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Scarlett intentó desviar la mirada y fingir que no había notado nada, era mejor para ella hacerse de la vista gorda y seguir creyendo que Brandon lo hacía solo por mera cortesía a los Wilson, porque era imposible que él amara a Melanie, después de lo que habían vivido el verano pasado, ella no lo había olvidado en todo ese tiempo, no quería creer que sus sentimientos por ella sí.
Scarlett comenzó a sentirse desgraciada, por supuesto para los invitados, seguramente no existía chica más afortunada que Scarlett O'Donnel, puesto que era bella, rica y los chicos no dejaban de seguirla. Era más que seguro que de saber usar sus atributos bien, de ser inteligente y siempre sobre todo mantener esa alegría que la caracterizaba, encontraría un hombre igual de apuesto, que amara su vivacidad y se esforzara por hacerla feliz, puesto que una chica como Scarlett no debia ser una chica fácil de complacer y era verdad, ella no se conformaba con nimiedades, a menos de que estuviera absolutamente enamorada como lo estaba de Brandon, a él podía seguirlo hasta el fin del mundo si era necesario, incluso denigrarse a ser de clase baja o pobre si con ello podía estar con Brandon. A su edad, así veía el amor, un sentimiento al que debia ofrecerlo todo para obtener la misma cantidad de amor a cambio.
En cualquier otra ocasión, el entusiasmo de los hombres y los celos de las otras muchachas le habrían proporcionado un enorme placer. Charles Wilson, seducido por su advertencia, se había plantado a su derecha, negándose a moverse de allí a pesar de los esfuerzos combinados de otros chicos que había sido seducidos por su astucia.
No muy lejos de Scarlett y su grupo de acompañantes, se encontraba un grupo de chicas que la miraban con desprecio y arqueando delicadamente las cejas, la definían como una «descarada» por acaparar la atención de los chicos más guapos de la región y también por opacar a la pobre Melanie Wilson, era su celebración y Scarlett había conseguido ser el centro de atención nuevamente.
Ella solía ignorar las miradas venenosas de las otras chicas, aunque si disfrutaba hacerlas enfadar, pero en ese preciso momento su atención estaba en otro sitio, se preguntó si Brandon la habría visto rodeada de tantos chicos y si sentiría un poco de celos de no ser él quien recibiera toda su atención, pero al buscarlo con la mirada, descubrió que él estaba más ocupado hablando con los invitados con Melanie tomada de su mano, como si en realidad fuese uno solo. Un intenso dolor le contrajo el corazón, sintió tanta frustración que pensó que sería capaz de abofetear con alegría la piel de marfil de Melanie hasta hacerla sangrar, pero pronto aparto esos pensamientos, al reconocer que ella no era ese tipo de mujer, ella tenía un plan que debia seguir, costara lo que le costara.
Al apartar la vista de la feliz pareja, chocó con la mirada fija de Rhett Bucker, que no se había mezclado con los grupos y conversaba aparte con un amigo de Brandon, Jayden Ford, quien también estaba en la academia militar y pronto se graduaría para unirse a las filas de hombres que peleaban, por una buena causa. Aquel pueblo estaba lleno de hombres que pensaban que estaba ayudando a su nación a eliminar a terroristas que asesinaban a sangre fría a gente inocente.
A diferencia de Brandon, él sí había estado observándola, ella se echó a reír abiertamente, al suponer que la forma en como la estaba mirando era el de un hombre estúpidamente embelesado por ella, y era normal, no había ni un hombre que no cayera a sus pies, pero él no tendría tanta suerte.
Scarlett tuvo la sensación de que aquel hombre que se mantenía alejado de la gente, era el único que la observaba con severo interés, aunque conociendo ahora su reputación y habiendo sido una víctima de su soberbia y arrogancia, pensó que solo la miraba así para divertirse de su reacción al darse cuenta de que la observaba, por lo que procuro no volver a encontrarse con esa mirada que la desnudaba.
Volvió a recobrar valor cuando Brandon y Melanie se fueron alejando el uno del otro por obra de los invitados que deseaban interrogarlos por separado, por lo que Scarlett creyó que había llegado el momento de acercarse a él para solicitarle lo tanto había ansiado desde el mismo instante en que sus ojos se habían abierto esa misma mañana.
Scarlett aprovechó un momento en que todo el mundo estaba hablando sobre la guerra que se libraba del otro lado del mundo, para poder acercarse sin que nadie la notara.
-Claramente, es una invasión-expreso un anciano que era un veterano de guerra, él había estado en la guerra de Vietnam, así qué sabia los sacrificios que implicaba una guerra, él no podía creer que después de aquella masacre, en tiempos supuestamente civilizados, aún se siguieran sacrificando vidas por nada, puesto que en las guerras todo el mundo salía perdiendo, solo que los gobiernos del mundo nunca lo aceptarían.
Los hombres que apoyaban y estaba en contra de aquella declaración se levantaron de sus asientos, elevando la voz para poder opinar sobre el tema, pero era una situación lejos de Scarlett por lo que discusiones como esas siempre terminaban hastiándola a Scarlett, pero al menos por ese instante creyó oportuna aquella discusión para poder monopolizar la atención de Brandon.
Él no se había levantado para tomar parte en la discusión bélica, estaba muy lejos de la mesa donde se llevaba la contienda, pero estaba atento a lo que se decía y por primera vez, había apartado la vista de Melanie, así que Scarlett se aproximó para intentar captar su atención, sin parecer desesperada
-¿Por qué no has dado tu opinión respecto al tema?-musito Scarlett cerca de él para llamar su atención del grupo de hombres vociferantes.
-Scarlett-respondió él sorprendido de verla tan cerca, se disculpó con ella y avanzo un paso para cortar la distancia entre los dos para poder escucharla con más claridad, a su alrededor se escuchaba la pelea entre los que buscaban la razón, la música, las risas y los platos de quienes aún continuaban comiendo. Scarlett soltó un suspiro cuando coloco su mano por detrás de su espalda para tratar de evitar que los meseros la empujaran al pasar, pero lo había hecho tocando su piel desnuda.
En ese momento, se arrepintió de haber comparado a ese imbécil llamado Rhett, puesto que no había ninguno tan guapo como él, era tan atento y educado.
-Prefiero guardar mis opiniones para otro momento-le explico con una agradable sonrisa-hay hombres que conocen más del tema que yo
Brandon señaló hacia el lugar donde ella se había encontrado momento atrás, se ruborizó al pensar que en verdad él le había estado prestando atención, pero su mejillas se encendieron aún más al darse cuenta de que en realidad miraba hacia donde se encontraba Rhett Bucker, él al igual que Brandon prefirió no meterse en problemas con desconocidos, sobre todo porque se encontraba en una celebración de un compañero de trabajo, así que saco de su bolsillo una caja metálica con cigarrillos en su interior y camino lejos de la escena, se adentró a la casa y desapareció de su vista
Scarlett pensó que ese hombre no tenía nada que decir que a la gente le interesara al menos no después de los rumores que se habían esparcido de su reputación, por lo que desvío la mirada del camino que había tomado Rhett Bucker para centrarse en Brandon
-¿Podrías brindarme unos minutos de tu tiempo?-le propuso Scarlett poniendo una mirada que ningún hombre podía rechazar.