Capítulo 8 Una mentira ridícula

"¿Qué es esto?" Emberly frunció el ceño en cuanto llegó a su escritorio a la mañana siguiente. Miró a Ivana buscando una aclaración.

Había todo tipo de bocadillos sobre su escritorio.

"Son bocadillos. ¿No lo puedes notar?" Ivana le guiñó un ojo y señaló hacia atrás.

"¡Aquí! ¡Emberly!" dijo Shawn, sonriendo con aire presumido como si esperara ser elogiado.

Marco también la miró y asintió ligeramente.

Emberly puso los ojos en blanco. Luego se negó firmemente.

"Devuélvanlos. No necesito esto."

"¿Por qué? ¿No te gustan este tipo de bocadillos? Si es así, podemos traerte otra cosa la próxima vez", dijo Shawn, acercándose.

De todos modos, Marco siempre tenía todo tipo de bocadillos en su escritorio cada día, todos regalos de las chicas que lo admiraban en secreto.

Al ver que Shawn no pensaba detenerse, Emberly pensó que debía dejar las cosas claras. Entonces le gritó: "¿No me escuchaste? ¡Dije que no los quiero! ¡Ni ahora ni nunca!"

"Está bien, está bien. Solo recuerda venir con Marco y conmigo si necesitas ayuda." Shawn involucró a su amigo en el asunto mientras limpiaba rápidamente el escritorio de Emberly. Todavía sentía un escalofrío recorrerle la espalda cada vez que recordaba lo que había pasado la noche anterior. De no ser por Emberly, tal vez no habrían salido ilesos. Le estaban agradecidos.

"¿Cuántas veces quieres que repita lo mismo? No quiero que me agradezcan ni que hagan nada por mí. Si no quieren caerme mal, simplemente no lo mencionen más." Emberly se sentó y abrió un libro, ignorando a Shawn.

Tocándose la parte trasera de la cabeza, Shawn se fue con torpeza.

"Emmy, ¿desde cuándo eres tan cercana a esos dos? Shawn te ofreció bocadillos y Marco no dijo nada. ¿Qué pasa entre tú y ellos?" preguntó Ivana con curiosidad.

Emberly sonrió suavemente. "No es nada. Solo me los encontré cuando alguien los estaba molestando anoche. Así que yo..."

"¡Luchaste por ellos!" interrumpió Ivana emocionada.

"No, llamé a la policía al lugar", añadió Emberly resignada. Luego siguió leyendo.

¿Eso era todo? ¿Cómo podía ser? Ivana estaba algo confundida.

¡Un momento! Algo no cuadraba.

¡Marco y Shawn eran los matones de la escuela! ¿Quién se atrevería a meterse con ellos?

"Chicos, ¿han oído lo último? ¿Conocen a la chica nueva de Clase 14, verdad? La misma que nuestra maestra de grupo rechazó. Bueno, Marco y Shawn le trajeron bocadillos esta mañana. ¡Escuché que Rhoda estaba furiosa!" Los estudiantes de la Clase 1-también conocida como la Clase clave-estaban chismeando justo antes del primer período.

Era bien sabido en la Escuela Secundaria Maybourn que Rhoda Dorsey, una estudiante de arte, tenía un gran enamoramiento por Marco.

"¿En serio? ¿Cómo una chica del campo logró ganarse el favor de Marco? ¿Qué vio en ella?" Una chica junto a la chismosa chasqueó los dientes con desdén.

Aunque muy pocos en Barba Azul sabían sobre los antecedentes familiares de Marco, sabían que Shawn provenía de una de las familias más prominentes de la ciudad. Su familia era muy conocida en el ámbito político y empresarial. Ambos chicos eran inseparables. En especial, Shawn hacía todo lo que Marco decía. Esto solo significaba una cosa para los estudiantes de la escuela: Marco provenía de una familia aún más poderosa.

