El Lobo Amado Por Aisha
img img El Lobo Amado Por Aisha img Capítulo 9 Ocho
9
Capítulo 10 Nueve img
Capítulo 11 Diez img
Capítulo 12 Once img
Capítulo 13 Doce img
Capítulo 14 Trece img
Capítulo 15 Catorce img
Capítulo 16 Quince img
Capítulo 17 Dieciséis img
img
  /  1
img

Capítulo 9 Ocho

NARRACIÓN POR ALAN---------------------------------------------------

Estaba sentado en la cama de mi habitación, cuando escuché el sonido de una llamada en mi móvil. Deslicé mi mano, y mi cabeza para tomar el móvil. Logré ver en la pantalla que era una llamada de video por Whatsapp, y era precisamente de Sashiko. Decidí tomar la llamada, el nunca me había llamado por video. Deslicé el dedo, y las ventanas se abrieron. Veía a Sashiko en la pantalla del móvil.

-Sashiko. ¿Qué onda? ¿Y tú llamándome por video? ¿Algo importante?

-Mírame idiota, estoy aquí en mi casa e hice una pequeña fiesta. Uno de mis amigos está enamorando a Aisha -se echó a reír luego.

Entendí el chiste, se estaba burlando de mí.

-Sashiko no bromes conmigo de esa manera, es algo muy serio, y puedo convertirme en un lobo feroz.

-Ah, que miedo me causan tus palabras. Señor, Alan. Dime pequeña sabandija. ¿Vas a venir o no?

Lo pensé por un instante. La idea no estaba mal y yo estaba por irme a dormir tranquilamente.

-Bueno, Sashiko. Tenías que habérmelo dicho con anterioridad. Estoy casi yendo a dormir.

-¡No quiero excusas Alan! ¡Vienes sí o sí! Te voy a mandar a buscar, si es preciso.

-No es necesario Sashiko. Está bien, voy a ir

Sólo porque sé que tú no me dejarás en paz esta noche.

-Muy bien, Alan. Eso es lo que yo quería escuchar. Pero si quieres, puedo mandar a alguien por ti. ¿Qué me dirás tú?

-Está bien. Manda a alguien por mí.

-Muéve tu trasero y alístate. Nos vemos más tarde.

La llamada fue finalizada. Dejé el móvil a un lado, y me desplacé para colocarme ropa y unos calzados. Salí de mi habitación listo, y llegué hasta la habitación de Anastasia para informarle de que yo no estaría en casa, y después llegué hasta donde Bryan y luego hasta donde Roy. Logré llegar hasta la sala de estar en espera de que me pasaran a buscar. De pronto vi a Bryan, que había saltado desde las escaleras hasta el piso.

-¡Alan! ¡No puedes dejarme! -me reclamó él.

Caminaba rápido hacia donde mí.

-Bryan, la fiesta no es mía -le dejé dicho a él.

-Sé que no es tuya, pero puedes incluirme -siguió insistiendo.

-No, Bryan. Al menos que te quieras acostar con mi amigo -le dije la verdad.

De inmediato cambió el semblante de su cara.

-No, Alan. Eso no.

A mi amigo le estuve explicando algunas cosas para que entendiera que él se podría encontrar con cosas desagradables para él en el camino. Por fin alguien había venido por mí junto con Ansley, y me fui con ellos de inmediato. Llegamos hasta la fiesta de Sashiko en su apartamento, este estaba abrazando a un tipo, al verme se apartó del tipo y llegó hasta mí.

-No tenías porqué dejar a tu acompañante solo -fue lo que le dije a él cuando estuvo casi cerca de mí.

-¿Y dejarte solo a que unos de mis amigos te llegaran a manosear? ¿Eso querías Alan? -me hizo dos preguntas él.

Se detuvo finalmente, y nos miramos sin volver a decir mas nada.

-¿Dónde está Aisha? -preferí preguntar por mi novia que responder a sus dos preguntas.

-Aisha está en la otra sala. Voy a llevarte. Sígueme -respondió él y se giró.

Lo seguí caminando hasta llegar hacia dónde estaba Aisha. La pude ver junto a Ansley, seguramente sabía de que yo estaba aquí.

-Hola, Aisha -le dije sentándome al lado de ella.

-Hola, Alan -me contestó ella.

-Bien, ya que estamos aquí. Quisiera que me ayudarán en algo -habló Sashiko mirándome a mí y a Aisha-. Quiero que me puedan ayudar en algo... -sonrió él-. Vengan conmigo, Aisha y Alan. Por favor -nos pidió.

Sashiko se volteó con la finalidad de irse de la sala. Entonces Aisha, y yo nos giramos directamente hacia él. Seguimos a Sashiko, y nos llevó hacia un cuarto, que tenía todo cubierto.

