Capítulo 4 Sentando los pies en la tierra

He definido que es lo que quiero ahora, he mirado a un mundo lleno de lujuria y perversión y creo que pertenezco aquí...

Me despierto con una armoniosa música clásica y al abrir los ojos, unos destellos de luz me bañan lentamente con su calor. Noto que no está Jorge a mi lado y aunque mi preocupación cunde de momento, se me pasa. Los momentos vividos con él me arropan y me hacen querer estar en la cama un poco más tratando de sentir esas sensaciones que me transportaron al cielo.

Un olor a huevo frito me pone de buen humor, pero de repente me frena, haciéndome entrar en trance.

(⸺Corre, tu abuelo está a punto de llegar, guarda todo y siéntate ⸺Decía mi abuela rápidamente.)

Recuerdo que ella empezaba a freír huevos a las 6 de la tarde y ya sabía que era un aviso de que mi abuelo vendría muy pronto, más pronto de lo que pensaba. Soltaba todo lo que hacía y hacia lo que ella mandaba, pero ¿Por qué? ¿Por qué tanto terror de inmediato?

Mi abuelo Cesar es de las personas más machistas, sinvergüenzas, manipuladores y prepotentes que he conocido, sin embargo, también era un cobarde, un maltratador de mujeres y un degenerado. ¿Qué decir más? De ahí aprendió mi hermanito algunas cositas. Sin embargo, algo que lo caracterizaba es que no podías ser feliz a su lado, una aurea oscura lo rodeaba y si te veía ser feliz, de inmediato te hacia la vida un infierno.

Aún recuerdo esa tarde de febrero; no soy de mucho salir y jugar, pero ese día me atreví a mucho. Salí a dar una vuelta en bicicleta al frente de mi casa. Como dije, nunca salía y después de hacer mis deberes decidí tomarme un descanso.

Estaba emocionada ya que sabía manejar la bici y quería sentirme libre un momento. El olor a huevo no era clásico de esa hora, pero debí de saber el aviso de que un tormento me esperaría. Eran las cuatro de la tarde, el sol se estaba dando su descanso y la tarde estaba serena, sin embargo, aunque hicieron todo más temprano, no lo entendí a tiempo.

Todo parecía una crónica de una muerte anunciada: Mi familia recogiéndose, la calle estaba desolada, todo estaba de acuerdo a una película de terror. Mi hermano y yo éramos felices sintiendo el aire correr en nuestras caras y la felicidad duró poco.

Llegó él bajándose de la moto, haciéndose eco por el sonido de esta, no sentía temor en el principio ya que no estaba haciendo nada "malo". Nunca me había pasado lo que me pasó ese día. El furor y la ira eran parte de su mirada, pero solo lo noté una vez me dí cuenta que tenía la correa en la mano.

Él se sacó este instrumento de tortura y empezó a mirarnos mal a mi hermanito y a mí, más a mí.

⸺¿Qué creen que están haciendo? ⸺Preguntó con sumo enojo, parecía un demonio andante, con un olor a alcohol bastante repugnante.

⸺Estamos jugando... ⸺Dije sin titubear, desde ese día nunca le dirigí la palabra de manera normal.

Como si de un saco de papas se tratase, nos agarró a mí y a mi hermano de los bracitos y nos arrastró hasta una pared que había dentro de la casa. En esta pared conocí el dolor. Empezó a golpearnos una y otra vez, sin siquiera una justificación o un porqué. El dolor en mis piernas y brazos me recorría rápidamente, después de esto y de media hora de golpearnos sin descanso se rindió y se fue. Me dí cuenta que estaba sangrando en mis pies, piernas y brazos, al igual que mi hermano. Mis nalgas y barriga estaban laceradas y no podía casi caminar. Nuestro llanto era muy fuerte y con agonía, sentía la muerte cerca y pensé que después de esto no la contaría.

Mi lloro siguió por muchas horas más, tanto que mi garganta estaba lacerada de tanto gritar. Mi hermano estaba igual. Solo teníamos 5 años.

