Mientras ella se encuentra de vacaciones, el pasar de los días se vuelve un poco lento. Es por ello que, siendo que era un buen día en el cual el clima parecía ser fresco, ella decidió que era mejor el tener que dar una vuelta por el parque y el zoológico en lugar de quedarse en casa durante todo el día y aburriste de ello.
Cambiándose, preparo algunos emparedados para comer durante su salida al igual que un poco de jugo para acompañarlo. No tenía mucho que hacer de todas maneras, así que decidió que los emparedados debían de ser algo diferente a lo usual. Tomando algunas botonetas, manías y yogurt de fresa y otro de durazno, empezó a preparar los emparedados, por supuesto que también hizo algunos de jamón con lechuga, tomate y cebolla.
Quería hacer algo más pero prefirió dejarlo para otro día. Aunque lo que hizo no era nada inusual, le hizo sentir un poco emocionada el tener que salir a dar un pequeño paseo. Sus ropas eran un poco ligeras y sólo un suéter era lo que llevaba. El llevar tenis para salir fue la elección que tomo para su comodidad. Aunque no se mirara como tan bien algunas de las combinaciones que utilizo con su guardarropa, esto era como un respiro para ella de su vida diaria.
Guardando todo en una mochila, cargo la mochila y luego se dirigió de primero a pasar por el parque, pero no se tomaría el autobús para poder salir, sino que le apareció mejor el tener que caminar hasta llegar a su destino.
Mientras iba caminando, pudo ver a varios de sus vecinos, a quienes saludaba con una sonrisa mientras ellos le decían "¿Vas a pasear?" "Te ves muy animada el día de hoy" "Espero que puedas disfrutar del día" por supuesto que habían quienes decían "Lastima que no puedo acompañarte hoy" "Que te parece si vamos juntos" pero ello no les prestaba mucha importancia.
Conforme iba caminando, pudo notar que había quienes también estaban caminando en las calles, algunas personas se dirigían a sus trabajos, otros iban a estudiar o algunos iban a reunirse con alguien. Sin importar el motivo por el cual transitaran las calles, el ver que en instantes las calles parecían ser muy solitarias, en otros momentos están llegaban a ser muy animadas. Pero lo que no pudo ignorar fue que pudo encontrarse con algunas parejas durante su camino. Bueno, esto no le parecía ser nada del otro mundo, pero sólo podía pensar que sería algo maravilloso si ella pudiera salir con alguien en un día como este.
Conforme podía notar que había varias personas que pasaban a su lado, cada una mostraba algo muy diferente en su propia forma de ser, no todos iban expresando los mismos sentimientos o dificultades. Ella, al llegar al parque, decidió sentarse en una banca por un momento y contemplar la vista que tenía por un momento.
En el poco tiempo en que se encontraba ahí, pudo escuchar y ver la forma de ser de diferentes personas que pasaban por ahí. Algunas de ellas iban corriendo, otras iban despacio, algunos se tomaban un poco de su tiempo para sentarse o leer algo por un momento en ese lugar, mientras tanto, otras personas se encontraban hablando por teléfono.
Pero, lo que pudo notar en todo esto, era que el estar un pequeño momento en ese lugar fue suficiente como para ver a una que otra persona pasar. Después de eso, se dirigió al zoológico. Estando ahí, paso a ver a los animales e ir leyendo los letreros que tenían junto a ellos que daban una breve información de ellos, así como también disfrutaba de ver a los peces nadar y como las ardillas pasaban de un lado a otro.
Dirigiéndose al área recreativa, pudo notar como había algunas familias reunidas, no había muchas ya que era un día entre semana. Ella, mientras miraba los árboles y plantas que decoraban el lugar, se recostó en el tronco de un árbol y empezó a comer. El sonido de los carros pasando fuera aún se podía oír un poco, pero era un poco tranquilizante el estar ahí.
Conforme estaba comiendo, vio a una familia pasando el rato juntos. Aunque no podía siquiera saber que hacer además de estar ahí sentada en solitario, empezó a recordar una ocasión en la cual estuvieron en un zoológico también. En esa ocasión recordó que también estuvo de descanso y, mientras estaba en casa estudiando para unos exámenes, ya se encontraba completamente cansada y ya no podía seguir.
