Capítulo 3 Primer aliado

Pronto encontró al que la seguía.

Valla, valla pero si es nada más y nada menos que madre luna(se refiere a la Emperatriz)

Jajaja veamos que tienes para mí, pero no hoy, hoy estoy cansada.

Lotty subió los largos escalones rumbo a su habitación.

Rosi, prepárame un baño por favor, hoy pondrás escencia de cerezas.

Claro su alteza.

Humm por cierto necesito que me acompañes y deprisa visteme, quiero verme hermosa, hoy saldré a cenar con el duque Elios.

¡Pero mi princesa! Usted es tan bella con lo que sea que ocupe!

Me alagas jeje.

Lotty soltó una risita traviesa mientras se desnudaba y metía en la bañera de leche tibia, y pronto Rosi llegó con su ropa, un conjunto negro, ceñido al cuerpo de encaje, los bustos enormes de Lotty se realzaban magníficamente y sobre todo aquellos ojos hermosos.

Traca, traca, tic traca tic.

Rosssssiii por dios estoy ansiosa, a qué hora llegaremos?

Pronto mi princesa...

Justo cuando Lotty soltaba su vijesimo suspiro llegaron a un pequeño y muy apartado restaurante.

El restaurante estaba magníficamente adornado, las salas VIP tenían sus propias habitaciones apartados del mundo.

Rosi esperó junto a la puerta mientras Lotty entraba dignamente.

¡Princesa Lotty!

Un hombre de mirada tímida sonrió y agachó la cabeza al verla. El hombre musculoso de cabello negro azabache y ojos grises se levantó suavemente, alto y espalda ancha. Un verdadero Dios griego.

Lotty lo miro sonriendo.

Pensé que no vendría conde Elios.

Siempre vendré cuando me lo pida, princesa Lotty, es un honor.

Mmm, suspiró Lotty mientras los meseros traían los manjares típicos y deliciosos del lugar.

Princesa Lotty, pruebe este vino de arroz, ¡Es excelente!

¡Gracias conde Elios!

Lotty tomó la copa entre sus dedos y tomó un sorbo relamiéndose los labios suavemente

Elios se atragantó en cuanto vio aquello y Lotty sonrió, lentamente se apartó de la silla y caminó por el lugar. Elios confundido preguntó.

¿Que pasa? ¿Hay algo que quisiera decirme?

Si, conde Elios... Busco aliados y nadie mejor que usted, se que es alido del país vecino.

Elios palideció.

No es verdad

Yo sé que si, y me agrada.

Elios miró esos ojos y sintió que le desnudaban el alma.

Lotty se detuvo frente a la puerta mientras veía al enrrojecido Elios y lentamente levantó su hermoso vestido descubriendo un coqueto triangulito de vello plateado.

Elios trago saliva y miro a Lotty tratando de comprender.

¿Que intentas hacer?

manteniendo las piernas una separada de la otra, le enseñó descarada la vagina.

Su cara, al dirigirse al hombre, claramente decía: pruébame.

Aunque la de él reflejaba un asombro sin igual.

Únete a mi, Elios, se mis manos, y juntos conquistaremos todo.

Le retó con una ceja alzada mientras ella misma se toqueteaba el interior de las piernas, pasando por encima de su sexo.

Ella separó la espalda de la pared, caminando hacia él con impulso, soltando la falda de su vestido, posándole sobre sus labios el dedo medio e índice de la mano derecha, mismos que instantes atrás había humedecido con sus jugos..

El los sorbio y se arrodilló mientras juraba bajo la pena de su vida, entregarle el corazón a esta mujer que lo volvía loco.

Lotty sonrió.

No me gusta compartir pero si yo seré compartida, aún aceptas.

Si Princesa, te ayudaré a lograr tus objetivos, buscaremos a otros aliados conquistaremos al mundo por ti.

Elios dijo mientras se inundaba en el dulce nectar de su piel....

            
            

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