Capítulo 6 Parte 6

Akim

Pude ver como Kahil estaba enfrentando un príncipe, parece que conocía a la princesa de Europa, significa que no tenía que hacer ninguna parada, tal vez, tendría que hablar con Dante, pero era como un hermano menor, pero era insoportable, era bastante caprichoso, lo peor era que pronto sería coronado.

Aunque nuestro índice de vida había incrementado, no todos duraban tanto tiempo, y el desgaste físico llegaba también, muchos reyes, archiduques y duques dejaban su puesto rápidamente para poder dejar que el otro gobernará.

Había estado observando mientras investigaban a Kahil a fondo, al igual que a toda su familia, tenía muchos hermanos, la mayoría había seguido un rumbo militar o parecido, abogado, medica, actriz, cantante, empresaria, tenía mucho que ver con el mundo exterior, dentro y fuera de su nación eran bastante comprometidos con todo, eran su apoyo, en ese momento había comprendido porque la habían dejado a ella de reina, no era por algo egoísta... era un plan.

-Hey, pensé que ya te habías ido -El rubio llegó ante mi, estaba en la sala, muchos de lso empleados se movían para llegar aún lado.

-No, estoy esperando a la princesa, se irá conmigo.

-¿de verdad la escogiste?, ¿no crees que tienes mejores a tu alrededor? La difunta reina era mucho más hermosa que esta, y tenía mejores cualidades a pesar de ser del mismo lugar, ¿no crees? -mi mirada se centra unos segundos en él, el se acomoda en su asiento mirando hacia otra parte.

-No necesito alguien con un cuerpo esculpido, que tenga grandes pechos o glúteos -enfatizó -Lo que necesito es reinar con cerebro y corazón, Kahil tiene ambas, necesito una reina con cualidades mentales y físicas en cuanto a combate, no una reina que le importe más que tipo de marca es más linda, o sin los zapatos combinan con su ropa -me levantó de mi asiento mirando a Dante, el próximo rey de Europa -No pienso con mis genitales.

De esa forma me retiro dejándolo con a boca abierta; pronto iba a cumplir 29 años, estaba cerca de los 30, no podía tardar demasiado haciendo un plan, entre más viejo menos energía tendría para planear todo.

No vi a Kahil en unas horas, cuando me dieron la hora, sería en la noche para no llamar demasiado la atención, y el avión había sido diseñado por una de las empresas que tenía, sin embargo, nadie sabía de cuantas empresas era dueño con esfuerzo y herencia.

Suspire mirando por la ventana, no faltaba nada para salir de este lugar, no me sentía totalmente bien sin estar en mi propio territorio; escuché mucho ruido afuera de la habitación, Alek estaba dormido, y Andrei estaría con su nana dando un paseo.

-Akim, necesito ayuda -escuchó la voz de mi prometida, me levanto para abrir la puerta, donde ella esta haciendo un puchero -Ellos me dicen que no puedo llevar mis peluches, pero mis peluches son regalos de mi seres queridos -ese tierno puchero no se quita de su rostro.

-Empácalos, los enviaré para que lleguen a la mansión, de esa forma podrás estar más cómoda, ¿no? -su sonrisa llena todo su rostro, se ve más llamativa de lo que es.

-¿Si puedo?, ¿no es demasiado infantil?

-Todos tenemos nuestro lado infantil... además -me acerco un poco más a ella -No me importa, me agrada que lo seas -No era mentira, me recordaba un poco la infancia perdida que había tenido, veo como se sonroja, incluso sus orejas se ponen rojas, lo que hace sonreír un poco -¿Ya todo esta preparado?

-Sí, lo único que me faltaba era eso, ¿Cuándo es el vuelo?

-Lo haremos de noche, para que duermas en el avión y te sientas mejor al llegar en el día, nos llevamos alrededor de 9 horas, podrás conocer un poco para luego volver a descansar si no puedes en el avión -Había planeado todo, tanto para los niños como para ella, tratando de que no viera a mi padre el primer día, ella asintió.

-¿esta haciendo frío?

-Siempre lo hace -pensé que mostraría una cara de disgusto, sin embargo parecía satisfecha.

-No llevó mucha ropa de frío, como has notado aquí no tenemos todas las estaciones.

-Lo sé, por esa razón tendrás ropa comprada en mi nación... Nuestra nación.

A las 6 en punto estábamos montando las maletas en las camionetas, el vuelo sería a las 8 de la noche, pero llegar sería un poco difícil, por los trancones, aún más porque no solo nosotros nos iríamos a nuestra nación, por esa razón muchos más carros saldrían del lugar, y era algo para dispersar que la princesa saldría de su hogar por primera vez.

-Andrei, ¿ya tienes tu maleta de mano? -cuando dirigí mi vista a la voz, pude ver algo realmente sorprendente, que jamás en mi vida había querido verlo, hasta ahora. Kahil venía con Alek en brazos, y de la mano con Andrei, llevaba una mochila, las mucamas la seguían.

-Señorita, venga nosotros llevamos al más pequeño -ella las esquiva.

