Alexander
Cada día que pasa es una tortura. Por mi mente viajan una y otra vez todas las opciones, todo lo que le puede estar sucediendo allí, y cada una me deja peor que la anterior.
En estas circunstancias me gustaría no conocer a Brendan, porque si no lo conociese pensaría únicamente en las mejores posibilidades. Pero, por desgracia, ya sé de