En ese momento, por más que tratara de estudiar, le era difícil el poder entenderlo o memorizarlo. Pero, mientras se recostaba en su mesa de estudio con un dolor de cabeza debido al estrés de los exámenes, el celular sonó de la nada, haciéndola saltar del susto. Ella, un poco irritada, tomo el teléfono y, mientras pensaba en que forma debería de pagar la persona que estuviera interrumpiéndola en ese momento, la furia que provenía de ella era tan inmensa que, tan sólo contestar, dijo – Aló – A lo que le respondieron – Aló, ¿Cómo estas...? – ella – c... c c cómo... ¿Cómo que "cómo estas"? no ves que estaba muy concentrada y ahora ya no sé ni en que pensar – él – ya, ya, ya, yaaaa... tranquilízate, no era mi intención el molestarte en un día muy ocupado, sólo quería saber si estaba libre para poder ir a dar una vuelta por ahí mientras tanto. Aprovechando que no es un muy mal día, considero que sería algo bueno que pudieras salir a dar una vuelta y refrescarte, sobre todo al escucharte tan mal en este momento – ella, llameando de la rabia – escúchame bien, ¡¿Cómo es eso que "Estoy tan mal"?! ¡¿Cómo puedes asegurarte que estoy mal si ni siquiera me has visto en estos últimos días?! – él – bueno, no es necesario ser un adivino para poder saber que estas mal en este momento. De seguro que debes de estar pasándola muy mal con tus exámenes, pero, como me habías contado de lo que estabas estudiando, logré conseguir algo que te puede ayudar con tus problemas en este momento – ella, escuchando esto, rápidamente, ya un poco más calmada, dijo – en serio – él – Sí, tengo algo que te puede ayudar a estudiar mejor de lo que lo has estado haciendo en este momento, peeero... ya que estas muy ocupada, creo que no será posible dártelo. Bueno, creo que será en otra ocasión – ella, sintiendo que esta podría ser una oportunidad única y que no podría dejarla ir, muy emocionada, dijo - ¡Espera! Espero, no cuelgues todavía. Si es algo como eso, no creo que sea una mala idea el poder juntarnos para poder ver algo como eso – él, tratando de contener sus risa, dejo escapar una pequeña risilla mientras decía – m mpff. Está bien, te esperaré en el zoológico. Adiós – ella – oye, no cuelg... – él corto la llamada – no puedo creer que colgara inmediatamente, además – un poco molesta – no fue para nada bueno el cómo me dejó así después de que escuche que se estaba riendo de mí – levantándose – bueno, eso no importa ahora, lo que debo de hacer será mejor cambiarme e ir al zoológico para que me pueda dar esto que me ayudará con mis exámenes – y empezó a cambiarse.
Mientras se cambiaba, parecía que era una clase de lucha, ella trataba de buscar una blusa que no se mirara tan fea, al igual que su falda combinara con esta. Mientras también trataba de hacer que no se mirara tan mal la ropa que iba a llevar puesta, seguía sintiendo que no era la correcta. El estar escogiendo su ropa le llevo un buen rato.
Ella, ya toda enojada y desesperada, dijo - ¡Ya basta con esto! ¿Por qué debo de buscar algo que me quede bien? Ya no me importa, me pondré lo primero que tenga en la mano y así me iré – y tomo una blusa negra y un pantalón gris. Tomo rápidamente sus tenis y una gorra rosa para luego irse dejando un desastre en su habitación.
Al salir de su casa, durante el camino hacia el zoológico, iba pensando – pero que rayos estará pensando en este momento ese idiota. No puedo siquiera concentrarme en mis estudios si me llama así de repente y me dice que hay algo que me ayudará con mis estudios para los exámenes, además... además – sintiéndose un poco frustrada, de pronto se detuvo y dijo – de verdad ¡¿Por qué debo de pasar por esto?! – mientras refunfuñaba. Después de esto, continuó caminando sin parar hasta llegar al zoológico.