SOLO ERAMOS UNOS PUTOS NIÑOS ¡JODER! ¿Es que nadie tiene sentido común en esta puta familia? ¡Nadie! ¿¡DONDE ESTABAN TODOS ESOS QUE DICEN QUE LO QUE SUFRÍ ES PARA MENOS!? ¿Dónde DEMONIOS ESTABAN?

Sin embargo, después de este día volvieron más días, meses y años en que cada día era el mismo sufrimiento. Todo iba en repetición y pensé que nunca saldría de este bucle, hasta un día.

Los golpes en vez de hacerme fuerte, hicieron que me debilitaran a tal punto de hacer el intento de suicidio dos veces. Odio los comentarios estúpidos de las personas que dicen que los golpes en la vida te hacen más fuerte... joder, que idiotas son. Te pueden hacer fuerte cuando tienes una buena base emocional, pero yo no tenía una. Jeje. Que divertido es comentar cuando no estás pasando por ello.

Entonces ¿Por qué él no me terminó de matar? ¿Por qué me usó como costal de huesos para golpes todos estos años y no dio el último golpe? Es algo simple, a él le encanta el sufrimiento y que mejor forma de dejar a la víctima viva y seguir aprovechándose de ese sufrimiento. Es simplemente hermoso para él.

Cedió a no hacerlo más porque ya está viejo, de seguro tiene cáncer de hígado por tanto alcohol bebido en años, pero no se sabe. Dio pasó a otra forma de violencia que odié aún más, porque, aunque los golpes suelen, esto desaparece con el tiempo. La violencia verbal es la que no ha desaparecido de mí. Entre todos se confabulaban para de que a partir de mis 15 años todo se volviera más confuso, más horrible y un completo infierno.

//

⸺¿Amor? ⸺Preguntó Jorge preocupado ⸺Ya está el desayuno hecho ¿Te acabas de levantar? Veo que miras un zapato.

⸺Eh... sí amor. Me acabo de levantar, voy a ir a desayunar ahora, dame un momento para lavarme la cara ⸺Dije sonrojada.

Él aun no conoce a plenitud mi vida. De seguro pensó que era normal que me levante y mire a la nada, pero no es así. Después le voy a decir.

(...)

Desayunamos en paz, sin embargo, notaba como Jorge estaba sin dejarme de mirarme.

⸺¿Qué pasa? ⸺Pregunté curiosa.

⸺Nada mi amor, bueno ⸺Dijo un poco temeroso ⸺No quisiera alarmarte ni que pienses que estoy siendo malo.

⸺¿Qué pasa? ⸺Pregunté más alarmada, ¿algo hice mal?

⸺Es que tengo que salir unos días y no quería dejarte sola. Pero tendré que hacerlo porque tengo que empezar a trabajar y buscar a mi papá durará más de lo tardado.

⸺¿No puedes llevarme contigo?

⸺No amor, son negocios y no quiero que estés en medio ⸺Dijo triste.

Me levanté de la mesa. Se me había quitado el hambre. Busqué rápidamente un cigarrillo para fumarlo en la habitación. No quería que se vaya tan rápido y más cuando apenas estábamos disfrutando como pareja en esta casa tan linda.

Empecé a fumar y a tratar de no pensar en esto. Pero con ver la maleta en la sala entristecí más. Por el humo del cigarro mi garganta comenzaba a secarse así es que continuamente iba a la cocina y bebía algo de agua.

Ya Jorge no estaba ahí, sino que estaba en la habitación buscando algunas cosas. Me dolía, pero no quería enfrentarlo. Así que me quedé en una esquina de la habitación mientras lo veía moverse.

Fue en uno de esos momentos mientras me servía un vaso de agua que Jorge entró a la cocina. Se acercó a mí y cuando iba a irme me abrazó.

⸺¿Ya te vas? ⸺Preguntó de manera sexi ⸺¿no te vas a despedir de mí?

Al estar tan cerca de sus labios, de pronto sentí que mi deseo de besarlo era incluso mayor al que él podía sentir. Inmediatamente mi respiración se aceleró junto con mi corazón, quería ceder al impulso de besarlo sin parar, pero me contuve, le dejaría a él tomar la iniciativa.

No me besó.

⸺Lo mejor siempre se deja para el final ⸺Dijo él solamente siguiendo su camino a la habitación.

