NIMUE
Desperté con un dolor de cabeza de los mil infiernos, traté de abrir los ojos pero sentía los párpados muy pesados. Intente moverme y noté que estaba amarrada a una silla con las manos atadas detrás de mi espalda y mis piernas atadas a las dos patas delanteras.
Levanté despacio mi rostro y abrí los ojos poco a poco, acostumbrandome a la po