AVA
Una semana después
-Kevin, estoy bien. Estoy haciendo la compra, literalmente-. Le digo al hombre sobreprotector por teléfono, mientras sostengo mi cesta de comida.
-Siempre me voy a preocupar por ti, Ava. No necesitarías hacer la compra si te mudaras conmigo-. Dice y sé que probablemente puso los ojos en blanco mientras lo decía.
-Kevi