de un tiempo no volví a hacer eso con nadie más. Esa omega que estaba al frente de mí, me había cautivado. Mostró su sonrisa ampliamente mientras me miraba

-Disculpa, es que anduve distraída. ¿Por casualidad te conozco?

-No, lo creo.

-Pareciera que sí. No sé... En algún lugar... Me llamo Anaya. ¿Y tú?

-Me llamo Alan.

-Para mí es un placer, el haberme topado contigo, Alan.

-¡Hey! ¡¿Están coqueteando?! -interfirió Bryan.

Anaya dejó de mirarme y puso su visión hacia la dirección de mi amigo

-¿Andas con Alan? -le preguntó ella a Bryan.

Bryan colocó su mirada sobre Anaya sonriente.

-Sí, hermosa. Ando con él -le respondió mi amigo.

Anaya volvió a poner su mirada sobre mí.

-Veo que se van, yo suelo venir a este lugar. Espero volver a verlos de nuevo -dejó dicho ella.

Le sonreí ampliamente.

-Muy bien, hasta luego Anaya -me despedí de ella.

-Nos vemos pronto, Alan -eso fue lo último que ella había dicho.

Emprendí mis pasos con la finalidad de abandonar el bar. Una vez afuera Bryan comenzó a reírse, me imaginé porqué lo hacía.

-Vaya, Alan ya tiene una nueva pretendiente -canturreó Bryan emocionado.

-Uy, sí -escuché a Roy decir.

-Les voy a pedir el favor de que no comenten esto -pronuncié mientras caminaba.

Procedimos a montarnos en el auto, y seguimos nuestra ruta hasta mi casa. La cual yo compartía con mis amigos y Anastasia. Vi a mi hermana sentada mirando TV. Me acerqué a ella, y me dio una ojeada, luego volvió a ver la TV.

-Pensé que no iban a venir esta noche -pronunció Anastasia mirando la TV.

-¡Vinimos Anastasia! -vociferó Bryan.

Coloqué la mirada sobre Bryan que venía hacia nosotros y yo procedí a tomar asiento. Anastasia elevó el control remoto y apagó la TV.

-Bien. ¿Por qué no van a dormir? En especial a ti Bryan yo no te esperaba -se expresó Anastasia.

-Ya me ves amorcito -se colocó Bryan al lado de Anastasia-. ¿No me vas a dar un beso de buenas noches?

El silencio se apoderó de nosotros hasta que Anastasia decidió hablar.

-No me moleste Bryan y vete a dormir. Hueles mucho a alcohol -Anastasia le dijo a Bryan.

-Piendo irme contigo. Acompáñame amorcito, querido. Yo seré tu amante bandido hasta que encuentres a tu mate -Bryan se mostró interesado.

-Lárgate de mi vista. No me interesa en lo absoluto tus pretensiones que no sean amistosas -contestó Anastasia.

Ambos estuvieron discutiendo de lo mismo. Llegó un momento en que me agobié y rodé los ojos. Tomé un respiro y decidí que era mejor que yo me fuera a acostar.

-Los voy a dejar a ustedes solos -pronuncié mientras yo me iba movilizando.

-¿Te vas a dormir Alan? Me parece muy temprano -escuché la voz de Bryan.

Seguí mis pasos llegando a mi habitación. Procedí a dormir.

Días después me iba movilizando para llegar hasta mi lugar de trabajo. Logré saludar a mis compañeros de trabajo, y finalmente llegué hasta mi oficina. Tomé asiento y dejé el móvil a un lado. Prendí la computadora, y observaba la foto de pantalla que yo tenía en el móvil.

-Wow, es increíble -murmuré.

Realmente, yo no pensaba que Aisha iba aceptar ser mi novio. Por los problemas que tuve en el pasado. Pero yo decidí ser sincero, y ella llegó a conocer todo. E inclusive le decía lo que me ocurría en la actualidad, no quería que ella y yo tuviéramos problemas futuros. Lo que sí era cierto, era la ruptura definitiva de mi aventura con la Luna Thalia, que aún andaba detrás de mí. Lo que menos yo quería era problemas, y más porque mi cuñada Ansley, estaba de novia con Abel hijo de Thalia y el Alfa. Por lo tanto, mi cuñada sería la próxima Luna de la manada. Decidimos mantener el silencio y no hablar sobre mi a Abel, no vaya a ser un obstáculo en la relación entre mi cuñada y Abel. De pronto alguien había entrado en mi oficina, aparté mi visión de ls computadora y la puse sobre aquella figura que veía ante mí. Era Leslie, una compañera de trabajo y amiga mía. La miré a ella y pensé que era momento de que ella conociera a Aisha.

-¡Alan! ¡Llegaste! -exclamó ella emocionada mientras se acercaba hacia mí-. Te tengo una buena noticia -dijo ella cuando había tomado asiento.

-Hola Leslie -pronuncié sereno.

-Voy a trabajar aquí contigo. Hubieron cambios, y lo sabes. La persona que iba estar contigo en esta oficina, rechazó trabajar contigo, y pues yo me postulé para estar contigo -se expresó ella y sonrió luego.

Sus palabras me habían respondido un poco. No esperé escuchar eso. Supe de los cambios en la empresa, pero no conocía ese detalle. Pero me alegró ver a mi amiga trabajar conmigo desde ese día.

-Me has dado una muy buena noticia -dije yo agradecido.

-Así es. ¿Y te gustaría saber quién fue que rechazó trabajar contigo?

-No me interesa.

-¿De verdad Alan?

-En lo absoluto Leslie.

-Bien, Alan. Pero cuando quieres saber sólo tienes que preguntarme.

-Está bien, Leslie. Me gustaría poder conversar algo contigo muy serio Leslie. Creo que es suficiente y que tú debiera de conocer a Aisha.

-Aisha. Por supuesto, Alan. ¿Cuándo estaré compartiendo con ustedes?

-Posiblemente este fin de semana. ¿Puedes?

-Sí, puedo.

El trabajo entre ambos no iba a ser de inmediato, ella me había explicado. Minutos después Leslie se había retirado de la oficina y me dejó solo. De inmediato me puse a trabajar. Finalmente había llegado la conclusión del día laboral, y me movilicé para salir de la empresa. Justamente cuando yo estaba saliendo de la empresa, me topé con alguien que no me lo esperaba. Logré ver a Anaya, y me sonreía ampliamente. Le envié una sonrisa para no ser mal educado. Aunque obviamente yo no ignoraba de que ella quería algo conmigo. Seguí mis pasos y la veía desplazarse e incluso venía hasta mi dirección. Me detuve en un instante y la dejé acercarse hacia mí.

-Vaya, Alan. Es un placer poder verte. Te había dicho de que nos conocíamos de algún lugar y mira en sus lugar. Yo trabajo en esa empresa. Me imagino que tú tambien -se expresó ella cuando se había detenido.

-Wow, es cierto. No me esperaba poder verte Anaya -le dije yo.

-¿Cuánto tienes trabajando en esta empresa? -preguntó ella.

-Tengo un tiempo no muy largo. Llevo cinco años trabajando -le respondí yo.

-Oh, perfecto. Yo llevo dos años -me dijo ella.

-Bien, Anaya. ¿Se puede saber en dónde vives?

-Muy cerca de este lugar. ¿Y tú?

-Un poco retirado.

            
            

COPYRIGHT(©) 2022