-¡Solo es una estúpida leyenda urbana!- se convenció Jun a sí mismo encerrado en las cuatro paredes de su habitación- Si, solo es eso, algo más tuvo que haber pasado con Masaru y Katsuro...¿Y si nos están jugando una broma?
Jun rascaba sus manos con fuerza mientras observaba con paranoia a su alrededor.
-¡No voy a dejar que me atrape! ¡No seré el