Capítulo 8 Zen aporreó a los mayordomos (Segunda parte)

Si bien esas personas tenían fuerza, no pudieron mover a Zen, quien había alcanzado el nivel de refino de huesos.

Sus pies eran como una cuña amartillada por un martillo y clavada profundamente en el suelo, y aunque los sirvientes usaron toda su fuerza, no habían logrado moverlo. Sus cuerpos se cubrieron de sudor con el esfuerzo. Incluso jadeaban sin aliento y se habían quedado sin energía. Al ver eso, Darren dijo: "Zen, te estoy dando la oportunidad de servirle a Grey. Eso es mejor que ser golpeado todos los días. ¡No te pongas difícil!"

Los ojos de Zen brillaron con fiereza. Respiró hondo y contrajo las costillas. Desde que había alcanzado el nivel de refino de huesos, podía reunir su energía para tomar venganza, así que se quedó quieto y dirigió su energía como un rayo. El suelo tembló violentamente, como si hubiera habido una explosión. Todos los sirvientes, incluidos Grey y Darren, se taparon los oídos cuando un fuerte sonido apareció después del temblor.

"¡Grey Huang! ¡Darren Fang!", gritó Zen, "Ni siquiera mi tío Bryson Luo, si estuviera aquí, se atrevería a pedirme que fuera su sirviente. Ustedes dos son simples sirvientes del Clan Luo. ¿Con qué derecho se atreven a ser tan arrogantes? No sé quién les dio el coraje para atreverse a pensar en semejantes tonterías".

Su poder asustó a Darren, quien dio un paso atrás, mientras que Grey Huang se quedó quieto.

Darren había traído intencionadamente a Zen a ese lugar. Su propósito era dejar que Grey Huang lidiara con él, y cuando vio su cara enojada, supo que estaba cerca del éxito, porque el tabú más grande de Grey era que otros trataran de faltarle el respeto. Zen definitivamente se había metido en un gran problema.

Grey Huang se quedó inmóvil. Parecía tranquilo, y con los ojos entrecerrados dijo: "Zen, no olvides la situación en la que estás ahora. Eres un sirviente, no el joven patrón. Perrin es el joven patrón ahora. Debería ser un honor para tí servirme".

"¡Cállate!"

Zen empujó con fuerza a los sirvientes que lo habían agarrado.

Grey Huang presenció pacientemente su esfuerzo antes de preguntarle: "¿Osas rebelarte? De acuerdo con las reglas del Clan, serás ejecutado si lo haces".

Zen se rió a carcajadas mientras avanzaba hacia adelante y se burló, "¿Reglas familiares? ¿Cómo puede un extraño como tú atreverse a hablar sobre las reglas de mi familia frente a mí? ¡Déjame enseñarte cuáles son las reglas de mi familia!"

Cuando se preparó para darle un golpe a Grey Huang, maximizó su fuerza.

"¡Zen, no te atrevas! Si me golpeas, Andrew nunca te lo perdonará. Además, no eres más que un insignificante saco de entrenamiento en el Clan Luo. ¿No tienes miedo de ser apaleado hasta morir?", dijo con calma Grey.

"¡Ay!"

El sonido del choque de la carne contra la carne se hizo eco en el patio. Zen abofeteó en la cara a Grey. Ya no había nada que lo detuviera, así que dio otro paso hacia adelante, lo sujetó del cuello de la camisa, y lo golpeó en la cara unas cuantas veces más.

La arrugada cara de Grey Huang palideció ante ese ataque. Las huellas dactilares del ex joven patrón estaban claramente impresas en su rostro medio hinchado. Con cada bofetada, un fino chorro de sangre había estallado. Zen sonrió al darse cuenta de que la cara de Grey ahora parecía la de un cerdo, hinchada y roja. El cuerpo entero de Darren tembló cuando vio lo que estaba pasando.

"De acuerdo con las reglas del Clan Luo, aquellos que dicen puras tonterías y reprochan a otros sin presentar evidencia, serán castigados".

"¡Ay!"

"De acuerdo con las reglas del Clan Luo, aquellos que opriman a sus semejantes y hagan gala de engreimiento, serán castigados".

"¡Ay!"

"De acuerdo con las reglas del Clan Luo, aquellos que siembren la discordia y tergiversen los problemas, serán castigados".

