Asentí y pronto llegué al lugar de encuentro. Al hacerlo, pude apreciar el bonito sitio. Habían algunas parejas, dí mi nombre a la recepción y avancé. Tenía una cartera nueva, debía esmerarme para la ocasión.
Miles de preguntas se formaban en mi mente ¿Me pediría matrimonio?
No lo sabía, pero debía estar preparado.
Mientras esperaba, comencé a bebe