Al estar frente a la entrada del zoológico, de pronto sintió un poco nerviosa y empezó a pensar – ahora que lo pienso mejor, tal vez no debí haberme vestido de esta forma, hubiera sido mejor el haber escogido una mejor ropa. Aunque sólo se trate de un encuentro casual, no debí de ser tan... no será mejor que regrese pronto a casa y luego, cuando esté mejor presentable, vuelva a encontrarme con él, sí... sí... sí eso haré, no creo que se enfade si me espera un poco más además, fue él el que me llamo y no fui yo quien dijo que deberíamos de encontrarnos aquí de la nada – mientras se excusaba así misma y daba una razón para poder salir de la situación en la que se encontraba. Pero, mientras daba la media vuelta para regresar, de pronto escucho una voz que le decía – Hola, veo que has venido –.
Ella, quedándose petrificada, pensaba – por favor, que no sea él... y si lo es, que no se acerque a mí – para luego sentir una mano que toca su hombro y la hace paralizar como una piedra mientras deja salir un sonido como "Ah" pero con un tono un poco agudo.
Ella, dándose la vuelta lentamente, lo mira para luego, con una sonrisa decirle – hola, e... este... veo que ya estás aquí – él, dejando salir su risa – ajajajajaja. No puedo creer que te hayas asustado de esa manera tan fácilmente. Además, de que estabas un poco tensa – quito su mano de su hombro y luego dijo – muy bien, creo que ya todo está listo, podemos irnos ahora – ella, haciendo un puchero, respondió – pero no era para que te rieras de mí, sabes – él – está bien, no te enojes conmigo – ella, alzando la voz continuó diciendo – además ¡Me dijiste que había algo que me querías mostrar – él, gentilmente – tienes razón, pero para poder hacerlo, primero entremos al zoológico – ella – estas seguro que no me estás tratando de engañar o algo por el estilo – él – te lo prometo – ella – está bien – y, mientras entraban, miraba a un lado como si estuviera esperando algo.
Conforme iban caminando y viendo los animales, ella empezó animarse poco a poco, sobre todo en los momentos en que el parecía ser un poco infantil cuando miraban algunos animales haciendo el ridículo y haciéndola reír. Conforme iban pasando por el lugar, de pronto la atmosfera había cambiado y ya parecía que estuvieran en mejores términos que al principio. Ella, mientras miraba a los monos y peces, le decía a él muy emocionada, mientras tiraba de su brazo – ¡mira! ¡Mira! ¡Mira!, ese de ahí está trepando y... y... y ese otro está colgando de su cola – él, que también le hacía sentir muy emocionado – tienes razón, pero mira los de ahí, parecen que están a punto de usar sus colas – y así se iban divirtiendo. Ver los coloridos peces de diferentes tamaños y en espera de poder ver otros tipos, a pesar de que no era un acuario como de los que había escuchado en la televisión en los cuales podían verlos a través del vidrió sino que sólo lo podían ver como si se tratase de una pequeña fuente y en el momento en que estos salten es que se dejaban ver, les parecía muy emocionante.
Una vez que terminaron de ver los animales, decidieron ir al área recreativa y sentarse cerca los árboles y usar uno de sus troncos como respaldos. Ella, que estaba muy animada en ese momento, de pronto sintió un poco de hambre. Pero, como no quería hacer que él se diera cuenta, estaba pensando en alguna excusa para poder irse por un momento o comprar algo para comer.
El estar pensando en una excusa, la hacía hacer una cara un poco graciosa para él. Entonces, abriendo la mochila que traía consigo, le dijo – ¿Qué te parece si comemos algo? – ella – ah... ah, gracias – y luego le dio unos emparedados. Ella, sintiendo que esto era algo bueno, sobre todo porque ya tenía un poco de hambre, empezó a comer. Él, quien con una sonrisa vio como era que ella disfrutaba de la comida que le había compartido, pensó – creo que te ves mejor cuando estás así que cuando tratas de ser más formal. Aunque, para ser sincero, también admiro el que trates de dar lo mejor de ti para mejorar en tu trabajo y el desempeño de tus labores, tanto en el trabajo como en el estudio... sólo espero que puedas estar más tranquila ahora como para poder pasar tus exámenes. No sé qué es lo que te hace sentir tan afligida en estos momentos, pero esto es lo mínimo que puedo hacer para ayudarte, espero que esto te pueda ayudar –.