-Miren, ustedes -se detuvo Sashiko, e iba girándose hacia mí lentamente-. Quiero que puedan destapar todo esto, lo antes posible, vengo dentro de un rato y háganme el favor.

Sashiko emprendió sus pasos rápidamente, y se alejó de nosotros. Aisha fue la primera en caminar hacia una de las cosas tapadas, y nos llevamos una sorpresa. Luego Aisha siguió con las demás. Nuestro amigo había preparado todo.

-No lo puedo creer. Definitivamente que Sashiko supo muy bien lo que hizo. Hasta no los escribió -pronuncié yo después de haber leído y visto todo.

-Creo que Alan, no podemos protestar. Definitivamente que no. Será quedarnos aquí hasta que Sashiko quiera -comentó Aisha tomando todo con tranquilidad.

-Se va a enojar él, cuando veo que no ocurrió lo que él quería que ocurriera -dije yo mirando a Aisha.

-Tomemos de lo que hay aquí -Aisha de movilizó hacia donde había un refrigerador y tomó una lata de cerveza.

No tuvimos de otra que acomodarnos en unos de muebles, y tomar cerveza allí. Ya que a Sashiko le dio la gana de dejarnos solos para que por fin llegáramos a acostarnos. También él había dejado comida encima de la mesa.

-Aisha, sabes que no tengo ningún tipo de problemas, si tú quisieras estar conmigo en la cama -le di a entender a ella.

-No, no quiero -esa fue la respuesta que ella me dio a mí.

Tomé un respiro profundo, obviamente que yo no me iba a enojar o la iba a obligar.

-¿Segura que no quieres sentir mis manos sobre tu piel? -pregunté yo.

-Alan. Ya te lo dije. No quiero que te pongas como Sashiko -se expresó ella como quejándose.

Sentí como que sus palabras fueron reclamos.

-Quiero poder tocarte... -me detuve porque iba a decir algo que para ella iba a ser indebido. Tomé un respiro para continuar-. Estoy aquí, si quieres o cuando quieras. ¿Me entiendes?

-Sí, Alan. Eso lo sé. No te preocupes por nada. Mejor vamos a enfocarnos en la deliciosa comida que está en aquella mesa -aludió ella.

-Me estás cambiando el tema Aisha -reclamé de inmediato.

-Te estoy cambiando el tema porque Sahiko y ni tú van a decidir cuando es que lo vamos a hacer -determinó ella dejándome sorprendido.

-¿En serio Aisha? -pausé por breves segundos-. Por ser la primera vez, te lo dejaré a ti. Pero después... Veremos.

-¿Es una amenaza Alan? -cuestionó ella.

-No es una amenaza Aisha. Sólo que después vas a cambiar de idea -respondí.

Tomamos mucho alcohol esa noche, tanto alcohol que al siguiente día despertamos porque Sahiko había vociferado, dejando descubierto algo que hicimos y que no recordamos.

-¡Despierten! ¡Aisha! ¡Alan! -vociferó Sashiko.

Iba abriendo los ojos, y los estrujé. Miré a Sashiko, y después a Aisha.

-¡Oh! ¡Pero! ¡¿Estamos desnudos?! -pude ver debajo de las sábanas que incluso Aisha estaba desnuda, yo estaba alarmado, no me acordaba de nada, volví a mirar a Sashiko que me miraba riendo-. Sashiko, te juro que no recuerdo lo que hicimos.

-Eso estoy viendo -él emprendió sus pasos hacia Aisha.

Sabía que la iba movilizar, pero antes yo tenía que detenerlo.

-Sashiko detente, déjame levantarme -pronuncié, me iba movilizando rápido y desnudo busqué mi ropa por la habitación.

-¡Santo cielos Alan! ¡No te muevas así delante de mí! -protestó Sashiko.

No le hice caso, y continúe buscando las demás piezas de mi ropa, y de mis calzados que los llegué a ver. Rápido me dirigí hacia el baño, tomé una ducha y me lavé los dientes. Después me coloqué la ropa y los calzados. Salí del baño mirando a Sashiko precisamente.

-Vaya, el principeso es bien dotado -comentó Sashiko y entendí perfectamente porqué lo había dicho.

-Sashiko. Lo siento por lo de hace hace rato -pedí disculpas delante de él.

-Descuida Alan, a cualquiera le pudiera pasar pero lo más importante es que mi plan funcionó -mencionó Sashiko algunas palabras.

-De por cierto, Sashiko... -quise reclamar pero él no me dejó continuar.

-¡Silencio! ¡Ninguno van a decir nada contra mí al respecto! Por lo menos, por ahora -interfirió él no queriendo reclamos en el momento.

