Capítulo 6 Significa que terminé contigo

"¡Y encima te haces la desentendida!", gritó Zoey, y se acercó furiosa y le dio una bofetada. "¡Maldita zorra! ¿Cómo te atreves a ir tras Shane?".

La cabeza de Cheryl se giró bruscamente por el golpe. Cheryl miró a Rodger, esperando que dijera algo, pero él solo dio un paso al frente y le lanzó una mirada fría. "Cheryl, pídele disculpas a Zoey", ordenó, sin el menor rastro de calidez en la voz.

A Cheryl se le hizo un nudo en la garganta. Aunque ya sabía que a él no le importaba, escucharlo así aún le dolía. "¿Pedir disculpas? ¿Por qué?".

Rodger bajó la voz, pero su tono fue igual de duro. "Dile que no volverás a molestarla. Prométele que te alejarás de Shane y que dejarás de ir tras lo que no te pertenece".

Cheryl lo miró fijamente durante un largo momento y luego soltó una risa corta y amarga. "De acuerdo. Ya no voy a ir tras lo que no es mío. Estoy harta de recoger las cosas que otros tiran y fingir que valen algo".

Recordó su adolescencia, cuando veía a Rodger tratar a Zoey como si fuera todo para él. Soñaba con ser amada así también y, como a Zoey no le interesaba, ella aprovechó su oportunidad en silencio.

Era evidente que Rodger sentía algo muy fuerte por Zoey, y el enamoramiento adolescente de Cheryl tampoco era algo que pudiera ocultar. El día de su graduación de la preparatoria, él finalmente se le confesó a Zoey, pero ella lo rechazó sin pensarlo dos veces, como si sus sentimientos no importaran en absoluto.

Esa noche, Rodger se emborrachó hasta perder la razón, y a Zoey ni siquiera le importó. Ella solo tenía ojos para Shane.

Cheryl se quedó a su lado, tratando de ayudarlo a superarlo. En ese entonces, Rodger juró que había terminado con Zoey y prometió tratarla como se merecía.

Y ella le creyó. Creyó cada palabra, porque, al fin y al cabo, solo era una chica de dieciocho años que quería ser amada.

Por desgracia, lo que no se dio cuenta fue que Rodger siempre había sido el perrito faldero de Zoey. Aunque ella lo apartara de una patada, bastaba una sola llamada para que él volviera corriendo.

Y no solo seguía a Zoey a todas partes, sino que también intentaba arrastrarla a ese lío.

Pero ella ya había tenido suficiente.

Zoey resopló y dijo: "¿Escuchaste eso, Rodger? ¡Todavía no entiende lo que hizo mal!".

El rostro de él se ensombreció y empujó a la chica con fuerza. "¡Te dije que te disculparas!".

Cheryl esbozó una sonrisita fría. "¿No lo hice ya? Si quieres seguir siendo el perrito faldero de ella, adelante".

Rodger se estremeció. Su corazón se hundió, pero lo cubrió con ira. "¿Qué quieres decir con eso, Cheryl?".

Cheryl lo miró directamente a los ojos. "Significa que terminé contigo. A partir de hoy, no quiero tener nada que ver contigo".

Se dio media vuelta y se marchó sin mirar atrás.

Rodger se quedó paralizado por un segundo. Luego, se rio amargamente, como si hubiera escuchado la cosa más ridícula del mundo. Su voz se volvió cruel mientras le gritaba: "¿Quién te crees que eres, Cheryl? No eres más que un juguete que recogí y embellecí. ¡Sin mí, no eres nadie!".

La mano de Cheryl se detuvo sobre el pomo de la puerta. Casi se rio.

Sí, había sido una estúpida. Pero Rodger era aún más patético.

Después de todo lo que había hecho por él durante todos esos años, ¿eso era todo lo que significaba para él? ¿Solo un juguete?

Se odió por tener un punto débil por un imbécil y tratarlo como si fuera algo valioso.

¿Y en serio para qué? Al igual que Rodger a los dieciocho años, la habían tirado como basura.

Rodger vio la pausa y pensó que se estaba arrepintiendo de sus palabras. Sonrió burlonamente. "¿Crees que llegaste a donde estás por mérito propio? Todo lo que tienes te lo di yo. Sin mí, no serías nada".

Zoey se cruzó de brazos y añadió con desprecio: "Rodger, de verdad no entiendo qué viste en ella. ¿Fue su aspecto? ¿Esa figura? Por favor, si no es más que una versión barata de su madre. Una amante, igual que ella".

Pero antes de que Zoey pudiera terminar, Cheryl se giró bruscamente y le dio una bofetada, con fuerza. "No te atrevas a hablar de mi madre", gruñó.

"¿Cheryl? ¿Estás loca?", gritó Rodger, corriendo hacia su lado, que se cubría la mejilla, en shock.

Los ojos de Zoey se abrieron de par en par con furia. "¿Me abofeteaste? ¿Quién te crees que eres, perra?".

Empujó a Rodger a un lado y levantó la mano para golpear a Cheryl, pero Cheryl la agarró de la muñeca en el aire.

Rodger, al ver eso, no lo pensó dos veces y empujó a Cheryl con fuerza.

Ella cayó hacia atrás, golpeándose contra la mesa del comedor. Los platos, vasos y botellas cayeron al suelo, haciéndose añicos por todas partes.

Trozos de cristal le arañaron la piel, pero ella no se inmutó. Sin pensarlo dos veces, agarró una botella y se la lanzó directamente.

...

Albano Russell encendió un cigarrillo y le dio a Shane una palmada juguetona en la espalda. "Así que, Shane, tu madre me contó que por fin vas a arreglar las cosas con la Familia Blake, ¿eh? Tú y Zoey se conocen desde siempre. Todo el mundo pensaba que ustedes dos acabarían juntos. ¿No crees que ya es hora?".

Ambos hombres eran altos y seguros de sí mismos, y llamaron la atención en el momento en que entraron en el Restaurante Glory.

Pero Shane y Albano no parecieron darse cuenta ni importarles. Simplemente siguieron al camarero directamente a un salón privado.

En cuanto Albano mencionó a la Familia Blake, la imagen del rostro sonrojado de Cheryl en la cama apareció en la mente de Shane. Sus dedos se crisparon ligeramente, como si aún sintieran la forma de su cintura.

Albano notó que se había distraído y agitó el humo lejos de su cara. "Oye, te estoy hablando. ¿Para cuándo la gran boda con Zoey?".

Shane apartó su brazo con indiferencia. "No habrá boda. Todo eso no fue más que una broma entre nuestras familias".

Justo entonces, un fuerte estruendo procedente de un salón privado cercano interrumpió, seguido de la voz furiosa de Rodger. "¡Cheryl!".

Shane miró rápidamente hacia allí, con un toque de curiosidad en los ojos. Albano también enarcó una ceja y dijo: "¿No era ese Rodger? ¿Y Cheryl no es su novia o algo así? Parece que ella realmente lo hizo enojar. ¡Vamos, veamos qué está pasando!".