Por fin ha llegado el día que más esperaba de este año 1553. Aún me cuesta creer que ya voy a poder participar en el Gran Baile, pero es así. Cuando era niña soñaba con el día en el que pudiese ir por primera vez, pues me hacía muchísima ilusión. Vestirme hermosa y bailar eran dos cosas que me encantaban, así que deseaba con fervor la llegada de mi