Darnpectra: El Arte del Mal.
img img Darnpectra: El Arte del Mal. img Capítulo 9 Sangre en el mar.
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Capítulo 11 La liebre de nieve y el ascenso de los elite. img
Capítulo 12 Misión de rescate. img
Capítulo 13 La excelencia de Percival. img
Capítulo 14 La verdad sobre el reino que alguna vez existió. img
Capítulo 15 El rescate de un peón. img
Capítulo 16 El escape perfecto. img
Capítulo 17 El ascenso de una sombra. img
Capítulo 18 Raedrigon el Infernal. img
Capítulo 19 Cuestionamiento de lealtad. img
Capítulo 20 Rescate del infernal. img
Capítulo 21 La caída de Treal. img
Capítulo 22 El regreso de Raegridon y el fuerte sentimiento. img
Capítulo 23 La caída del mandamás. img
Capítulo 24 Una eterna despedida. img
Capítulo 25 Redención del mal. img
Capítulo 26 Lilful y la posada. img
Capítulo 27 El hogar de las sombras. img
Capítulo 28 Noticias satisfactorias. img
Capítulo 29 Alianzas poderosas. img
Capítulo 30 Jeffery y el pórtico recital de los gritos. img
Capítulo 31 La erradicación de la magia de las sombras. img
Capítulo 32 Atracciones letales. img
Capítulo 33 La reina del vacío. img
Capítulo 34 Randall y los tritones de Pearsea. img
Capítulo 35 El fogoso Hamlin. img
Capítulo 36 Alteorgr y Nigrimux. img
Capítulo 37 El regreso del más allá. img
Capítulo 38 Las oscuras intenciones de Nigrimux. img
Capítulo 39 Reunión de Titanes. img
Capítulo 40 Las espadas legendarias. img
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Capítulo 9 Sangre en el mar.

La sombra nocturna había hecho un largo viaje hasta la ciudad portuaria de Sinispear, dónde tomaría un barco directo a la isla en la que se realizaría el gran evento. La perla negra del mar. Estaba nevando, y hacia un frío de muerte, pero Brigham se sentía bien, pensando un poco en Percival, quizás en los buenos momentos.

«¿Buenos momentos con Percival?» pensó arqueando la ceja, no recordaba que él tuviera buenos momentos con Percival, pero su ausencia podía sentirse. De hecho, parecía que una sensación extraña surgía cuando pensaba en el brujo.

Brigham estaba abrigado de arriba abajo, pero un extraño calor le surgía al pensar en Percival.

«¿Cómo estará?» imagino, pero al mismo tiempo no entendía porque razón pensaba en él, ¿Era a caso la soledad? Si, seguramente era eso, Imaginaba nuevamente. Se había acostumbrado a tenerle cerca molestando y llegar a la ciudad portuaria, sin Percival o "Aullido Fantasmal Maldito" mejor llamado "Fantasma" (según Percival). Le género cierta sentimiento de nostalgia. Haber compartido tiempo junto a Percival y el lobo le recordó el calor que se sentía tener una familia. Brigham no recordaba mucho de eso, pues su familia había sido asesinada cuando el apenas y comenzaba a tener memoria, no recordaba tantos buenos momentos, pero si algo era imposible de borrar de la memoria, era ver cómo su familia era masacrada por Nordiha.

Sin embargo, podía recordar a su madre cargándole y mimándole. Y a su padre dándole cariño.

Tal vez Brigham comenzaba a añorar esos tiempos en aquel castillo junto a su madre, su padre y sus hermanos. Pero sentía que tal vez su destino era otro, quizás nunca tendría una familia, una bella esposa o hijos. Tal vez estaba destinado a ser un asesino durante toda la vida, pero parecía que algo en su corazón comenzaba a generarle una lucha interna y todo era por Percival.

«¿Por qué?»

«¿Por qué él invade mis pensamientos»

El cuervo comenzaba a sentir algo de molestia, pero al cabo de un rato olvidó al brujo y se centro en lo que debía hacer en la perla negra. Su fría mirada se dirigía al mar negro, mientras esperaba la llegada de algún barco cuál abordar, tenía ya su pasaje. Una mujer de ropajes oscuros al igual que los de él también parecía esperar pero la había ignorado desde asía buen rato.

«¿Otra sombra nocturna?» inquirió a sus adentros, la mujer también estaba abrigada de arriba abajo y no parecía querer ser molestada, tenía una mirada ruda y que podía cortar el ambiente como el cuchillo de un asesino nocturno. Al cabo de algunas horas en el anochecer, apareció un barco cuál podría abordar, la mujer también esperaba el mismo barco, lo que sugería que tal vez ella también era una asesina de las sombras. Era muy difícil sacar esa conclusión tan a la ligera, después de todo. Solo veinte sombras nocturnas habían sido elegidos para presentarse en los grandes juegos sombríos. Solo veinte de ellos, tendrían la posibilidad entre miles de sombras de volverse asesinos de élite mortales.

Ingresaron al barco, que también era abordado por diferentes personas, este era llenado con el cargamento de las personas ya seguidamente era abordado por ellos. Brigham aún tenía mucha curiosidad por aquella mujer, debía estar atento. Pues de ella ser una asesina de las sombras podía generarse algún conflicto. Después de todo, en los grandes juegos de las sombras, estarían allí para matar.

El viaje en barco sería largo, Loughty no podría dormir en todo el viaje. Además no tenía idea de quién era o no una sombra nocturna. Después de todo, ellos solían cubrir sus cuerpos de pies a cabeza para ocultar sus rasgos físicos.