Felicia, que estaba sentada en su escritorio en la primera fila, dejó de escribir en cuanto escuchó la conversación. Giró la cabeza y preguntó: "¿Están hablando de la chica nueva de Clase 14, verdad? ¿A Marco le gusta?"

Una imperceptible chispa de celos brilló en los ojos de Felicia mientras hablaba.

"¿Cómo podría a Marco gustarle una chica así? Ella está muy por debajo de su nivel. ¡Me pregunto cómo una don nadie como ella logró entrar en nuestra escuela!" La chismosa descartó la posibilidad de inmediato.

Felicia comenzó con vacilación: "En realidad..." Luego se detuvo.

"¿En realidad qué? Licia, ¿sabes algo que nosotros no?" Los ojos de la chismosa se iluminaron al instante.

"Bueno, la cosa es que Emberly es mi hermana mayor", dijo Felicia en un susurro, como si temiera ser escuchada.

"¿Qué?" La chismosa saltó de su asiento. "Licia, pensé que tus padres solo tenían dos hijos. Sé que Travis, en el grado 12, es tu hermano mayor. Nunca mencionaste tener una hermana. ¿Cómo es que Emberly aparece ahora? ¿Y por qué se dice que es del campo si realmente es tu hermana?"

Felicia se veía avergonzada. "En realidad... La trajeron a casa hace dos días desde un pueblo remoto en el campo."

"Ah, ya entiendo. Fue adoptada. Eso lo explica todo. En ese caso, debería comportarse." La chismosa asintió con comprensión.

Felicia no se molestó en aclarar el malentendido. Después de todo, ella no había mencionado nada sobre que Emberly fuera adoptada. Sintió que no era su culpa que se hiciera esa suposición.

"¿Adivina qué? Escuché que discutió con la señorita Cooper después de inscribirse en el Concurso Nacional de Oratoria. La chica nueva la desafió diciendo que ganaría. Eso me recuerda. Tú también participas en el concurso, ¿verdad? ¡Va a ser divertido!

Me gustaría verte derrotarla durante la competencia. No entiendo por qué tus padres sintieron la necesidad de adoptar a otra chica. Tú ya eres lo suficientemente excelente. Se puede decir que eres siete hijas en una sola," dijo la chica con un toque de adulación en sus palabras.

Todos en la clase de Felicia la admiraban. Según ellos, su vida era perfecta. Era bonita, gentil, amable, inteligente y provenía de una familia poderosa. Muchos chicos querían salir con ella, y muchas chicas querían ser su mejor amiga.

Felicia se sintió halagada después de escuchar esas palabras. También quería reírse a carcajadas. ¿Emberly se inscribió en el Concurso Nacional de Oratoria? ¡Qué gran broma! ¿De verdad Emberly pensaba que podía competir con ella?

El rumor sobre que Emberly era adoptada pronto se difundió como pólvora. Cuando Rhoda lo escuchó, su ánimo decaído se animó. Ya no estaba enojada porque sentía que una simple chica adoptada no era una amenaza para ella. Después de todo, ¿quién elegiría a una sirvienta de baja categoría sobre una verdadera princesa?

Rhoda emanaba una energía maliciosa mientras ideaba un plan. Decidió darle una lección a Emberly para que aprendiera a no meterse con ella nunca más.

"Hey, ¿eres la recién llegada?" Emberly fue abordada en el camino después de salir de la escuela.

Rhoda se acercó a ella, seguida por varias chicas que tenían burlas en sus rostros. Parecía que todas eran estudiantes de la Escuela Secundaria Maybourn.

Emberly soltó un suspiro exasperado. ¿Otra vez este callejón? ¿Estaba maldito este lugar?

"Entonces, ¿tú eres Emberly, la estúpida estudiante transferida? Pensé que eras bonita, pero resulta que solo eres otra del montón. De todos modos, escuché que Marco ha sido amable contigo. ¿Qué hay entre tú y él? ¡Habla!" dijo una pelirroja ferozmente, como si fuera la portavoz de Rhoda.

