<< -Voy a preguntar una vez más -dijo comenzando a perder los estribos-. ¿Qué hay detrás de esa puerta, Valet?
El nudo en la garganta se hacía cada vez más insoportable. Sentía que hasta hablar dolía.
-No lo sé -contesté de nuevo después de que me hubiese preguntado por tercera vez sobre aquella habitación.
Sonrió negando, pero no fue una sonr