-No, yo lo hago, no me molesta -De esa forma llegó ante mi -¿Ya esta todo listo? -Esa mujer es totalmente perfecta, es apta para reina y con los niños parece una madre, se comporta adecuada, solté una sonrisa amarga trayendo algunos recuerdos.

-Sí, ya todo esta en orden, saldremos luego de los cinco primeros carros -Estaba el príncipe Dante a la cabeza, y detrás iban algunos archiduques de Europa, tantas personas que conocía y me faltaban por conocer.

-Manos a la obra -ella se sube a la camioneta, mientras algunos de sus hermanos están presentes y sus padres, veo a su madre retener las ganas de llorar al ver a su hija irse.

-La cuidaré con mi vida si es necesario -les digo antes de subir al auto, Alek estaba en brazos de Kahil jugando con un pequeño peluche -¿Tu le diste el animal? -ella asiente, era una jirafa -¿has visto una jirafa?

-¿De verdad o de la televisión?

-Real -respondo y ella niega haciendo puchero -Te llevaré algún día, conocerás todos los animales del mundo -Ya podíamos convivir un poco más con los animales, teníamos solo un lugar para ellos, y quienes eran capaz de convivir sin miedo lo hacían.

Esa mujer era hermosa, tenía que decirlo, en su nación sería alguien promedio, pero donde vivía había visto rubias, pelinegras, castañas, había visto mucho colores de ojos; era alguien promedio, su caballo que tiraba a pelinegra, sus ojos castaños que cuando estaban demasiado con la luz del sol se ponía mieles, su cabello ondulado hasta su cadera, que siempre tenía en una coleta... Tenía un cuerpo que por donde quiera que había visto aquí era algo que todas tenías, caderas, glúteos... pechos, pero era algo diferente con ella, me gustaba su forma de actuar, su forma de hacer las cosas, con lo poco que había visto, y con la investigación, ella no podía ser alguien que no estuviera totalmente preparada, era inteligente e intuitiva; sus notas en el instituto eran excelente pero al mismo tiempo no lo eran, siempre discutía con los profesores y los estudiantes, se metió en muchos problemas por defender a sus compañeros, en el registro decía que así se conoció con la princesa de Europa, eso quiere decir que no tengo que hacer que ella tomé el trono.

-¿estas bien?

-Sí -asiento acariciando su mano unos segundos y de volverla a mi lugar.

Dante tenía muchas facultades buenas, tenía buen carisma, pero si estaba apoyando a mi padre, significaba que solo deseaba el poder y querer sobrepasar a todos, querer llegar a la cima sin importar como, todos tenían los ojos puestos en él, decían que era el más calificado desde que era pequeño, sin embargo, cuando nació la niña, Niami el temió por lo que pasaría con él, porque todos decían que su madre debió serla reina desde el principio, pero por política debieron quitarla de ese camino, al ser hija de un gran político, decían que era mejor nunca ponerla en relación con un rey que podría ser mal visto, ya que en esa época estaba en que su padre era candidato para ser presidente, simplemente atrasaron lo inevitable. Porque luego de unos años ellos se volvieron a reunir y surgió la mayor que es la amiga de Kahil, ahora la vista esta en ella, aún más porque luego de ella salieron otros tres más, la ideal era Niami; la ahora reina de Europa esta muerta, y el rey se centro tanto en su trabajo que oculto lo que en verdad sentía sin poder estar con nadie más porque había quitado a toda mujer de su vida por la madre de ella, y ahora estaba muerta, la mujer que no quería que Dante se acercará a su hija, estaba muerta, y ahora el era príncipe heredero temía que no lo fuera heredero al trono.

Por esa razón tenía que cambiar todo en este mundo que estaba volviendo hacer podrido, pero necesitaba ayuda de la familia más importante e influyente que inicio todo. Esa es la familia de mi ahora prometida, con ella podría tener ayuda en cada nación para ayudar a que la balanza no este apoyando a nadie que no deba.

-Señor, su padre quiere verlo cuando aterrice -me informaron mientras estábamos en el avión.

-¿Qué quiere?

-Informa que escuchó lo que están diciendo en las noticias, por esa razón quiere ver con sus propios ojos quien es la mujer -llevó mi mano a mi rostro mientras veo que todo están acomodados, Kahil esta a mi lado, el jet privado esta preparándose para despegar, ella no entendía que estábamos hablando, no tenía aún el pequeño comunicador, ninguno lo poseía.

-Debe estar planeando algo... -apretó los puños mientras pienso todo lo malo que ha hecho -Dile que mi vuelo se va atrasar y por esa razón no podremos asistir con él, ¿de acuerdo? -el secretario asiente, da una pequeña reverencia y se va a su asiento con los otros empleados.

-¿estas bien? -el pequeño acento e idioma llega a mis oídos.

-Sí, estoy bien, Printsessa -ella se sonroja al escuchar el apodo, lo cual me causa un poco de burla, porque no me imagino como se pondrá cuando le diga de otras formas.