"¿Qué... qué tiene que ver eso contigo? Si tienes alguna pregunta, ve y pregúntale a Marco. ¡Quítate de mi camino! ¡Tengo cosas que hacer!" Emberly dio otro paso.

Rhoda se paró frente a ella y dijo en voz baja: "Supongo que no tienes idea de cómo funcionan las cosas en esta ciudad porque acabas de llegar. Déjame decirte. La gente aquí se divide en diferentes clases. La clase baja es inferior a los de arriba. Tú y Marco son de mundos distintos. Debes mantener tu distancia de él. ¿Me entendiste?"

Se quedó allí con gracia, luciendo hermosa con su vestido blanco y su largo cabello.

Emberly no pudo evitar soltar una risa sarcástica. Esa chica era igual que Felicia. ¿Acaso fingir ser frágil y dulce estaba de moda ahora?

Tenía que ir a otro lugar, así que dijo con impaciencia: "¿Quién diablos eres tú, de todos modos? ¿Y por qué te importa tanto si estoy cerca de Marco o no?"

Los ojos de Rhoda se tornaron rojos de furia. El odio que sentía por Emberly era evidente. "¡Cállate! ¡Una huérfana adoptada como tú no tiene derecho a cuestionarme!"

¿Adoptada? ¿Huérfana? ¿De qué estaba hablando?

"¿Te refieres a mí? ¿Quién te dijo que fui adoptada?" preguntó Emberly, sorprendida.

"¿Qué? ¿Quieres negarlo? Felicia de la Clase 1 es tu hermana, ¿no? Solo fuiste adoptada por sus padres recientemente, pero te has vuelto tan arrogante. Debes tener una clara estimación de ti misma. Bájate de tu pedestal. ¡De lo contrario, te haré caer yo misma!" Rhoda amenazó con desdén.

Emberly se inclinó hacia adelante y le susurró al oído: "Tienes razón en algo. La gente debe tener una clara estimación de sí misma. Dicho eso, quiero que sepas que en realidad soy la hija biológica de la familia Hammond, y Felicia es la adoptada."

Luego mostró una sonrisa extraña.

La mandíbula de Rhoda cayó. ¿Cómo podía ser posible? ¡Debía estar mintiendo!

"¡Bah! Eres una mentirosa. ¿Cómo te atreves a intentar cambiar la historia? Me pregunto qué estaba pensando la familia Hammond cuando adoptó a una chica despreciable como tú."

"Bueno, mejor hazle esa pregunta a Felicia. Ahora, no lo repetiré otra vez. ¡Quítate de mi camino!"

El rugido de Emberly fue intimidante. Los corazones de las chicas se detuvieron por un instante. Le abrieron paso sin pensarlo dos veces.

Fue fácil para Emberly adivinar cómo se había propagado semejante mentira. No podía ponerlo más allá de Felicia. Esa chica parecía alguien que usaría trucos sucios para causar problemas.

Una vez que cruzó la puerta de la mansión de la familia Hammond, Felicia la saludó con una sonrisa.

Emberly caminó hacia ella y murmuró: "¿Fui adoptada? ¿Cómo te atreves a difundir una mentira tan ridícula? ¿A quién crees que dejarías en ridículo al final, a mí o a nuestros padres? ¡Eres asquerosa, por decir lo menos!"

Luego subió las escaleras sin esperar una respuesta.

La sangre de Felicia hervía mientras miraba la espalda de Emberly. Apretó los puños tan fuerte que sus uñas se clavaron en las palmas. Su cuerpo tembló ligeramente mientras gritaba en su mente. ¿Cómo se atrevía esa perra a hablarle de esa manera?

Dejando de lado los resultados del ADN, ella era la única digna de ser la hija de esa familia. ¡Nadie podía quitarle su lugar allí!