-Yo no uso zapatos incomodos –respondí y el suspir –tiene dinero, señor sin ofender, cómprese unas zapatillas deportivas –sugerí y el parecido pensativo.
Avanzamos un par de metros, e ingresamos en un local de ropa deportiva. En la vidriera, había unas zapatillas negras deportivas muy bonitas. –Mire, son lindas y elegantes señor –sugerí y el ascend