Ella, al darse cuenta que él la miraba, dijo – este... ¿Hay algo malo conmigo? – él – no, sólo estaba pensando que ya es momento de que te ayude con lo que habíamos quedado – ella – lo que me habías.... Ah – reaccionando – es cierto, no vine aquí para poder quedarme a divertirme y pasar el rato nada más, sino que vine porque dijiste que tenías algo que me ayudará en los exámenes – él – así es – ella – entonces apurémonos y así puedo estar lista para mis exámenes – él – sí – y así terminaron el resto del día estudiando juntos hasta que llego el atardecer y ella regreso a casa.
Pero, por alguna razón, también se sentía un poco decepcionada por alguna razón hasta que él le dijo – por cierto... me gusto el poder verte vistiendo algo diferente a la ropa del trabajo – ella respondió felizmente "Mhm" para luego darse la vuelta e irse con una gran sonrisa.
Al terminar de comer, dijo – bueno, creo que ya es hora de regresar – tomo sus cosas y se dirigió de regreso a casa caminando mientras pensaba – creo que hoy no fue un mal día. Al parecer no es lo mismo que esa vez, pero pude relajarme un poco y pasar un buen momento. Sólo me gustaría que pudieras ver esta vista conmigo, pero no creo que te gustaría que yo no me lo pasara bien durante las salidas, además... – en voz baja – esta vez me gustaría poder invitarte a ti –.
Al regresar a casa, tomo una ducha y luego, sacando una hoja de la caja, leyó – hoy puede que hayas estado un poco frustrada con los problemas del día a día, pero sabes... en ocasiones es mejor tomar un pequeño respiro antes de poder continuar. El tomar las cosas con calma, el tratar de pensar nuevamente que es lo que necesitas hacer, el hacer algo diferente, el solamente distraerte y disfrutar un poco de la vida, te darán fuerzas para continuar. La receta nunca será así de simple, pero hay algo mucho más allá de lo que puedes esperarte, vamos, no existe ni una fórmula mágica, científica o algo inalcanzable que te diga lo que debas hacer o no, sólo ve en este sendero y busca lo que quieres hacer mientras lo disfrutas, descansa cuando sea necesario, trabaja cuando sea el momento, estudia y has todo conforme sea su tiempo. Pero, sin importar nada, trata de o perderte a ti misma. Siempre pediré por que puedas llega a salvo y que nunca te haga falta nada, y... que pesar de lo difícil que puede ser el vivir el día a día, siempre esperare a verte sonreír de nuevo – ella, volviendo a leerlo, empezó a pensar – no importa que tan idealistas fueras, en muchas ocasiones siempre me decías que debería de ir viendo hacía el futuro y que nunca olvidara lo que estaba pasando en este momento. Que entre la realidad podría llegar a comprender lo que debería de hacer, aunque esta fuera muy cruel... Pero... pero, pero no puedo siquiera poder ver todo lo que veías. Cada vez que me sentía de esta manera, un mensaje, una llamada o más de algo hacías para poder ayudarme, siempre era lo mismo una y otra vez... sin embargo, no puedo comprender como es que piensas, nunca logré comprender que eras lo que mirabas en los pequeños momentos en que tu mirada se quedaba perdida como si llevaran consigo un gran pesar pero, a la vez, una pequeña esperanza. Nunca logre ver que era lo que te motivaba ni que era lo que hacía que fueras lo fuiste. Pero, más que todo, me preguntaste un vez, mientras estábamos juntos, ¿Qué es lo que ves? En ese entonces no lo comprendí, lo único que pude responderte fue "una calle y muchas personas, además del cielo". Te reíste de mí y no me dijiste nada – dejo salir un pequeño suspiro de alivio y un poco de decepción, para luego decir – Ahhh, si tan sólo te hubiera escuchado en ese momento, si tan sólo no lo hubiera dejado pasar en el tiempo, quizás... el tiempo... bueno, fue muy corto al final pero me hubiera gustado que fuera mucho más largo – y guardo nuevamente el papelito y se dirigió a dormir mientras abrazaba con gentileza su almohada y un peluche.