Ansol
Pese al dolor que papá y yo cargábamos luego de que todo sea revelado, decidimos que lo mejor era hacer de cuenta que nunca conocimos a ese ser humano despreciable. Pensando quizás que lo mejor para dejar como recuerdo en nuestra cabeza es negarnos a la realidad y ocuparla con una ilusión, una que dolería igual, pero no sería tan traumante c