-Muy bien, Sashiko. Como tú digas -le dejé dicho a él.

Salí de la habitación llegando hacia una de las salas en la cual vi a Ansley estirada en unos de los muebles. Tenía los ojos cerrados. No sabía si llamarla o dejarla tranquila. Decidí quedarme en silencio y tomar asiento. Al parecer ella estaba durmiendo. Más tarde, Sashiko y Aisha se aparecieron en silencio en la sala.

-¡Ansley! -Sashiko la intentó despertar.

Ella se iba movilizando lentamente, y llegó a componerse en silencio. Tanto Sashiko como Aisha tomaron asiento.

-Bien, ¿nos vamos a quedar aquí como unos idiotas? -de inmediato protesté, yo quería irme de allí.

-¿Te quieres ir Alan? -preguntó Sashiko de mala gana.

Verdaderamente me sentía muy incómodo, por todo lo ocurrido. Evité mirar a Sashiko.

-Sashiko, quiero estar en mi casa. Cómo te lo hago entender amigo -rodé los ojos.

-Eres un muy mal amigo, Alan -se quejó él.

Obviamente lo ignoré.

-¿Cuándo nos vamos? -preguntó Ansley.

-Nos vamos de inmediato -se levantó Aisha, tomó a Ansley por el brazo y la agarró llevándosela con ella-. Camina, Ansley.

-Cuídense -fue lo que dijo Sashiko a ella.

Coloqué mi mirada sobre Sashiko, que se había movilizado, y cuando ellas se fueron, puso seguro a la puerta. Caminó hacia unos de los muebles lentamente logrando sentarse.

-Muy bien, Sashiko. ¿Cuándo piensas llevarme para mi casa?

-Si por mí fuera, yo no te llevará. Así que olvida de todo eso. ¿De acuerdo?

-Sashiko, no bromes conmigo. Por favor.

-Muy bien, Alan. ¿No quieres tomar café y comerte algo? No sé.

-Seguramente no te moverás de aquí hasta que no estés con el estómago lleno.

Pasé el tiempo que no pensé allí. Como en eso del medio día Sashiko me había llevado hacia mi casa. Abrí la puerta y logré ver un desastre echo por Bryan. Procedí a cerrar la puerta, y avancé hacia unas de las salas. Nadie estaba allí, entonces llegué hasta donde estaba Bryan.

-Aquí estoy de vuelta -fue lo que pude decir yo.

Bryan continuaba entretenimiento con su móvil.

-¿Y cómo te fue?

-Perfectamente bien.

-¿De verdad? ¿Tuviste relaciones? Hablas como si hubieras te hubieras acostado con alguien. Pero sé perfectamente que no.

Reí un poco.

-Hablas a partir desde el desconocimiento amigo.

-¿Cómo qué desconocimiento? No bromes conmigo Alan.

Tomé un respiro, pensé en decirle la verdad.

-Bryan. Mira que fue lo que sucedió. Sashiko anoche me encerró con Aisha en una habitación preparada. Nos dejó alcohol y comida. Cuando despertamos uno al lado del otro, estábamos desnudos completamente -le conté a él.

De inmediato se giró hacia mí lentamente, podría detallar en su rostro que estaba como incrédulo.

-¿Qué Sashiko hizo qué? -preguntó él.

-Lo que escuchaste.

Me miraba inmutado.

-¿Y me dices que no te diste cuenta cuándo te revolcaste con ella? ¿Eso ocurrió?

-Sí, Bryan.

-No lo puedo creer, Alan.

Bryan ese día no estaba para bromear. Se le notaba. Por un rato hablamos sobre el asunto. Minutos después decidí llegar hasta mi habitación para dormir un poco más. En el pasillo, me topé con Anastasia que me miraba seriamente.

-¿Por qué no viniste anoche? -me preguntó ella.

-No te imaginas lo que ha ocurrido Anastasia. Sashiko nos montó una trampa. A mí y a Aisha nos encerró en una habitación. Hoy esta mañana despertamos y no recordamos lo que hicimos anoche.

-Vaya, sorprendente -comentó sorprendida.

Detuve mis pasos frente a ella.

-Sashiko, no esperé que hiciera eso. Pero después él y yo vamos a tener una conversación sobre eso.

-Bueno, hermano. Si lo ves por otro lado, no fue algo malo.

-No es algo malo, eso lo sé. Pero él no tiene que venir y decidir en la vida de los demás. ¿Me entiendes Anastasia?

-Eso lo sé Anastasia. Pero no te pongas furioso con ese tipo.

-Muy bien, trataré hablemos luego. Quiero dormir un poco.

                         

COPYRIGHT(©) 2022