Nuestro encuentro inesperado
img img Nuestro encuentro inesperado img Capítulo 10 Vigilada
10
Capítulo 12 Osadía img
Capítulo 13 El castigo img
Capítulo 14 La culpable img
Capítulo 15 Una protección para la madre img
Capítulo 16 Provocación img
Capítulo 17 Duelo img
Capítulo 18 La derrota img
Capítulo 19 Dale una lección img
Capítulo 20 Recuperando el antiguo puesto img
Capítulo 21 Celebrando con los niños img
Capítulo 22 El primer paciente img
Capítulo 23 Encuentro indeseable img
Capítulo 24 El herido img
Capítulo 25 Mujer con sed de dinero img
Capítulo 26 Qué alboroto img
Capítulo 27 Vaya coincidencia img
Capítulo 28 Una extraña familia img
Capítulo 29 Pegado a las faldas de su madre img
Capítulo 30 Un almuerzo juntos img
Capítulo 31 Arrepentida img
Capítulo 32 Horrible demonio img
Capítulo 33 Los Chambers están muertos para mí img
Capítulo 34 Educando a los niños img
Capítulo 35 Estoy aquí por ti img
Capítulo 36 La comida que había preparado img
Capítulo 37 Un incidente en la escuela img
Capítulo 38 La rivalidad con los Chambers img
Capítulo 39 El poder de Lance img
Capítulo 40 No me gusta deberle favores a la gente img
Capítulo 41 Nadie podrá escapar de sus fechorías img
Capítulo 42 Las personas que nunca debería ofender img
Capítulo 43 La tranquilidad de haber partido img
Capítulo 44 La disculpa del niño prudente img
Capítulo 45 Peor que tú img
Capítulo 46 El diablo apareció en persona img
Capítulo 47 No me quedaré de brazos cruzados img
Capítulo 48 La furia del señor Hardwick img
Capítulo 49 La gota que derramó el vaso img
Capítulo 50 ¿Por qué debía de ser tolerante con él img
Capítulo 51 No hay vuelta atrás img
Capítulo 52 Ella sabe lo que le conviene img
Capítulo 53 Ni una sola noticia suya img
Capítulo 54 La mujer de Lance Hardwick img
Capítulo 55 Desafiando su paciencia img
Capítulo 56 Ni él mismo lo sabe img
Capítulo 57 Chica astuta img
Capítulo 58 El tesoro que él quería img
Capítulo 59 Te recompensaré img
Capítulo 60 ¿A eso le llamas buen humor img
Capítulo 61 Encuentro con los Chambers img
Capítulo 62 Una gran boda img
Capítulo 63 La boda que acabó en farsa img
Capítulo 64 Subirse a su carro img
Capítulo 65 El resentimiento de los Chambers img
Capítulo 66 Duplicidad img
Capítulo 67 Todo es por ella img
Capítulo 68 ¿Te preocupas por mí img
Capítulo 69 Casi en la calle img
Capítulo 70 Entonces, discúlpeme por favor img
Capítulo 71 Admito mi derrota img
Capítulo 72 ¡Otra vez tú! img
Capítulo 73 ¿Acosas a mi madre img
Capítulo 74 Una inesperada confesión img
Capítulo 75 Dos perros feroces img
Capítulo 76 Un reproche sereno img
Capítulo 77 ¿A qué le tienes miedo img
Capítulo 78 ¿A quién llamas el gran demonio img
Capítulo 79 El secuestro img
Capítulo 80 Un trato especial img
Capítulo 81 ¿Hablas en serio img
Capítulo 82 El rapto del hermano img
Capítulo 83 Un niño sagaz img
Capítulo 84 Tú eres el perro img
Capítulo 85 En realidad era su madre biológica img
Capítulo 86 Entrando en la boca del lobo img
Capítulo 87 Una madre es una leona img
Capítulo 88 Es el momento de trabajar juntos img
Capítulo 89 Una intervención la mitad de la noche img
Capítulo 90 Tengo evidencia img
Capítulo 91 Eres muy inteligente img
Capítulo 92 Caítulo ¿Tú eres mi padre img
Capítulo 93 ¿Puedes darme una oportunidad img
Capítulo 94 Definitivamente fue la primera img
Capítulo 95 Comeré lo que pueda img
Capítulo 96 Planes para aprovecharse de mí img
Capítulo 97 No puedes detenerme img
Capítulo 98 ¿Por qué debería aumentarte el sueldo img
Capítulo 99 La persona en su corazón img
Capítulo 100 ¡Todo estaba minuciosamente preparado! img
img
  /  9
img

Capítulo 10 Vigilada

Kristy estaba embarazada, se casaría en unos días y el novio era...