"¡Ay!"

"De acuerdo con las reglas del Clan Luo..."

"¡Ay!"

Cada bofetada era tan fuerte que hacía que Grey Huang escupiera sangre. Darren no paraba de temblar.

Todo era terrible...

Ambos hombres estaban sorprendidos. Zen había sido un esclavo durante mucho tiempo, y había sido obediente y había soportado estoicamente todos los insultos. ¿Cómo se atrevía a abofetear a Grey?

Pero nunca se les ocurrió que su comportamiento no se debía a que fuera obediente, sino que simplemente había optado por no preocuparse por los insultos.

Al oír toda la conmoción, varios niños del Clan Luo se reunieron en el patio y fueron testigos de las acciones de Zen. Cada uno de ellos quedó igualmente sorprendido.

Grey había actuado de forma indignante debido a su conexión con Andrew Luo, y en su delirio de grandeza llegó a creer que era igual a un patrón de la familia Luo. Ya había atosigado a algunos de esos niños, pero ninguno había tomado represalias debido a su posición actual.

Él no tenía idea de cuánto lo odiaban las personas que lo servían, y era igualmente ajeno al odio que esos niños le proferían. Ese día, alguien había decidido darle una lección, pero, esos niños, aunque pequeños, eran capaces de comprender que la arrogancia estaba relacionada con la lealtad y el apoyo. Gray Huang se había vuelto arrogante debido a su relación con Andrew Luo, y aunque se portaba altanero frente a otras personas, cuando se encontraba en presencia de la segunda y la tercera rama del Clan Luo, se comportaba de una manera extremadamente humilde.

En cualquier caso, no era apropiado que un esclavo golpeara al mayordomo de esa manera, por lo que Zen se había metido en un gran problema. Todos sabían que lo que había hecho lo conduciría a la muerte.

Él abofeteó a Gray unas cuantas veces más antes de detenerse. El rostro de Grey Huang se había convertido en una masa mutilada y sanguinolenta. Incluso su cabello cuidadosamente atado se había convertido en un lío lleno sangre y tejidos.

Él abrió débilmente su boca para amenazar a Zen después de su desafortunado golpe. "Tú, espera y verás cómo...", pero antes de que pudiera terminar, Zen volvió a abofetearlo. Gray Huang cayó al suelo.

Después de darle una lección a ese hombre, la mirada de Zen se volvió hacia Darren.

Al darse cuenta de su destino, este último no pudo evitar temblar. "Zen Luo, ten en cuenta que sólo eres un esclavo", gritó dando un paso hacia atrás.

"¿Qué hay de malo en ser un esclavo?" Zen lo seguía lentamente mientras hablaba.

"¡No te atrevas a ofenderme! ¡Mi posición es más alta que la tuya!", gritó Darren en un intento por disuadirlo.

"¿Cuál posición baja? ¿Y cuál posición alta? Mi apellido es Luo. ¡Aunque soy un esclavo, sigo siendo un Luo! Y olvidas que mi puño es más fuerte que el tuyo. ¡Estoy por encima de ti! Mi fuerza es más que la tuya. ¡Estoy por encima de ti! Mi Kung Fu es mejor que el tuyo. ¡Estoy por encima de ti!", murmuró con fuerza con los dientes apretados mientras daba pasos significativos y amenazadores hacia Darren. Un segundo después, se lanzó rápidamente y lo sujetó. Habiendo alcanzado el nivel de refino de huesos, su confianza era mucho mayor, y su fuerza también había crecido. Zen sintió que su poder recorría su cuerpo mientras levantaba la mano para golpear a Darren.

La bofetada y el sonido del impacto fueron tan fuertes, que incluso los espectadores se aterrorizaron.

Una vez que Zen terminó de golpearlo, lo lanzó junto a Grey Huang. Ambos sirvientes gritaron de dolor cuando sus cuerpos chocaron. Zen levantó su barbilla con superioridad para decir: "Que este día sea una lección para ambos. ¡Recuerden respetar a las demás personas, no sólo a sus posiciones!"

Entonces se dio la vuelta y se alejó. Los niños y los sirvientes de la familia Luo que se habían reunido alrededor de los tres hombres para ver el espectáculo, inmediatamente despejaron el camino cuando lo vieron dirigirse hacia la puerta.