Capítulo 6 6

E LLIOT

Miro mi reloj. Jameson y Tristan están aquí y bajaron con Christopher. Estoy terminando estos informes y luego nos vamos. Dirigir la división londinense de Miles Media, una de las compañías de medios más grandes del mundo, tiene sus pruebas y tribulaciones. Llego a ser el jefe, pero con eso viene un sentido de responsabilidad interminable.

Mi hermano Jameson es el director general de la empresa estadounidense y yo superviso el Reino Unido y Alemania. Dirigimos Francia juntos. Es un papel estresante, pero que disfruto inmensamente.

Han pasado años, ¿qué diablos están haciendo?

Hago clic en la cámara de seguridad para ver si están cerca; aparece un collage de imágenes en la pantalla de mi computadora. Miro a través de ellos para ver que están en el nivel uno, y estoy a punto de salir cuando algo brillante parpadea en la parte inferior izquierda de la pantalla y me llama la atención.

¿Qué es eso?

Hago clic para agrandar esa pantalla para una investigación más cercana.

Es una mujer que lleva una cola de caballo alta; lleva un vestido deportivo de lycra de color rojo brillante. . . . Es entallado y todo en uno y tiene una pequeña falda acampanada . . . ¿Eh?

Ella está de espaldas a la cámara y está parada frente a una fotocopiadora.

Estudio la pantalla para tratar de distinguir de dónde es la grabación. Parece que . . . una sala de fotocopias, tal vez. No puedo ubicarlo, ¿es una limpiadora o algo así? No, un limpiador no estaría fotocopiando.

Estoy confundido.

Subo el audio de esa cámara y escucho música; se escucha la voz de un hombre.

"Buenas noches, estás escuchando Disco con Dave".

La radio está sonando.

"Tengo su número esta noche, gente maravillosa. Prepárate para la fiesta con las mejores melodías disco de todos los tiempos", continúa su voz.

Suena una canción, es pegadiza y familiar, aunque no puedo ubicarla.

La mujer del vestido corto de lycra empieza a menear el trasero al ritmo de la música; da dos golpes hacia un lado y luego hacia el otro.

Mmm interesante.

Apoyándome en mi escritorio, presiono mi dedo índice a lo largo de mi sien mientras la veo pasar a "Ring My Bell".

Ella realmente está bailando mientras fotocopia y yo sonrío; mis ojos se posan en sus largas piernas, que son musculosas y bien formadas. Su cintura es pequeña y la curva de sus caderas se acentúa por la forma en que se pavonea de un lado a otro.

Mmm . . .

Paso el lado de mi dedo sobre mis labios y me siento, totalmente distraída por el culo caliente que golpea en el vestido rojo.

La forma en que rebota al ritmo es tan alegre. . . . Ella está bailando como si nadie estuviera mirando. Solo yo soy, y es muy . . .

Deja caer uno de sus papeles y se inclina con las piernas estiradas para recogerlo; Obtengo una vista completa de su culo apretado en sus diminutos pantalones cortos rojos de Lycra.

Mi polla se contrae, mis cejas se levantan con sorpresa y me siento hacia adelante en mi asiento, mi interés despertado oficialmente.

Ella gira sus caderas y una ola de excitación me recorre; Comienzo a escuchar mi pulso en mis oídos. La forma en que baila y se mueve es tan . . .

Jodidamente caliente.

Mi polla monta una tienda de campaña en mis pantalones e inhalo con fuerza. No puedo recordar la última vez que una mujer me excitó a solas con la vista.

Deja caer otro archivo y se mueve hacia abajo para recogerlo, y una vez más tengo una vista completa de sus musculosas piernas y su trasero. Inhalo con fuerza mientras ella se pone de pie, mi cuerpo imagina cómo se sentiría ella y me reacomodo en mis pantalones.

Delicioso.

Se vuelve hacia la cámara y por primera vez veo su rostro; Salto de mi computadora.

¿Qué carajo?

Es Kathryn. . .

"¿Estás listo?" La voz de Tristan suena detrás de mí.

Inmediatamente hago clic fuera de la grabación y barajo los papeles en mi escritorio, completamente nervioso.

-Te veré en el vestíbulo -tartamudeo. "Solo tengo que ocuparme de algo".

"Está bien, no tardes mucho, ¿eh?" Jameson dice.

Los escucho irse en el elevador y miro la pantalla de mi computadora en estado de shock.

No.

no podría ser

Kathryn no está buena, nunca ha estado buena. Me habría dado cuenta si ella fuera tan jodidamente buena.

Mi polla está latiendo, exigiendo atención, y con aire de culpabilidad miro hacia la puerta para asegurarme de que mis hermanos se han ido.

Solo otra mirada rápida . . . No dolería.

Probablemente ni siquiera era ella.

Abro la pantalla de la computadora de nuevo y veo el vestido rojo saltando al ritmo.

Es ella.

Está mirando a la cámara ahora y mis ojos recorren la forma en que sus pechos rebotan. La curva en su cuello, la cincha en su cintura. La forma en que su cola de caballo alta se mueve mientras baila.

Tengo una visión de envolver esa cola de caballo alrededor de mi mano mientras la tiro hacia abajo para chuparme.

Mi polla se aprieta. Me estremezco con una sacudida de disgusto de mi cabeza.

Mierda . . .

Tengo que echar un polvo.

Empaco mi escritorio a toda prisa: quiero alejarme de mi computadora lo más rápido posible. Lo cierro y con una última mirada alrededor de mi oficina, me dirijo al elevador, presiono el botón con fuerza y exhalo profundamente.

Estoy nervioso: es raro que una mujer ya me dé una reacción física. Últimamente he estado luchando con problemas de atracción, nadie parece estar haciéndolo por mí, no importa cuán hermosos sean, y no tengo idea de por qué. Tal vez sea el hecho de que he salido con algunas de las mujeres más bellas y extraordinarias del mundo y, sin embargo, todavía. No he encontrado lo que busco. Tal vez mis hermanos tengan razón acerca de que mis estándares son irrealmente altos.

Pero, una erección dura como una roca de una empleada que desprecio, Kathryn Landon .

Simplemente jodidamente no.

Salgo del ascensor y entro en el vestíbulo, y veo a Jameson, Tristan y Christopher esperándome en la acera. Jay y Christopher están mirando algo en el teléfono de Jameson, enfrascados en una conversación.

"¿Nosotros vamos?" espeto con impaciencia. "¿O que?"

Tristán mira hacia arriba. "Te estamos esperando, idiota. ¿Qué opinas?"

Pongo los ojos en blanco mientras me paso la mano por el pelo. "¿Bebidas?"

"Sí", murmura Jay.

Doblamos la esquina y comenzamos a caminar, y Tristan saca su teléfono de su bolsillo; entrecierra los ojos cuando ve el nombre en la pantalla.

"¿Quién es?" Pregunto.

"Malcolm, mi vecino en casa." Él lo responde. "Hola, Malcolm".

Escucha mientras caminamos y luego me mira con los ojos entrecerrados y sacude sutilmente la cabeza.

"¿Qué?" yo boca.

"Harrison", murmura.