La lluvia caía con fuerza cuando Lucía y Alejandro se encontraron frente a una discreta mansión en las afueras de la ciudad. La dirección había sido un rompecabezas resuelto gracias a la grabación de Eliseo. Ravenwood no era solo un nombre, sino también un lugar: una propiedad que figuraba en los documentos financieros que Lucía había descifrado du