Carley se mordió el labio y se recriminó por dejar que su mente divagara.

"Estás holgazaneando de nuevo, ¿cierto?".

La voz de un hombre la sacó de sus pensamientos. De inmediato, Carley fingió una sonrisa y se dio la vuelta para mirar al Sr. Hardwick. "Qué coincidencia, Sr. Hardwick. ¿Me está vigilando?".

Mientras encontraba un trabajo mejor, tenía que quedarse en el que tenía y ser amable con Lance.

"Debo decir que me siento halagada por tu preocupación. ¿Puedo saber por qué estás aquí?".

"Solo me preguntaba si ya estás lista para renunciar, después de todas las tonterías que has hecho", replicó el Sr. Hardwick con frialdad.

"¡No!".

Carley no pudo evitar sentir que el Sr. Hardwick la estaba molestando sin ningún motivo. De lo contrario, ¿por qué se toparía con él tantas veces?

Ella no era más que una humilde empleada que intentaba mantener la cabeza baja hasta encontrar un trabajo mejor. ¿Qué error había cometido para merecer eso de Boss Hardwick?

"No, por supuesto que no", insistió ella. "Solo fantaseaba con lo bueno que sería si el hospital fuera más limpio y cómodo para los pacientes".

"¡Vaya, estoy sorprendido! Eres toda una pensadora. Pero las ideas no significan nada sin las acciones. ¿Qué tal si aceptas el reto de limpiar todo el hospital tú sola? Si no estás dispuesta, entonces no te molestes en venir mañana".

Carley quedó boquiabierta. "¿Q-qué?", tartamudeó. No podía creer lo que escuchaba.

¡Era evidente que ese idi*ta estaba abusando de su poder y que quería hacerla sufrir!

¿Qué había hecho para que ese hombre rencoroso no la dejara en paz?

De no ser por sus problemas financieros y porque sus hijos acababan de entrar al jardín, Carley se hubiera dejado dominar por su temperamento explosivo y le hubiera arrojado el trapeador a la cara.

En ese momento, Lance estaba furibundo. ¿Cómo es que esa mujer todavía tenía tiempo para obsesionarse con otros hombres? Era hora de darle una lección.

"Si no quieres trabajar, renuncia".

Ni siquiera se molestó en darle una explicación. Fue verdaderamente arrogante.

Carley hizo todo lo posible por calmarse, pues se dijo a sí misma que Lance no era más que un lunático. No debía ensañarse con él.

Consideraba que todo era una examen de Dios para poner a prueba su fuerza de voluntad, así que no debía bajar la guardia.

¡En realidad, lo que más quería era hacerle un chequeo médico a este bast*rdo, clavarle algunas agujas y dejarlo postrado en cama por el resto de su vida; así no dañaría a más personas inocentes!

Carley trató de poner una expresión de valentía en el rostro y respondió: "Por supuesto, estoy dispuesta a hacer lo que sea necesario para conservar mi trabajo, incluso si eso significa limpiar todo el hospital. Siempre y cuando el salario llegue a tiempo. Mañana puedes retomar tu labor de hacerme miserable".

Con aquel psicópata vigilándola, no podía darse el lujo de pensarlo dos veces, así que comenzó a trabajar frenéticamente.

Mientras tanto, juraba en silencio que lo haría pagar por todo lo que le estaba haciendo pasar.

Lance la miró con frialdad y le advirtió con un tono amenazante: "Espero que no me estés mald*ciendo en tu corazón. Si noto que lo haces, perderás tu trabajo".

Carley estaba atónita. ¿Acaso este tipo tenía la habilidad de leer la mente? ¿De qué otra forma podía conocer sus pensamientos?

Enseguida, retrocedió y dijo con voz temblorosa: "Sr. Hardwick, está equivocado. Lo respeto mucho. Volveré a trabajar ahora. Hay mucho por hacer".

"Está bien, ve." Mientras Carley se alejaba, los labios de Lance se curvaron en una mueca. La idea de verla retorcerse lo hizo sentirse fuerte.

Una vez estuvo fuera de su vista, se escondió en un rincón y respiró aliviada.

¡La sensación de estar constantemente vigilada la estaba volviendo loca!

Primero, Carley pensó que Lance solo estaba tratando de asustarla, pero cuando regresó, descubrió que todos los limpiadores del hospital se habían ido.

Eso significaba que tendría que limpiar sola todo el hospital.

¿Había algo de humanidad en Lance?

¿Qué clase de odio o rencor profundo podía hacer que el director de una gran empresa fuera detrás de una simple empleada como ella?

            
            

COPYRIGHT(©) 2022