Brigham mantenía sus ojos abiertos y trataba de mantenerse despierto golpeando su cara en reiteradas ocasiones o tratando de caminar por la cubierta del barco, notaba que algunas personas le miraban demasiado. Cosa que para él resultaba algo sospechoso, no era una mirada habitual. Las personas de Darnpectra estaban dañadas en el alma de tanta oscuridad. Pero la mirada de esas personas era la de un asesino a sangre fría. Claramente dentro del barco había más de una sombra nocturna. Cosa que resultaba interesante para el cuervo de la noche.

El no tenía ni la más mínima intención de tratar de asesinar a sus rivales, ya tendría tiempo de eso en los grandes juegos, dónde podría lucir sus técnicas ante el rey. Pero, de alguna de esas cucarachas tratar de siquiera intentar apuntarle con un arma no dudaría en lanzarlos por la borda, el agua estaba helada y sería una muerte cruel y justa para ellos.

Por el momento se mantendría al margen, trataría de no invadir el espacio de nadie, el barco era lo suficientemente grande para poder recorrerlo y encontrar un lugar tranquilo dónde evitar algún tipo de confrontación.

Al caminar se encontró con la mujer de asía algún rato, observaba el mar negro y parecía ignorar al resto de los tripulantes. Brigham se acercó para también mirar el mar, la observo de reojo pero ella le ignoro completamente.

«Quizás no es una sombra nocturna» pensó.

-Trata de intentar lanzarme al mar y te arrancaré los ojos -dijo la mujer, haciendo al cuervo de la noche sorprenderse, pero la realidad era que él no estaba allí para dañar al resto de los participantes.

-No tengo intención de lanzarte al mar, puedo degollarte fácilmente en los grandes juegos sombríos -le respondió Brigham. La mujer sonrió, pero esa sonrisa burlona no era capaz de presenciarse al mantener su nariz y mentón cubiertos.

-En el barco hay un grupo que intentará asesinarnos. ¿Deseas aliarte conmigo? -inquirió la dama. El cuervo de las sombras también se había percatado de eso. Esas miradas no le resultaban normales y le parecía muy perspicaz de parte de la mujer saber detectar el peligro.

-Por supuesto, la sangre no a corrido por mis cuchillos hace algunos días -le contesto. Pronto, los sujetos que tanto les observaban se levantaron de frio suelo de madera, dirigiéndose lentamente hasta ellos.

Brigham ocultaba dos cuchillos en las mangas de sus ropajes abrigados y sin ningún tipo de temor dirigió su mirar a los tres hombres que se acercaba lentamente hasta ellos. La mujer de cabellera tan oscura como la misma noche también clavo una mirada de advertencia a los sujetos. Quienes sacaron sus respectivas armas ocultas en sus ropajes.

Se trataban claramente de sombras nocturnas, y deseaban deshacerse de la competencia.

Para suerte de Brigham, la dama era una hábil asesina de las sombras, casi o incluso más experimentada que él. Ella, Rápidamente saco un cuchillo de una funda sujetada a su muslo, lanzando este a gran velocidad y clavando el arma en la cabeza del sujeto con una precisión increíble. Los otros dos hombres corrieron hacia Loughty, iniciando un enfrentamiento que el ágil cuervo de la noche podía sobrellevar fácilmente.

Los movimientos de las sombras nocturnas se volvían más rápidos en la oscuridad. Se trataba de una habilidad pasiva de ellos. Está habilidad se volvía más poderosa a medida que se entrenaba con mayor frecuencia.

Brigham evadió rápidamente los ataques con cuchillos para dar una voltereta hasta atrás, posicionando sus manos en el suelo y tomar impulso para dar una rápida patada en el estómago de uno de estos sujetos. Al tocar el suelo de madera, dio una patada en un radio de ciento ochenta grados.

El encapuchado con el que luchaba dio un salto rápido, evadiendo la acción para tocar nuevamente el suelo. El hombre lanzó una patada contra el cuervo en la cara, la cual evadió fácilmente, deslizando uno de sus cuchillos bajo sus mangas y así cortar el tendón del contrincante. Lo que le impediría caminar. El otro asesino que había caído por el fuerte impulso de Brigham se dirigió con velocidad hacia él. Pero rápidamente su compañera le recibió con un salto y de un rodillazo en la nariz, hizo regresar al enemigo contra el suelo.

El sujeto con el tendón cortado no podía luchar adecuadamente, pero no evito que Brigham le golpeara en un punto de presión para hacerle desmayar.

Por otra parte, la mujer y asesina nocturna se enfrentaba al otro encapuchado con una velocidad y precisión sorprendentes. Tanto que hizo ganar el respeto de Loughty. El enfrentamiento duro algunos segundos, hasta que la mujer le rompió la nariz y le hizo retroceder, hasta caer al agua helada. Dónde tendría una muerte horrible por congelación.

El otro asesino nocturno, no tenía ninguna posibilidad contra ellos.

-¿Deberíamos perdonarlo? -pregunto el cuervo a la mujer.

-No puede seguir peleando, pero por las dudas... -Ambos le perdonaron la vida, pero le amarraron a un mástil, dónde les serviría de advertencia al resto de sombras nocturnas que posiblemente se encontraban en el barco.

Luego de algunos días de viaje en barco, lograron llegar a la perla negra. La mujer y el hombre abandonaron el barco, la perla negra era una isla con escasos habitantes, conformado por pueblos que vivían mayormente de la pesca, la isla era grande pero sabían cuál sería la ubicación de los juegos de las sombras. En la isla había un gran coliseo que era utilizado para probar las habilidades de los brujos, dónde se realizaban incluso apuestas, por lo tanto sería allí a dónde se dirigirían.

            
            

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