Capítulo 9 Capítulo 9

Pero después de bastante tiempo, Lindsey mantuvo la calma, como si nada hubiera pasado la noche anterior.

Esto no puede estar bien. ¡No debería ser el caso!

Jessica dijo que Lindsey era solo un sustituto de esas mujeres baratas que intentaban acostarse con el mayor general y una herramienta para que el mayor general desahogara su deseo. ¿Cómo podría Lindsey soportar eso?

El mayor general no conocía a las mujeres, pero ella sí. Una chica con un temperamento extremo como Lindsey siempre tuvo un gran respeto por sí misma. En lugar de eliminar el malentendido, sus palabras probablemente intensificarían el conflicto entre Lindsey y Yoel.

Lindsey vio con calma la expresión de Jessica y se burló en su corazón.

Esas mujeres eran sólo los chivos expiatorios. Jessica fue quien realmente drogó a Yoel, pero simplemente no esperaba que las cosas salieran así.

En su vida anterior, cuando Lindsey escuchó a Jessica hablar tranquilamente sobre lo que pasó anoche, solo sintió que era muy desagradable y sucia. Lo que era peor, esto se había hecho público. Lindsey se sintió tan humillada que gritó como loca. Pero ahora, ¿cómo podría simplemente irritarse con estas palabras?

Lindsey inclinó levemente la cabeza y preguntó en un tono indiferente e incrédulo: "¿No lo hizo por su propia voluntad? Estuvo contigo anoche. ¿Por qué no tuvo sexo contigo entonces?"

Lindsey se estaba burlando de esta mujer, pero no era muy buena haciendo una expresión desdeñosa e irónica, por lo que parecía muy sincera. Lo decía en serio y realmente despreciaba a Jessica.

Sí, aunque Yoel estuviera drogado, tampoco quería a Jessica. Este era realmente el punto doloroso de Jessica.

"Tú..." Jessica quedó profundamente sorprendida por las palabras de Lindsey con los ojos bien abiertos. No esperaba que Lindsey dijera eso delante de Yoel.

Antes de que Jessica recobrara el sentido, Lindsey agitó la mano con impaciencia y continuó: "Bueno, ¿Yoel me pidió que bajara sólo para esto? Está bien, ya lo entendí. ¡Puedes irte ahora!".

Lindsey siempre había sido distante y fría, y sólo aquellos que le importaban tenían la oportunidad de ver su suavidad e ingenuidad. En su vida anterior, se había dedicado a ese hombre sin corazón. Pero ahora, Yoel era el único con quien estaba destinada a ser buena.

A Jessica le tomó bastante tiempo entender las palabras de Lindsey. Además de ser grosera, en realidad estaba gritando el nombre del mayor general.

"¡Cómo te atreves!" ¡Jessica no pudo contener más su ira!

"¿Quién te crees que eres? ¿Cómo te atreves a llamar al mayor general por su nombre?"

El nombre de Yoel era una leyenda. Nadie podía pronunciar su nombre. Al menos en los últimos dos años como ayudante personal de Yoel, no vio que nadie se atreviera a llamarlo por su nombre, ¡a excepción de esas personas tan respetadas!

Lindsey no pudo evitar poner los ojos en blanco y pensó en su corazón: "Como ayudante personal de Yoel, debe sentirse muy bien consigo misma e incluso se atreve a regañarme. ¡Está tan fuera de lugar!".

A Lindsey le gustaba llamar a Yoel por su nombre. Cuando conoció a Yoel a los 13 años, ella lo había llamado directamente por su nombre, porque no quería llamarlo hermano ni tío.

Jessica miró la expresión desdeñosa de Lindsey y no pudo evitar volverse para mirar a Yoel. Pensó que Yoel al menos diría algo.

Pero en ese momento, Yoel llevaba mucho tiempo inmerso en sus emociones y no prestó atención en absoluto a la conversación entre las dos mujeres.

Su rostro ya estaba sombrío. Al pensar en los comportamientos anormales de Lindsey hoy y en las palabras de Jessica, Yoel temía que Lindsey probablemente intentara suicidarse. ¡Al pensar en esto, finalmente no pudo controlar sus emociones y comenzó a volverse violento!

"¡Grieta!" ¡Yoel aplastó repentinamente la copa!

¡Yoel estaba enojado en silencio a un lado!

La leche blanca como la nieve se derramó por todo el suelo. ¡La mano de Yoel fue cortada por los fragmentos de vidrio y ahora estaba sangrando!

"¡Ah!" Lindsey exclamó, sintiéndose muy arrepentida. Estaba tan concentrada en lastimar a Jessica, que olvidó que ¡Yoel también podría irritarse con sus palabras!