Me comporté como si no me importara, no quería que él se diera cuenta de cuanto lo deseaba en ese preciso instante. Todo mi cuerpo fue recorrido por una ola de calor que estremeció cada poro de mi ser. No conseguía concentrarme en otra cosa que no fuesen sus labios, un suave cosquilleo recorría mi piel cuando recordaba sus leves caricias.

Sin embargo, él me buscó nuevamente y me propuso algo.

⸺Antes de irme, necesito que conozcas bien la casa mi amor. Así sabes por donde moverte ⸺Dijo él sonriéndome.

Asentí. Salimos a dar una vuelta al jardín, reímos y bromeamos como solíamos hacer y volvimos al edificio. Estábamos en el pasillo cuando el me detuvo, diciendo que quería su despedida. Nos acercamos lentamente, con suavidad nuestros labios comenzaron a fundirse. Definitivamente era el mejor beso que me habían dado, era como si químicamente fuésemos totalmente compatibles.

Mis manos se perdían en su pelo y él con delicadeza recorría mi cuerpo, sus labios bajaron por mis mejillas y mi cuello. Tengo una piel muy sensible, por ello no podía evitar dejar escapar pequeños gemidos, mordía mi labio para acallarlos, Incapaz de establecer un límite, clavando mis uñas en su espalda, debido a mi creciente excitación, ni una sola palabra podía salir de mis labios, solo podía expresar mi lujuria mirándolo a los ojos pidiendo más de él.

Solo un beso y yo ya estaba totalmente mojada, múltiples escalofríos recorrían mi piel. En un momento de éxtasis él me tomó en brazos poniéndome contra la pared, automáticamente mis piernas lo rodearon. Su mano derecha recorría mi espalda y la otra se perdía en mis oscura cabellera. Nuestros sexos se frotaban por sobre la ropa, no tardé en sentir claramente su miembro duro y todo por mi causa. La temperatura me subió, cada vez se me dificultaba más respirar, mordí mi labio con excesiva fuerza para evitar dar el gemido que se posó en mi boca cuando estrechándolo contra mi cuerpo llegué a acabar como hace muchísimo tiempo no lo hacía... aunque ignoro si él se dio cuenta.

No entiendo como Dios le da un cuerpo tan sensible a una muchacha que intenta ser tan correcta... por no decir mojigata. Solo me había besado, sin siquiera rozar mis pechos, sin sobrepasarse, solo rozando mi suave piel y me había llevado a sentir un placer que creí no volvería a experimentar.

Él detuvo el beso y me miró con pena.

⸺Ya tengo que irme. Volveré en una semana. Te lo prometo mi princesa ⸺dijo dándome un beso en la frente.

Lloré un poco. Él se iría y estaría sola aquí. Pero está bien. Él tiene que buscar lo mejor para los dos.

Me despedí de él mientras lo veía partir por la puerta. Entré de inmediato a mi habitación y empecé a llorar en la cama. No podía procesar lo que había pasado.

Sin embargo, lo superaré, sé que podré hacerlo.

(...)

Noté que a las horas mi celular sonaba como loco. Varias llamadas había perdidas, unas de un numero desconocido, otras de mi mamá. La tercera persona que me llamaba era Jorge.

⸺¿Qué pasó amor? ⸺Pregunté preocupada mientras quería saber que pasaba, no era normal que Jorge me llamara así, tan desesperado.

⸺Se me olvidó decirte que un amigo irá a vigilarte. No quiero que te pase nada malo y es el único que pude encontrar disponible para que te acompañe. Se llama Jerome, es un negro escuálido y alto. Tiene el cabello largo y además es gay. ⸺Tomó una pausa para seguir hablando ⸺No le abras la puerta a nadie que no responda por la frase "Hey ¿entiendes el idioma del taco?"

⸺Esa frase te la acabas de inventar ahora, no es así ⸺Dije de manera irónica.

⸺Como sea, si alguien toca la puerta y después de lo que dices no responde "Sí, alabado sea el taco" No le abras, entonces no es Jerome.

⸺¿No es más fácil preguntarle su nombre? ⸺Pregunté anotando lo que me estaba diciendo.

⸺No, después te explicaré todo. Ya Jerome salió para allá. Te mandaré una foto de él y después tienes que romper el celular. No nos conviene que andes con ese aparato. Te mandé uno nuevo con Jerome. Hablamos preciosa ⸺Dijo colgando.

Todo esto es muy extraño, la verdad. Bueno "alabado sea el taco". Es que joder, es un disparate. Jorge tiene razón, no romí el chip, solo lo introducí en un nuevo celular. Debí de romperlo, pero lo haré en un momento.

Tal como dijo Jorge, en 5 minutos estaban tocando la puerta. Me puse una camiseta larga de Jorge y unas licras que había en mi maleta y miré de reojo por la ventana. El chico estaba bien descrito a como dijo Jorge, pero este andaba bien vestido. ¿para donde es la gala?

⸺hey ⸺Dije con nervios, lo que diría es muy estúpido ⸺¿Hablas el idioma del taco?

⸺Sí, alabado sea el taco ⸺Oí como la persona trataba de contener la risa ⸺Confíe señorita, soy Jerome.

Abrí la puerta con duda, pero la abrí.

Ahí estaba Jerome, no era tan alto, al menos nos llevábamos 15 centímetros de diferencia. Su sonrisa era amable y bueno, las descripciones eran bastante exactas, sin embargo, me gustaría añadir algo: no parece gay.

No se veía tan masculino, pero como mujer sé cuándo una persona da una vibra más o menos a otra orientación. Solo era un chico normal, que por alguna razón tenía una hermosa sonrisa y unos ojos bastante profundos que le daban misterio.

Me cae bien y aún no lo he tratado.

⸺Buenas tardes ⸺Dije con cortesía ⸺Perdoné la estupidez de mi esposo. De seguro no es la primera vez que hace una estupidez así.

⸺Está bien. No es la primera vez que lo hace ⸺Dijo riéndose ⸺Tranquila, hay una casa entera para los dos y yo me quedaré cerca, en el patio estaré cuidando y revisando todo. Más que amigo de Jorge, soy su guardaespaldas.

⸺Oh ⸺Dije sorprendida ⸺¿Pero porqué él tiene guardaespaldas?

⸺¿No le ha comentado? Bueno, en este caso no es de mi incumbencia decirle. Usted le pregunta de manera pacífica que tipo de trabajo él hace y de seguro se lo dirá.

⸺¿Gracias? ⸺Dije confundida ⸺Es que no entiendo nada. Si fueras tan amable de expli... ⸺Dije, pero el teléfono me interrumpió. Era una llamada de mi madre.

Salí de la sala sin decirle para buscar un lugar más cómodo para hablarle. No sabía que decirle o que reaccionar. Solo contesté.

⸺Dime ⸺Dije con duda.

⸺¿Qué te pasa? ¿Por qué no has regresado a casa? ¡Tienes que limpiar la casa porque viene gente importante hoy y tú eres quien se encarga de eso basur... ⸺La voz de mi madre era agresiva y molesta. Sin embargo, arrojé el celular a la pared y lo terminé de romper.

Empecé a llorar por el coraje y la rabia que me da que ni siquiera se haya preocupado un poco por mi ¿Qué más muestras necesito para darme cuenta de que es una basura insignificante que solo me jodió la vida? ¿Qué más tengo que ver? Me duele y me rompe tanto el corazón que nunca me haya querido.

Es un horrible ser humano al que nunca quisiera volver a ver, por favor Dios no.

Pero aun la quiero...

Es un debate mental que nunca entenderé.

⸺¿Señorita que sucede? Digo, te llamas Jude ¿No es cierto? ⸺Oí la voz de Jerome a mis espaldas.

⸺Estoy bien ⸺Decía entre sollozos mientras me limpiaba las lágrimas rápidamente.

⸺No, no lo está y además no debería de estar su celular roto ⸺Dijo un poco preocupado ⸺¿Qué sucede?

⸺Nada, solo perdone por las molestias ⸺Dije un poco apenada ⸺¿Está bien usted?

En ese instante él me abrazó fuertemente y juro que de verdad lo que más necesitaba en ese momento era un fuerte abrazo. Me vino como anillo al dedo y me sentí más que feliz. Pasaron minutos, creo... aunque este abrazo es disfrutable y quisiera que fuese eterno, debía de terminarlo para irme a bañar y dormir un poco.

⸺Y bien. No te preocupes por mí. Yo estoy muy bien ⸺dijo al terminar de abrazarme ⸺Quiero que me hables de ti. Eras una chica dulce y risueña... ahora estas con la mirada perdida y el semblante decaído a pesar de que ya estas calmada.

⸺La vida no ha sido buena conmigo, eso es todo ⸺suspiré.

Él medito un poco mis palabras, estaba pensando en que decirme. Pero me miro a los ojos con amor.

⸺Puedes desahogarte conmigo. No nos conocemos bien, pero prometo estar para usted siempre ⸺Dijo siendo comprensivo.

¿Desahogarme? Es una palabra que no había escuchado hace mucho tiempo. Vacilo en cuanto a hacerlo o no. Aunque tenemos mucho sin hablar sé que él está presto para todo, pero ¿yo estaré lista para recordar todo el daño hecho en mí y decirlo sin caer en un dolor profundo y desesperante?

Trago un poco de saliva y suspiro. Miro a los ojos de Jerome quien está expectante a lo que hago. Abriré mi corazón a alguien desconocido y no está mal. Supongo.

⸺Eres la primera persona que le contaré absolutamente todo lo que me ha pasado... ¿puedo confiar en que guardarás el secreto?

Él tomo mi mano y me miró con amor.

⸺Confía en mí.

//

⸺(...) Desde ahí mi vida ha sido un infierno, mi madre me trata como una sirvienta, mi hermano me odia. Caí en las drogas porque no aguanto esta maldita vida y no sé qué he estado esperando para suicidarme. ¡Odio mi vida! ⸺grité, con todas mis fuerzas. Lloré desconsolada. Jerome tenía los puños cerrados, este le dio un golpe fuerte a la pared y fue a abrazarme mientras él también lloraba.

Ambos estábamos llorando abrazados uno del otro. No sé cómo llamar a esto. Se siente liberador una vez decir lo que tienes guardado. Tantos años acumulando esto... me duele, me asfixia. No sé qué he hecho para merecer esto.

⸺Ya no estás sola, aquí estoy yo y de ahora en adelante las cosas saldrán mejor. ¿Está bien? ⸺Dijo tratando de darme ánimos.

Asentí y decidí que era hora de acostarme, no quería seguir sufriendo más por personas que no valen la pena. Jerome respetó mi decisión y me encaminó hasta la cama.

Me acosté en la cama, me sentía sin fuerzas. Jerome se acostó a mi lado abrazándome. Mis ojos se cerraron lentamente y me olvide de todo por un momento. Sentía que era el momento de descansar. No me importaba que era un desconocido, de alguna forma me sentía en libertad con él para descansar y ser yo. Para este punto no me importa nada y simplemente desearía terminar con mi vida.

(...)

Sentí un olor dulce y delicioso de repente. ¿Pero cómo? Abro mis ojos lentamente y miro alrededor, confundida. Todo era pequeño, adorable. Veo a Jerome cocinando algo. Caí en la realidad. Estaba en la casa de Jorge. Mire hacia la ventana y el sol estaba saliendo... espera ¿No que debía de acostarse? Oh no, entro en pánico, pase la noche fuera de casa y sin avisar, eso me traería serios problemas, algo que no quiero en estos momentos.

⸺Buenos días ⸺dijo Jerome ofreciéndome unos panqueques ⸺¿Qué pasa?

⸺Nada, solo que creo que debo de volver a mi casa ⸺Dije confundida.

⸺¿Que dices? No sé si aún andas con sueño, pero te recuerdo que anoche me dijiste que no tienes casa a donde ir. Recuerda que estas casada, esperas a tu esposo que viene en unos días y que estas a mi cuidado ⸺Dijo él devolviéndome a tierra.

Es verdad, tiene razón.

⸺Perdona, han sido tres días de confusión extrema. De seguro ando con sueño ⸺Dije riéndome.

De seguro es así, no lo dudo.

Una vez más volví a dormir.

            
            

COPYRIGHT(©) 2022